Tras la devaluación del peso suben fuerte los precios mayoristas y es inminente un aumento en los combustibles
Tras las elecciones PASO, que posicionaron al actual gobierno en un escenario incierto, se ha generado un efecto dominó en la economía, afectando diversos sectores y dejando a las petroleras en espera de definiciones para reabastecer sus redes de Estaciones de Servicio.
Al respecto, el exsecretario de Energía, Daniel Montamat, compartió con surtidores.com.ar su perspectiva sobre la situación. Montamat señaló que “no existe otro camino hoy que el de aumentar los precios de los combustibles“.
Este cálculo se fundamenta en un escenario que sorprendió a muchos debido al impacto económico provocado por el resultado electoral, y que llevó a que el dólar oficial haya aumentado a 350 pesos, representando un incremento del 21,8 por ciento en relación con su valor anterior.
Montamat instó al gobierno a implementar este ajuste de manera “inmediata”, argumentando que retrasarlo podría desconectar los valores internos de los internacionales, enviando una señal negativa al mercado de hidrocarburos y afectando el suministro normal de combustibles.
“La Argentina no tiene dólares, las reservas netas son negativas y depende de un acuerdo con el FMI para no incurrir en un nuevo default, pero resulta que ese acuerdo hoy tiene nuevos actores ya que el organismo tendrá que conversar con los referentes de los tres espacios electorales“, agregó Montamat, quien también se desempeñó como presidente de YPF.
En este contexto, el exfuncionario concluyó que es imperativo que la cadena de valor petrolera realinee sus precios acorde al nuevo valor del dólar oficial, tal como lo hacen otras actividades productivas. “No hacerlo podría poner en riesgo aún más la rentabilidad de las Estaciones de Servicio y afectar el suministro de combustibles en el país”, alertó.
Fuentes del mercado aseguraron a este medio que las petroleras “ajustaron primero los precios mayoristas un 25 por ciento promedio”, decisión que afectará a las estaciones sin marcas, que deben proveerse de un distribuidor provocando un fuerte desfasaje con sus competidoras abanderadas.
“Las compañías sin embargo, pondrán más atención a los volúmenes de entrega a las estaciones con las que mantienen un contrato comercial, lo que derivará de alguna manera en el desabastecimiento en el segmento de las Blancas”, advirtieron.