Experiencia Mbya Guaraní en Itapoty Miri: descubriendo los misterios de la selva en Iguazú
Iguazú es reconocida como uno de los destinos turísticos más destacados de Argentina, continúa ofreciendo una amplia gama de actividades que enriquecen la vivencia de aquellos visitantes que llegan para contemplar el majestuoso espectáculo natural de Las Cataratas del Iguazú, el mayor despliegue de agua y selva del mundo.
Entre las diversas propuestas disponibles, sobresale la visita a la reserva natural y cultural Selva Iriapu, hogar de la comunidad Mbya Guaraní Itapoty Miri. Esta iniciativa turística tiene como objetivo principal revalorizar la rica cultura, historia y el modo de vida de esta comunidad.
La experiencia que ofrece Mbya Guaraní Itapoty Miri se caracteriza por sumergir a los visitantes en la autenticidad de la cultura guaraní y en los misterios cautivadores de la selva misionera, a través de un fascinante recorrido experiencial.
El itinerario comienza explorando los senderos de tierra roja que conducen al mirador Itapoty Miri, ubicado junto a la laguna Yy Araku. Este mirador se convierte en el escenario perfecto para llevar a cabo actividades de observación de aves propias de la selva paranaense. Entre las especies que se pueden avistar se encuentran loros, tucanes, pilinchos, garzas, saracuras, hurracas, patos y pitogüés, entre otros.
Rodeado de una exuberante vegetación, este entorno natural proporciona un ambiente único para el desarrollo de diversas especies de aves acuáticas y voladoras, generando una sinfonía de sonidos inolvidables en cada visita.
La travesía continúa por un sendero interpretativo diseñado para familiarizar a los visitantes con las especies características de la selva de Misiones, así como con plantas medicinales utilizadas por la comunidad. Además, se ofrece una visión de la vegetación utilizada en la confección de artesanías y diversos tipos de trampas utilizadas tradicionalmente en la caza.
Para aquellos más aventureros, se brinda la oportunidad de disfrutar de una experiencia única al utilizar una hamaca natural, creada a partir del isipó, una planta trepadora que crece en los montes de Iguazú. Estas hamacas cuelgan de los robustos árboles, proporcionando una experiencia emocionante para los visitantes.
El recorrido culmina en un amplio patio al aire libre, donde los visitantes pueden explorar y adquirir diversas artesanías elaboradas por los miembros de la comunidad. Entre las opciones disponibles se encuentran collares de semillas, cestería, tallados en madera de pequeños animales, así como arcos y flechas, garantizando recuerdos inolvidables de esta auténtica experiencia cultural.