Asumió como el diputado nacional más joven, pero de a poco fue ganándose espacio. Primero sorprendió cuando amenazó con “llenar de dengue” el Congreso si Misiones no recibía lo que merece en el reparto de recursos federales durante los primeros meses de gestión de Mauricio Macri. Hoy, ya más aplomado, se metió de lleno a combatir la apertura de importaciones y la compra de casas chinas que pretende hacer el Presidente y que podría dejar sin trabajo a 22 mil misioneros.

Daniel Di Stefano, a los 29 años, le cuenta a Economis que está a punto de ser padre y busca convertirse en un referente de un nuevo peronismo que sea más federal, joven e inclusivo.  

 

¿Cómo está el escenario político hoy?

El escenario político está muy intenso, con mucha actividad desde la gestión que es el lugar donde nos pusieron los misioneros, y por otro lado en lo político. Son cuestiones que van juntas y de la mano. Sin descuidar la gestión priorizando al pueblo misionero y los intereses del proyecto misionerista, que es lo que representamos en el Congreso de la Nación. Y tratando de construir con mucha inteligencia, de cara a los vecinos y sin perder territorialidad, con los pies bien puestos sobre la tierra, informándonos sobre la problemática, sobre lo que nos dicen los vecinos y no desde los medios de comunicación que es a veces lo que hacen algunos dirigentes políticos. Cuando haces eso, es cuando perdés de vista lo que está pasando en el territorio.

 

¿Cuál es la sensación política, la económica?

Cambió mucho. Particularmente nosotros nos estamos reuniendo con los centros de estudiantes de todos los colegios, actividad que iniciamos esta semana. Y lo que nos plantean los chicos es que muchos están dejando de estudiar porque los padres no les pueden mandar al colegio, por más de que tengan el boleto educativo gratuito, y que la educación sea gratis, que nunca termina siendo gratis. Muchos chicos en edad escolar, se tienen que hacer cargo de sus hermanitos, o trabajar o colaborar.

Te comentan que de los dos padres, uno está sin trabajo y eso hace que los chicos dejen de soñar y de planificar su vida porque dicen “pucha para qué me voy a matar estudiando si mirá como están mis padres”. Eso está pasando hoy.

No voy a hablar de los 90, porque yo no existía, pero la gente está muy preocupada, no está llegando a fin de mes, está priorizando a otras cuestiones. Hace magia a la hora de ir al supermercado, está resistiendo en su trabajo. Las empresas del interior algunas no te despiden pero tienen horarios de reducción laboral, suspensiones, los mandan a la casa y dicen que en un mes o dos meses los van a volver a llamar, y de esa manera tampoco se indemnizan, y si no los terminan de echar, no pueden cobrar la ayuda del Ministerio de Trabajo de la Nación. Pero lo peor que nos puede pasar es que la gente pierda la alegría. Una vez que la gente pierde la alegría deja de soñar y no va para adelante, no planifica, no busca el crecimiento.

 

¿Cuál es el camino que debe tomar la política?

No debemos perder de vista el estar al lado de la gente. Tenemos que cambiar los estilos, de conducción en la política, no debemos anular el contacto con los vecinos. Dejar de buscar territorialidad a través de las redes sociales, de hacer una campaña en Facebook y se pierde de vista el estar cara a cara.

Debemos planificar, nosotros por lo menos lo que hacemos con nuestro equipo de trabajo, ante una problemática o ante una diferencia con el Gobierno nacional, hacemos una propuesta de una idea superadora, trabajada con distintos sectores, involucramos a distintos actores de la sociedad. Nos tenemos que seguir preparando para gobernar, debemos estar a la altura de las circunstancias. La juventud por juventud sola no significa nada. Si a un joven le dan un espacio de poder y no está a las alturas de las circunstancias seguro va a haber un problema más grande. Hay que dejar la agresividad en la discusión entre la dirigencia. Se puede ver mucho al Kirchnerismo atacando al Macrismo, hay muchos macristas atacando fuertemente a los kirchneristas; y la gente que no se quiere involucrar en política, que dice “yo sólo voy a hacer mi trabajo”, “yo en esto no me meto”. La verdad es que hay que involucrarse, hay que ser más tolerante, hay que ser más pacífico. Hay que tener paciencia y tolerancia con aquel que piensa distinto porque es la única manera que vamos a poder salir adelante.

 

¿Qué te cambió la política en estos años, asumiste siendo el más joven del Congreso y tenés ya unos años de militancia, qué te cambió estando dentro?

La otra vez me preguntaron cuál era el momento justo en el que yo me metí en la política, cuál fue el motivo y la verdad es que a mí la política me abrazo. Cuando yo me di cuenta ya estaba dentro de la política, por la militancia que venía haciendo desde muy chico. El estar en la política y el estar en la gestión, te da la posibilidad de forma directa poder solucionar distintas problemáticas que existan en la sociedad, crear las políticas de Estado para planificar una provincia o un país, o un parlamento mucho más contenciosos para los tiempos venideros. El estar en política te da la posibilidad de conocer distintas cuestiones que desde la militancia no se puede. Llegar a distintos sectores, de abrazar con más fuerzas las causas, poder convocar con muchísima más apertura.

 

¿Cambiaste, mejoraste?

Uno constantemente trata de ser muy abierto. No somos de la misma fuerza política que el Presidente, pero acompañamos aquellas iniciativas que consideramos que pueden ser positivas para la provincia o para el país,  no por ser de otra fuerza política vamos a estar en desacuerdo en todo; y si vemos que no se está haciendo bien una cuestión, no vamos al ataque, sino que trabajamos en hacer proyectos, en solicitar sentarnos distintos actores diferentes en una mesa y buscar un acuerdo. Uno trata de no encuadrarse y no cerrarse en una idea.

 

O sea que ampliaste tu espectro…

Sí, lo ampliamos y lo seguimos haciendo. Ser parte de una fuerza política como lo somos aquí en la provincia, una fuerza donde hay peronistas, radicales, gente con alguna otra concepción ideológica también te da la posibilidad de que uno pueda ser más tolerante y pueda ver más de un punto de vista. Uno cree que por ver que como uno piensa es la única realidad y no es así, y el estar con gente que piensa distinto te da esa posibilidad, esa apertura mental que necesitamos los políticos.

 

Estamos ante un escenario nuevo de las elecciones y a vos se te vinculó con la línea política del kirchnerismo ¿seguís en ese escenario te has movido? ¿Qué debería hacer la ex presidenta Cristina?

Yo siempre milité dentro el peronismo y el peronismo es muy amplio, es popular, tiene distintas vertientes. Y el espacio que hoy estamos militando en la política y estamos construyendo también tiene mucho de ese peronismo. El kirchnerismo fue muy amplio, y fue mucho más que sólo peronismo. Hoy estamos dentro del bloque del Frente para la Victoria, porque venimos de ahí de la juventud peronista, de esa visión de esa vertiente y seguimos construyendo. El Frente para la Victoria y el Frente Renovador son una fuerza política, una misma fuerza política, bajo el mismo paraguas de una única conducción en Misiones, eso te da la posibilidad de seguir creciendo, de seguir caminando, ver los distintos espacios políticos y acompañar aquellos espacios que uno considere que están en el camino cierto para los tiempos venideros.

 

¿Y Cristina?

Cristina hoy tiene un rol muy importante en la sociedad, tiene un rol de acompañamiento a la juventud, un espacio de legisladores muy importante. Es muy importante tenerla dentro del Congreso, ahora si me preguntas si es el momento en estas elecciones, yo te digo que no. Pero yo te digo que Cristina es el cuadro del peronismo más importante a nivel nacional.

 

¿Y en Misiones el peronismo va a trabajar con la Renovación?

Sí, el Partido Justicialista va a conformar el Frente Renovación. Nosotros que venimos de la Juventud Peronista, venimos construyendo y sumando lo que no está dentro, somos un puente hacia todas esas generaciones que no quieren involucrarse en política; somos un puente para la gente que quiere buscar una construcción distinta a la actual, o la heterogénea que pueda llegar a tener un partido político. Y eso es lo que le aporta el Partido Justicialista le aporta hoy al Frente Renovador. Agregando esta energía joven que está a las alturas de las circunstancias y que viene sumando y buscando espacios dentro del Poder Ejecutivo, dentro del Poder Legislativo.

 

Tuviste con mucho protagonismo en la discusión de la importación las casas chinas, ¿Qué hay de concreto?

Teníamos información de que el Gobierno iba a seguir avanzando en la compra de casas de maderas premoldeadas, o  prefabricadas a China, teníamos esa información y veníamos trabajando con los sindicatos, con las confederaciones de los trabajadores, con las federaciones que trabajan con este rubro. Y hace un mes tuvimos la oportunidad de hablar con el Jefe de Gabinete, Marcos Peña, y en forma personal le pregunté que sabía al respecto de la compra de las casas chinas, y él me dijo que desconocía esa actividad. Pero a la semana vino a Misiones, una funcionaria del Ministerio de Agricultura de la Nación, a decir que la compra de las casas chinas era una realidad, pero que venía medio lento. A los dos días le preguntamos al ministro Ricardo Buryaile y él no estaba al tanto de esto. Y hace una semana se encuentra el titular del ProCrear en China anticipando la firma de un convenio y la visita del Presidente Mauricio Macri para el 15 de mayo en China, en el cual se concretarían la compra en una primera instancia de unas 15 mil casas de madera China.

Lo que le decimos al Gobierno nacional es que no estamos en contra de que vengan a invertir en la Argentina, porque lo necesitamos. Pero debemos cuidar el empleo que hay en la Argentina. En Misiones el sector foresto industrial emplea de forma directa unos 22 mil trabajadores.

Con la apertura de las importaciones ha hecho que se empiece a comprar madera en Finlandia y otros países, hemos perdido el mercado de Estados Unidos, y se está profundizando una crisis económica que no sólo afecta las economías nacionales, sino las regionales.

Pero no nos quedamos en decir que esto está mal, hemos trabajado en iniciativas legislativas para proponerle al Poder Ejecutivo, trabajar sobre esta problemática, hemos presentado tres proyectos de Ley y de resolución y la semana pasada el último proyecto que presentamos fue la creación de un observatorio Nacional de la Industria. Con esto queremos sentar en una mesa a los diputados y senadores, a las universidades, a los sindicatos, a los confederaciones que nuclean no solamente foresto industrial, sino también a todo el sector de la economía y que juntos podamos trabajar en políticas de Estado.

Necesitamos una política que no sea cambiada por el presidente que viene o que está, necesitamos que los cambios políticos a nivel nacional no golpeen las economías provinciales, o regionales.

Si van a comprar 15 mil casas chinas, que se compren 80 mil casas de madera en Misiones. Es muy coherente y muy oportuno el planteo del gobernador Hugo Passalacqua. Acompañemos los planteos, hagamos espalda para que él pueda ir a Buenos Aires a negociar esas cuestiones. 

 

¿Qué pálpito tenés para las elecciones?

No creo que le vaya muy mal en estas elecciones al Gobierno nacional, sinceramente. Las elecciones de medio término suelen tener desmotivadas a la población y muy motivados a los políticos, la gente está cansada de los políticos, de los debates, de la agresividad en los distintos espacios. Tampoco creo que le vaya mal a la Renovación en Misiones. Una provincia que no pide adelantos de coparticipación, habla de un proyecto político que está pensando de acá a quince años, y eso a los jóvenes nos tiene que dar tranquilidad. Esto a una provincia no sólo le da la garantía económica, sino la garantía que es necesaria a la hora de invertir y poner plata en una empresa. Es por eso que yo creo que el éxito electoral de la Renovación en este año va a ser contundente.

 

¿Y al Peronismo cómo le va?

Y está un poco enquilombado, como decimos los jóvenes misioneros. Después de la última derrota que hemos tenido los compañeros aún no se han podido acomodar. Lo que pasa en las provincias, depende mucho de lo que pase en la Provincia de Buenos Aires.  Se puede ver que la salida de Cristina del Gobierno nacional, hizo que muchos compañeros pierdan el rumbo. Tenemos diferencias, yo tengo diferencias con el presidente del Partido Justicialista Nacional, creo que no está habiendo la apertura de que debería, se está priorizando Provincia y Ciudad de Buenos Aires y la verdad es que nosotros aportamos muchísimo al peronismo. Aportamos muchísimos votos, al candidato que perdió las elecciones, pero al fin y al cabo el norte argentino aportó muchísimo. Sin nuestro aporte la derrota hubiera sido mucho más grande. Y el gobierno y el peronismo y el pejotismo, centralista de Buenos Aires tienen que ver el éxito que tienen los compañeros en las provincias. Acá en Misiones venimos de un éxito electoral que viene hace más de once años; entonces tenemos mucho que exponer y para ir a pelear por espacios de poder dentro del peronismo y  dentro de un poder que sabemos que va a volver a gobernar. Esa crítica también va a Cristina que también centralizó su figura de conducción política y de país.

 

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