El FMI empeoró su pronóstico para la Argentina: prevé que la actividad caiga más de lo esperado
El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó las previsiones de actividad económica de la Argentina para este año del 2,8% de retroceso que esperaba en abril a una caída aún mayor, del 3,5% en su Informe de Perspectivas de la Economía Global publicado hoy.
Mientras tanto, mantuvo sin cambios su cálculo de una recuperación en 2025: los economistas del Fondo todavía consideran que habrá un rebote y será del 5% el año próximo.
Como cada trimestre, el organismo internacional da a conocer sus perspectivas económicas globales que se mantuvieron sin grandes cambios.
“Se proyecta que el crecimiento mundial estará en línea con el pronóstico de Perspectivas de la economía mundial (WEO) de abril de 2024, de 3,2. por ciento en 2024 y 3,3 por ciento en 2025. Sin embargo, el variado impulso de la actividad a principios de año ha reducido la divergencia de producción entre las economías a medida que los factores cíclicos disminuyen y la actividad se alinea mejor con sus potencial”, dijo el informe liberado esta mañana. Aún así, el reporte destaca riesgos.
“La inflación de los precios de los servicios está frenando los avances en materia de desinflación, lo que está complicando la normalización de la política monetaria. Por lo tanto, los riesgos al alza para la inflación han aumentado, aumentando la perspectiva de tasas de interés más altas durante un período aún más largo, en el contexto de crecientes tensiones comerciales y una mayor incertidumbre política”, agregó.
El recorte de las expectativas de actividad argentinas vino de la mano de una peor perspectiva para la región. “En cuanto a América Latina y el Caribe, el crecimiento se ha revisado a la baja para 2024 en Brasil, reflejando el impacto a corto plazo de las inundaciones, y en México, debido a la moderación de la demanda. Sin embargo, el crecimiento se ha revisado al alza en 2025 para Brasil para reflejar la reconstrucción después de las inundaciones y factores estructurales de apoyo (por ejemplo, la aceleración de la producción de hidrocarburos)”, señalaron los técnicos del organismo.
En relación a las perspectivas trazadas para la economía global, el FMI precisó que “se proyecta que el crecimiento mundial estará en línea con el pronóstico de Perspectivas de la economía mundial (WEO) de abril de 2024, de 3,2% en 2024 y 3,3% en 2025”, aunque remarcó que “el variado impulso de la actividad a principios de año ha reducido la divergencia de producción entre las economías a medida que los factores cíclicos disminuyen y la actividad se alinea mejor con sus potencial”.
Asimismo, advirtió que “la aceleración de los precios de los servicios está frenando los avances en materia de desinflación, lo que está complicando la política monetaria” y sostuvo que “los riesgos al alza para la inflación aumentaron, incrementando así la perspectiva de tasas de interés más altas durante un período aún más largo en un contexto de crecientes tensiones comerciales y mayor incertidumbre política”.
Al respecto, consideró que “para gestionar estos riesgos y preservar el crecimiento, la combinación de políticas debe secuenciarse cuidadosamente para lograr la estabilidad de precios y reponer las reservas disminuidas”.
Por el lado de los pronósticos para la región, el reporte reflejó un empeoramiento al detallar
que para América Latina y el Caribe, espera un alza de 1,9% del PBI, mientras que en abril estimaba un repunte de 2% y lo vincula “esencialmente” a la contracción fiscal en la Argentina. En cambio, para 2025 espera una mayor expansión al estimar un crecimiento del 2,7%.
En este contexto, indicó que “el crecimiento se ha revisado a la baja para 2024 en Brasil, reflejando el impacto a corto plazo de las inundaciones, y en México, debido a la moderación de la demanda”, sin embargo, “el crecimiento se ha revisado al alza en 2025 para Brasil para reflejar la reconstrucción después de las inundaciones y factores estructurales de apoyo (por ejemplo, la aceleración de la producción de hidrocarburos)”.
En ese marco, puntualizó que Brasil crecerá este año un 2,1% mientras que espera una recuperación de 2,4% del PBI para 2025. En cuanto a México, el Fondo calculó un alza de 2,2% del PBI para este año y de 1,6% para el año próximo.