El Gobierno nacional gastará 27 millones de pesos en comprar gaseosas, agua mineral y jugos
El Gobierno nacional abrió una licitación que incluye la provisión de 42.714 unidades de bebidas carbonatadas y agua mineral para la Quinta de Olivos, la Casa Rosada y la residencia de Chapadmalal.
El presidente de la Argentina, Javier Milei, gastará hasta 27 millones de pesos en comprar gaseosas, agua mineral y jugos que serán destinados a la Quinta de Olivos, la Casa Rosada y la residencia presidencial de Chapadmalal.
La información se desprende de un pedido de apertura de licitación para adquirir estos productos que fue publicada hoy en el Boletín Oficial de la República Argentina a través de la Secretaría General que encabeza por Karina Milei, hermana del primer mandatario y mujer fuerte del Gobierno nacional.
El contrato incluye la provisión de 42.714 unidades de gaseosas, agua mineral y jugos naturales, mientras que en el detalle se distinguen los siguientes productos que fueron descritos en el pliego de licitación.
- Agua mineral gasificada x 500 cm3
- Agua mineral gasificada x 1.500 cm3
- Agua mineral sin gasificar x 500 cm3
- Agua mineral sin gasificar x 1.500 cm3
- Jugo natural envase tetrafilm x 1L
- Gaseosas envase lata x 354 cm3
- Gaseosa envase plástico x 500 cm3
- Gaseosa envase plástico x 1.500 cm3
- Gaseosas envase plástico x 2.250 cm3
Lo que establece la el pliego de licitación
En uno de los pasajes de la apertura de licitación se desprende el siguiente texto: “No será necesario presentar esta garantía cuando el monto de la oferta no supere la cantidad que represente UN MIL (1.000) módulos, de acuerdo a lo dispuesto en el inciso c) del artículo 80, del Anexo I del Decreto N° 1.030/16, sus modificatorios y complementarios”.
“A los efectos de lo dispuesto en este presente Pliego y en el reglamento del Régimen de Contrataciones de la Administración Nacional, aprobado por el Decreto N° 1.030/16, sus modificatorios y sus complementos, el valor del módulo será de PESOS VEINTISIETE MIL 00/100 ($27.000)”.
Algunas voces opositoras destacaron que esta medida traerá polémica teniendo en cuenta que llega en un “momento de crisis económica” y en el que “uno de cada dos chicos es pobre en la Argentina”, además de que estos niños “enfrentan dificultades para acceder a alimentos básicos”.