El Inta produce el 45 % de las variedades de algodón sembradas en el país
Esta cifra se refiere a las semillas fiscalizadas utilizadas en la última campaña que, según cifras oficiales de la Secretaría de Agricultura de la Nación, alcanzó una superficie de siembra de más de 508 mil hectáreas. La nueva genética es aceptada por los productores algodoneros, dado que permite una siembra tardía con resultados productivos y económicos más estables. El aporte del INTA en el proyecto +Algodón Argentina, ejecutado por la FAO.
Con una superficie de 508.247 hectáreas, según cifras oficiales de la Secretaría de Agricultura de la Nación, el algodón registró un crecimiento del área sembrada, por quinto año consecutivo. De todos modos, las condiciones climáticas condicionaron la campaña, como en la mayoría de los cultivos, y redujeron los rendimientos.
La nueva genética INTA tiene una importante aceptación por parte de los productores algodoneros, dado que permiten una siembra tardía con resultados productivos y económicos más estables. El aporte del organismo en el proyecto +Algodón Argentina, ejecutado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
“El 45 % de la semilla fiscalizada utilizada en la campaña 2021/2022, correspondió a las nuevas variedades desarrolladas por el INTA”, aseguró Diana Piedra –directora del Centro Regional Chaco-Formosa del INTA– quien, además, no dudó en destacar el aporte del organismo al sector al “generar de manera constante innovaciones tecnológicas para el cultivo del algodón”.
“El lanzamiento de las últimas tres variedades desarrollado sobre germoplasma adaptado a la región se consolidó como una innovación desde el INTA a partir de la siembra de las mismas en casi el 50 % de la superficie destinada al textil en Argentina”, puntualizó la especialista.
“Además, –señaló– trabajamos en la búsqueda de variedades que permitan un control del picudo del algodonero más efectivo y con un menor costo, lo que permitirá que miles de pequeños y medianos productores de la Argentina y del resto de los países de América vuelvan a producir este cultivo tan arraigado al territorio”.
Entre las variedades más utilizadas por los productores de destacan Guazuncho 4 INTA BGRR, Guaraní INTA BGRR y Porá 3 INTA BGRR. Así lo aseguró Mauricio Tcach –investigador del INTA Sáenz Peña, Chaco– quien explicó que los productores están satisfechos con sus características. “Esto tiene que ver con que las variedades del INTA son de ciclos más cortos y presentan ciertas ventajas por sobre otras, dado que permiten una siembra tardía con estabilidad en los rendimientos y aprovechando toda la ventana de siembra”.
Con una superficie de 508.247 hectáreas, según cifras oficiales de la Secretaría de Agricultura de la Nación, el algodón registró un crecimiento del área sembrada, por quinto año consecutivo. De todos modos, las condiciones climáticas condicionaron la campaña, como en la mayoría de los cultivos, y redujeron los rendimientos.
La nueva genética INTA tiene una importante aceptación por parte de los productores algodoneros, dado que permiten una siembra tardía con resultados productivos y económicos más estables. El aporte del organismo en el proyecto +Algodón Argentina, ejecutado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
“El 45 % de la semilla fiscalizada utilizada en la campaña 2021/2022, correspondió a las nuevas variedades desarrolladas por el INTA”, aseguró Diana Piedra –directora del Centro Regional Chaco-Formosa del INTA– quien, además, no dudó en destacar el aporte del organismo al sector al “generar de manera constante innovaciones tecnológicas para el cultivo del algodón”.
“El lanzamiento de las últimas tres variedades desarrollado sobre germoplasma adaptado a la región se consolidó como una innovación desde el INTA a partir de la siembra de las mismas en casi el 50 % de la superficie destinada al textil en Argentina”, puntualizó la especialista.
“Además, –señaló– trabajamos en la búsqueda de variedades que permitan un control del picudo del algodonero más efectivo y con un menor costo, lo que permitirá que miles de pequeños y medianos productores de la Argentina y del resto de los países de América vuelvan a producir este cultivo tan arraigado al territorio”.
Entre las variedades más utilizadas por los productores de destacan Guazuncho 4 INTA BGRR, Guaraní INTA BGRR y Porá 3 INTA BGRR. Así lo aseguró Mauricio Tcach –investigador del INTA Sáenz Peña, Chaco– quien explicó que los productores están satisfechos con sus características. “Esto tiene que ver con que las variedades del INTA son de ciclos más cortos y presentan ciertas ventajas por sobre otras, dado que permiten una siembra tardía con estabilidad en los rendimientos y aprovechando toda la ventana de siembra”.
Por una producción algodonera competitiva y sostenible
El proyecto +Algodón Argentina es ejecutado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y promueve sistemas productivos sostenibles e inclusivos. Para esto, se abarca desde una perspectiva integral de la cadena de valor del algodón para promover el desarrollo rural, fomentando la agregación de valor, el comercio justo y el sistema agro textil.
Por medio del proyecto se generan oportunidades para intercambiar conocimientos y experiencias, promover el acceso a mercados, innovaciones tecnológicas y el manejo agrícola, desde una perspectiva de sistemas agroalimentarios, donde los sistemas productivos diversificados contribuyen a la seguridad alimentaria y al estado nutricional de las familias algodoneras en los más territorios vulnerables. Además, es una oportunidad de negocios innovadores en los países socios.