El turismo ante su mayor encrucijada
Los últimos datos de la Organización Mundial del Turismo (OMT), advierten que cerca de 100 millones de empleos directos en el turismo están en peligro. Además, la caída masiva de los ingresos por exportación del turismo podría reducir el PIB mundial hasta en un 2,8%. Estos son solo algunas de las cifras que reflejan el presente dramático de una actividad completamente azotada por la obligada paralización motivada por la pandemia de COVID-19.
El Secretario General de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, resume el contexto señalando que “El turismo ha sido uno de los sectores más afectados por COVID-19 y ningún país ha quedado ileso, con restricciones en los viajes y una caída repentina de la demanda de los consumidores que ha provocado un desplome sin precedentes del número de turistas internacionales”.
Diagramar las estrategias de reconstrucción del turismo en sus diversas dimensiones, es una de las tareas urgentes para un sector al cual el coronavirus afectó de lleno y sin distinciones por países ni continentes. A los imperativos de regenerar el negocio turístico como fuente genuina de empleo y recursos, se suman miradas necesarias ante un mundo que ya nunca volverá a igual. Entre ellas, por ejemplo, la de pensar al turismo como una columna prioritaria para la conservación del patrimonio natural y cultural.
Algunos de estos debates y propuestas, están a su modo condensados en los cuatro artículos que componen “Turismo en tiempos de pandemia”, la revista digital que acaba de editar la Universidad Gastón Dachary (UGD) y a la cual puede accederse desde este link. En la publicación, docentes de la Licenciatura en Gestión Turística y Hotelera y la Maestría en Desarrollo Regional e Integración, ambas dictadas por la UGD, abordan un conjunto de tópicos tendientes a hurgar en lo que, en el editorial de la revista, el vicerrector Alfredo Poenitz vislumbra como la necesidad de “retomar la senda del crecimiento del turismo”.
El primer artículo se titula “El negocio turístico en el nuevo contexto global COVID-19” cuya autoría pertenece a Gladys Mabel Voertler, magíster en Desarrollo Regional e Integración. Aquí, el planteo general tiene que ver con “la aplicación de nuevas estrategias de gestión y comunicación turística” orientadas a “estar a la vanguardia de los acontecimientos para apoyar y garantizar el trazado del nuevo rumbo que el turismo requiere para sobrevivir y adaptarse”. Lo que Voertler observa, es que los receptores de la comunicación han sufrido un obligado y urgente cambio en sus comportamientos habituales, por lo que es necesario aplicar el recurso de la adaptación”.
Otro de los autores, el Magíster en Desarrollo y Gestión de Destinos, Jorge Posdeley, se centró en “El impacto de la pandemia COVID-19 en el sector de los viajes” y añadió a su análisis, una mirada sobre la dicotomía “Turismo fobia vs. anti masividad”. El texto parte de la contextualización a partir de una serie de datos actualizados al momento de la publicación: “A septiembre, son más de 70 países los que todavía mantienen las fronteras cerradas para extranjeros con fines turísticos y más de 80 los que las habilitaron bajo restricciones por nacionalidad. Argentina, es uno de los países que cerró por completo sus fronteras al turismo internacional. Hasta el momento es incierto un posible periodo de reapertura”.
Pese a la difícil coyuntura actual, el autor considera que “la actividad turística deberá retomar la confianza y transformarse en líder restableciendo la confianza de los posibles consumidores, favoreciendo el estímulo a los empresarios y a los emprendedores, e incorporar como bandera la generación de nuevos empleos sustentables que incorporen a múltiples sectores al mundo de los servicios, más mujeres, más jóvenes, además de la innovación y la tecnología”.
Por su parte, Ingrid Adriana Pedersen (Mg. Desarrollo y Gestión del Turismo) firma un artículo titulado “Las burbujas o corredores turísticos: propuestas para salvar el turismo”, en el cual, entre otras aristas, trae a colación parte de la experiencia llevada adelante en la provincia de Misiones con el denominado “turismo de cercanía” o turismo interno, pero además presenta algunos números para dimensionar la profundidad del daño que esta pandemia imprime al impactar de lleno sobre la actividad turística: “En Europa, el turismo genera 27 millones de puestos de trabajo y millones de empresas, en Argentina unos 750.000 puestos y en Misiones aproximadamente 4.000 familias viven de la actividad, 14.000 de forma directa y 10.000 de manera indirecta. En algunos lugares el turismo representa hasta el 80% de las exportaciones”.
La autora propone, en el artículo que cierra la publicación especial, una reflexión en torno a “los nuevos retos que se vienen de cara al 2030” para el turismo. El foco aquí está situado sobre las Organizaciones de Gestión de los Destinos Turísticos (OGD), que por lo expuesto en el escrito, se convierten en “protagonistas en este proceso de planificación y gestión de los destinos turísticos, ante lo cual es importante observar el cambio de pensamiento y de actuación por parte de las administraciones públicas y privadas que gestionan la actividad turística en los destinos”.
En definitiva, volviendo al editorial de Poenitz, estos son algunos de los puntos centrales de los artículos que aquí se presentan, analizados por tres expertos en el desarrollo y gestión de la actividad turística. “El negocio turístico en tiempos de pandemia, los nuevos protocolos que se impondrán a la actividad cuando se regrese a la normalidad, y los retos al turismo provincial y nacional en los tiempos que vienen, son temas que aquí se desarrollan con la profundidad y sapiencia que los antecedentes de estos expertos garantizan”, anuncia el vicerrector.