Fuerte reclamo de la Came para refinanciar las deudas de las Pymes y bajar el costo financiero
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa, presidida por el misionero Gerardo Díaz Beltran presentó un documento de trabajo al nacional para sacar del ahogo financiero a las pequeñas y medianas empresas, que padecen las elevadas tasas que mantiene el Banco Central en su frustrada cruzada contra la inflación.
El documento propone bajar de 29 a 21 por ciento la tasa por los créditos subsidiados para descontar cheques por el incremento desmedido de las tasas de financiamiento de las Pymes, “que resultan incompatibles con la rentabilidad de sus proyectos de inversión”.
“Solicitamos créditos blandos para financiar capital de trabajo para las Pymes proponiendo ampliar el destino de esa línea al 21%. Las empresas deben continuar trabajando y los recursos propios para autofinanciarse están agotados”, señaló Díaz Beltrán.
“Además, requerimos porcentajes del total que deben ser asignados a empresas según su tamaño ya que en la actualidad solo acceden a estas líneas de crédito las empresas medianas tramo II y las grandes, quedando las pequeñas excluidas del beneficio. Propusimos al Gobierno, además, implementar urgentemente la factura electrónica que permite descontarla como a un cheque y abrir un nuevo canal de financiamiento. Las grandes empresas la frenan porque las obliga a pagar a tiempo, cuando demoran los pagos a sus Pymes proveedoras”, explicó el empresario misionero.
Para la Came, se debe devolver a las empresas los saldos técnicos acumulados en la AFIP actualizados por la misma tasa que cobran por deudas atrasadas, ya que “el tiempo excesivo que se tarda en devolverlo termina licuándolo y se revierte esto, las empresas podrían aplicar esos fondos para saldar deudas o invertir”.
“Con el salto en los costos financieros, la rentabilidad de la Pyme se la llevan los bancos en intereses punitorios, por eso propusimos una línea a través del BICE a tasas máximas de 20 o 21% para cancelar deudas de las Pymes con los bancos que aplican tasas superiores al 50% anual. Para paliar la problemática de los pasivos financieros de las Pymes, propusimos llegar a un acuerdo con el sistema financiero que consista en renegociar las deudas con las Pymes, dándoles un periodo de gracia de tres meses y bonificando desde el Estado parte de la tasa de interés”, enumeró el directivo.
Por último, Díaz Beltrán reclamó poner topes máximos al Costo Financiero Total que cobran los bancos por créditos personales, descubiertos, descuentos de documentos y créditos productivos. “Hoy se descuentan cheques de primera línea a tasas nominales mayores al 50 por ciento y los créditos personales de primera línea en bancos llegan al 105 por ciento”, cuestionó.
La Came propuso como alternativas reformular la actual moratoria con tasas viables (no mayor al 21% anual) y pagables para las Pymes; eliminar impuestos sobre intereses punitorios y bajar de 25% a 5% el 1° anticipo de ganancias a las Pymes que con esfuerzo están al día con AFIP.