Galaxy Ring: El anillo inteligente de Samsung que revoluciona el ecosistema de dispositivos
Con una estrategia clara, la compañía pretende generar dispositivos que compitan con Apple, más allá de los smartphones.
Samsung definió su estrategia para el 2025: incorporar más inteligencia artificial en sus productos y desarrollar un ecosistema de dispositivos que compita con el de su rival Apple, ampliando su oferta más allá de los exitosos smartphones. En este contexto, el Galaxy Ring, un dispositivo de seguimiento de la salud de US$399, se presenta como un avance significativo, al entrar en la emergente categoría de productos más pequeños y menos invasivos, que buscan reemplazar a los tradicionales.
Este anillo, fue lanzado en enero y estará disponible, combina características de relojes inteligentes y auriculares, y es capaz de realizar un seguimiento de la frecuencia cardíaca, el sueño y los pasos, similar a los smartwatches. Además, su batería de larga duración de hasta una semana lo distingue, ya que su estuche sirve como fuente de carga adicional. Samsung destaca que tanto el Galaxy Watch como el Galaxy Ring son complementarios, aunque los usuarios probablemente optarán por uno u otro, ya que ambos dispositivos ofrecen muchas funciones duplicadas.
¿Por qué ahora?
El mercado de los smartwatches ha registrado una desaceleración en sus ventas, según IDC, aunque el interés por dispositivos de salud sigue siendo fuerte. En este contexto, los anillos de seguimiento de la salud están emergiendo como una alternativa más cómoda y discreta, especialmente en mercados como la India, donde los relojes inteligentes han visto una desaceleración notable. Sin embargo, hasta ahora, ninguna compañía con el alcance de Samsung ha entrado en este mercado de manera significativa.
El director de investigación de IDC, Bryan Ma, destaca que la entrada de Samsung, con su vasta capacidad de marketing y un ecosistema más amplio de dispositivos, podría acelerar el crecimiento de este mercado. Empresas como Oura Health Oy, una de las pioneras en la categoría de anillos, han convertido este sector en un negocio basado en suscripciones, lo que ha sido un éxito en un mercado saturado por productos de márgenes ajustados.
Para Samsung, el objetivo es crear sinergias dentro de su ecosistema, incentivando a los usuarios a suscribirse a servicios de valor añadido. Aunque la empresa aún ofrece su software de salud de forma gratuita, la idea es que, con el tiempo, los consumidores estén motivados a pagar por servicios adicionales.
Lo que funciona
El Galaxy Ring destaca por su capacidad para ofrecer la duración de la batería de los auriculares y el seguimiento de la salud de los smartwatches, sin necesidad de una pantalla, lo que contribuye a su ligereza y comodidad. El anillo tiene una duración de batería de hasta una semana con una sola carga, lo que lo hace ideal para un uso prolongado. Además, su diseño de titanio lo hace extremadamente ligero y cómodo para usarlo constantemente, lo que es crucial para dispositivos de seguimiento de la salud, ya que su efectividad aumenta cuantos más datos pueda recopilar.
A diferencia del Apple Watch, que solo funciona con iPhones, el Galaxy Ring es compatible con cualquier smartphone Android, lo que abre su mercado a una base de usuarios mucho más amplia y brinda a Samsung la oportunidad de atraer a nuevos clientes.
Pros:
- Diseño elegante y ligero, fabricado en titanio.
- Excelente seguimiento del sueño.
- Batería de larga duración, con una carga que dura varios días.
- Compatible con una amplia gama de smartphones Android, no solo los dispositivos Galaxy.
Contras:
- Seguimiento impreciso de los pasos y la frecuencia cardíaca.
- Precio similar al de los smartwatches, pero con menos funcionalidades.
- Riesgo de rayar el teléfono al manipular el dispositivo.
- Los LED brillantes pueden resultar molestos por la noche.
Las particularidades
Aunque el Galaxy Ring ofrece grandes ventajas, también presenta algunas limitaciones. En cuanto al seguimiento de pasos, tiende a ser excesivamente generoso, ya que registra pasos adicionales incluso cuando el usuario está sentado. La función de frecuencia cardíaca también presenta ciertos problemas de precisión, ya que en una prueba, el anillo solo registró hasta 140 pulsaciones por minuto, mientras que un smartwatch rival alcanzó las 170 ppm.
Un aspecto a mejorar es su capacidad para estimar la variabilidad de la frecuencia cardíaca, ya que presenta fluctuaciones significativas en sus mediciones. Además, como el anillo se ajusta de forma fija, no es posible modificar su tamaño una vez comprado, lo que puede afectar la precisión de algunas mediciones. Otro inconveniente es que el Galaxy Ring sobresale del dedo más que un anillo convencional, lo que aumenta el riesgo de rayar el teléfono al manipularlo. Samsung recomienda colocarlo en el dedo índice para minimizar este problema.
Finalmente, los LED brillantes utilizados para detectar la frecuencia cardíaca pueden ser molestos, especialmente durante la noche, ya que pueden generar distracción en un ambiente oscuro.
El Galaxy Ring representa un paso significativo para Samsung en su intento de competir con Apple en el mercado de los dispositivos wearables, pero aún tiene varios aspectos que pulir antes de convertirse en una opción realmente líder en la categoría.