El mediático economista de peinado al viento visitó Misiones para exponer sobre “la estruendosa superioridad del capitalismo” ante un numeroso público. En la previa defendió sus ideas de bajar el gasto público y promover el liberalismo económico. Al ser consultado sobre el Presupuesto aprobado en Diputados, cargó contra los políticos por volver a ajustar al sector productivo con más impuestos y tributos.
Por qué una persona que habla de la Economía cautiva tanto a los jóvenes. Por qué un economista que utiliza adjetivaciones subidas de tono en cada frase atrae a 500 personas en una tarde de viernes en Posadas. La gestión del “Mejor equipo de los últimos 50 años” sigue decepcionando a una gran parte de los argentinos que desde hace un poco más de dos años se vuelcan a los economistas de corte “Liberal”, que plantean al Estado como el “enemigo” que frena el desarrollo del país. Javier Milei es quizás el exponente más mediatico de este grupo.
Milei llegó esta mañana a Posadas para explicar por qué defiende al Capitalismo y a la Libertad personal como único modelo económico que permita el desarrollo. Luego de un par de reuniones con empresarios y referentes del incipiente Partido Libertario dio una charla abierta en en hotel Julio Cesar de Posadas.
El economista que se define como un “Minarquista estático” y un “Anarco Capitalista dinámico”, afirmó que busca el “cambio cultural de las personas, en base a explicarles con datos como funciona la economía”.
“Si el Estado no te quitara (con impuestos) el 70% de lo que generás podrías acceder a la prestación de salud que elijas; incluso las capas de menores ingresos. Y la educación funcionaría mejor con un sistema de voucher, para que se pueda elegir donde estudiar, porque hoy la mitad no termina la secundaria y el 70% de los que egresan no pueden comprender un texto y no pasan de una prueba de matemática básica”. Incluso en este tema Milei va contra la corriente. No dudó en afirmar que la educación pública y gratuita “fue una de las conquistas del socialismo que marcaron una caída en la calidad de vida”, agregó.

Defendió su idea explicando que la Argentina estaba en la década del ´70 con los mejores indices educativos, fue el primer país en bajar a niveles infimos el analfabetismo y ahora los “indices PISA ubica al país en el séptimo lugar en la región y la mitad de los jóvenes no terminan la secundaria y de los que terminan la mayor parte no tiene comprensión de texto y no tiene la capacidad de hacer cálculos esenciales”.
Milei considera que el aparato estatal con sus regulaciones, impuestos y su poder de policía ponen freno al progreso de emprendedores, profesionales, empresarios e, incluso, a los trabajadores y al resto de los ciudadanos de a pie.
“La perspectiva es bastante mala” comentó Milei, quien insiste con su idea que “la solución está afuera del país para los sub 30”, mientras que para los de más de 30 años la opción es resistir lo que se viene en “esta Argentina inviable, donde las probabilidades de progresar son iguales a cero”.
En su crítica al Estado, planteó que “los únicos que progresan son los políticos y ellos tienen el monopolio de la fuerza”. Por ello definió que primero “debe identificarse al enemigo que es el Estado, o mejor los políticos”.

Recordó que en el 2001 existió una movida social que pedía el “que se vayan todos” y “no se fue nadie y ahora incluso hicieron entrar a su prole, amigos y socios”. Remarcó que “desde la década del ´70 se triplicó el Estado nacional y se duplicó si tomamos el Estado consolidado (con las provincias y municipios)”.
Se despegó de la crítica que la culpa de todo es del Peronismo y de Perón, porque recordó que el Populismo se implementó con el Fascismo que luego fue potenciado por Perón y luego de Perón vino un grupo identificado como Peronistas que hacen un “peronismo sin Perón”.
Al ser planteado de como se rompe esta lógica, Milei planteó que se debe potenciar la “contracultura, explicando los datos”. Se identificó con la idea de “volver a las bases de Alberdi” y de está forma mostrar que hay una forma distinta de hacer las cosas, porque si hace 70 años venimos haciendo las cosas mal, es momento de hacerlas bien”.
“La Argentina de mediados del siglo XIX era un país de bárbaros y, gracias a la gesta de un hombre como Alberdi y a la Constitución de 1853 – 1860, en 35 años se convirtió en una de las potencias del mundo. En 1895 era el país con el mejor PBI per cápita del mundo. En la primera parte del siglo XX ocupaba el puesto número 5 entre los países más ricos. Pero también hay que decir una verdad: en el proyecto de Alberdi, todo el Poder Ejecutivo entraba en la Casa Rosada. Y eso, es un problema para los políticos”, agregó.
Reconoció que los políticos “no quieren arruinarle la vida per se a las personas, sino que se encuentran en una situación de poder y la usan a su favor, en detrimento del resto de los ciudadanos”.
Para él deben redoblarse los esfuerzos para “mostrar los ejemplos que hay en la propia Argentina, lo pudieron hacer Alberdi, Sarmiento, Roca e incluso Urquiza; no hace falta buscar otros países”.
Al ser consultado sobre el Presupuesto que obtuvo media sanción en Diputados, Milei afirmó que “los honestos volvimos a perder con los parásitos del sistema político”, porque según él este Presupuesto garantiza los privilegios a la clase política a costa de recargarle el 100 por ciento del ajuste al sector privado con más impuestos y tributos.
Indicó que el BID en sus estudios muestra que en América Latina el indice de ineficiencia del Estado es del 4,4 por ciento, mientras que en Argentina es del 7,2 por ciento del cual el 5 por ciento es por “filtraciones”. Planteó que esas “filtraciones” son básicamente la corrupción en la obra pública, que quedó claramente demostrada con “la causa de los cuadernos”. Está ineficiencia del Estado es la que debe ser ajustada para que el país sea viable y se pueda volver a ser una economía productiva y no recesiva.

Sobre su futuro en la arena política, luego de esta exposición mediática, Milei ratificó que solo “busco un cambio cultural, porque la solución es más Mercado y más Libertad”. No se mostró de acuerdo a ser candidato, sino que solo dejó en claro que seguirá dando charlas y notas de prensa para mostrar el cambio porque “cada uno lo hace desde el lugar que puede”, aunque reconoció como importante la conformación del Partido Libertario donde haya personas que se identifiquen con estas ideas y busquen el cambio desde adentro del sistema.
Él quiere “poner en evidencia como nos mienten y nos roban. La política es un negocio para estos delincuentes”, indicó.
Pidió “volver a las bases de Alberdi, que convirtió un país de bárbaros en una potencia, para salir de este modelo de empobrecimiento que nos domina desde hace 90 años”
Para él lo importante “son las ideas, los valores, el concepto del Partido Libertario y no el personalismo”.

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