La expansión de la Escuela de la Innovación en Misiones: el foco en lo pedagógico
La decisión política está tomada. Para 2023 todas las escuelas secundarias deberán enseñar con el método de la escuela de Innovación. Para el año que viene se sumarán 100 escuelas, cuyos docentes ya están capacitándose, porque la clave, dicen los especialistas, no está en la infraestructura, sino en el cómo se enseña. Romper paradigmas y barreras, que, sin embargo, pueden ser más sencillas de derrumbar en los colegios alejados de la tradición de las ciudades grandes, incluso en los privados, que comienzan a asomarse al nuevo modelo.
Florencia Mezzadra es una especialista en Educación y actualmente directora del Instituto Natura Argentina. ¿Qué tiene que ver una marca que se dedica a la venta de productos cosméticos con la educación misionera? Natura desde hace varios años, como parte de una política de responsabilidad social empresaria, respalda proyectos educativos en Brasil -donde está la casa matriz- y en Argentina, en alianza con el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec).
“Natura en 1995 creó una línea de productos, que se llama “Crear para Ver” y todo lo que se recauda no es ganancia ni para la empresa, ni para la consultora de belleza que es la que vende los productos, sino que todo se destina a educación. En Argentina hace diez años que existe “Crear para Ver”, así que es un compromiso de Natura a largo plazo con la educación”, explica Mezzadra, quien hace unos días encabezó una de las series de formación de los docentes misioneros para el modelo de innovación.
¿Qué resultados han tenido hasta ahora, en todo el país?
Nosotros trabajamos hace varios años, desde el año 2014 con un proyecto que se llama comunidades de aprendizaje, hemos trabajado con distintas provincias, con Salta y Santa Fe específicamente en este proyecto y hemos logrado apoyarlos en la implementación de las terturlias literarias dialógicas que es una de las actuaciones, unas de las prácticas educativas de este proyecto en todas las escuelas primarias. Es una fundación que hizo Natura, que trabaja apoyando a los estados en el desarrollo de políticas educativas. Y desde hace dos años tomó la definición, la decisión de apoyar a las provincias que así lo deseen en el desarrollo de dos políticas educativas específicas: La transformación de la escuela secundaria, por los altos niveles de abandono que existen, repitencia y también en bajos niveles de aprendizajes. Y la alfabetización inicial, es decir que los niñitos y las niñas en los primeros años de la escuela primaria aprendan a leer y escribir que es una deuda en muchas zonas del país. Estamos trabajando ahora en Misiones, la primera con la que empezamos a trabajar en secundaria, con Mendoza, estamos firmando un convenio con las provincias de Salta y Entre Ríos para iniciar la alfabetización inicial. Eso en Argentina. En Brasil, trabaja con 22 estados y hay convenios en México con dos estados.
¿Con qué se encontraron en Misiones, cuál es el estado de la educación?
Hay un estado prepandemia y otro en la pandemia. En Misiones, sucede lo que sucede en el resto del país en la escuela secundaria, o sea, tiene que ver con la historia de la escuela secundaria, que se pensó para unos pocos, selectiva, la meritocracia mal entendida, es decir, cuando el estudiante no aprende, repite y si no, se van y eso estaba bien, era esperable incluso que eso sucediera. Pero desde 2006, la educación secundaria es un derecho y es universal, es una obligación del Estado garantizar este derecho. La Argentina y Misiones, han visto mejoras, sobre todo en términos de trayectoria, hay más jóvenes en la escuela, sobre todo lo que fue en ciclo básico, ciclo orientado, pero sobre todo en trayectoria, han ido mejorando. Ahora con la pandemia hay que ver qué pasa, los especialistas internacionales hablan de un retraso de hasta diez años en los indicadores de trayectoria.
¿Por el efecto de la pandemia?
Por la pandemia, en toda la región. Después se ve también que terminar la escuela secundaria no necesariamente alcanza y no todos los estudiantes que terminan la escuela secundaria han desarrollado los conocimientos y las experiencias necesarias para continuar sus estudios en el nivel superior, insertarse en el mundo laboral, o ejercer una ciudadanía plena, además construir su proyecto de vida. Esto que se decía hace unos años, la mitad de los chicos del secundario sale sin saber leer y esto impacta en sus oportunidades de vida.
Misiones puso en marcha esta idea de escuela de innovación, ¿qué resultados pueden esperarse?
Desde Natura y desde Cippec, tenemos una alianza para apoyar esta política educativa. La Escuela de Innovación fue pionera en pensar una educación inclusiva, una educación significativa, una educación que trabaja la justicia, el reconocimiento a la diversidad, etc. El apoyo que estamos dándole a Misiones es poder pensar una política educativa de transformación a todas las escuelas de la provincia. Ahí estamos trabajando, formación docente, formación de directores, pensar qué cambios se pueden hacer en la escuela secundaria.
¿Y se pueden hacer? Porque no habrá en cada localidad una infraestructura similar o el acceso a la tecnología…
El foco de la innovación está puesto en lo pedagógico, en pensar ese aprendizaje como más significativo, más integrado, que haya una enseñanza que se conoce como metodologías activas, donde el estudiante es activo y es protagonista de su aprendizaje. Una educación que forme para una ciudadanía global, un reconocimiento a la diversidad, que haya un valor por la diversidad, que son innovaciones pedagógicas, la tecnología ayuda, acompaña y demás, pero no es el foco de lo que creemos necesario para cambiar.
Cambiemos el eje de la pregunta, ¿puede haber mejoras similares en Posadas que en Pozo Azul, un pueblo pequeño recién creado, con condiciones sociales distintas, de acceso, de formación de los padres?
La escuela, tanto la primaria, como la secundaria tiene la obligación, o sea, está dentro de sus responsabilidades garantizar el acceso a la educación, hay condiciones básicas que obviamente tienen que garantizarse, pero es una propuesta que se puede desarrollar en cualquier parte de la provincia, sí totalmente, tiene que ver con la sofisticación de la propuesta pedagógica. Que tiene que ser una propuesta que logre motivar a los estudiantes, que ellos logren interesarse por aprender lo que se les propone, que logre que ellos quieran aprender, que logre que ellos quieran quedarse en la escuela, que estén bien en la escuela, sobre todo. La escuela de Innovación lo más impresionante, si bien no estamos trabajando directamente con lo que es escuela de innovación, pero el edificio es muy lindo, obviamente es muy llamativo, pero lo más interesante es la mirada que se tiene del estudiante, como una persona con derechos, es valioso, se los conoce, se los recibe con alegría, la parte emocional del trabajo de los estudiantes que es muy importante para el aprendizaje y para el desarrollo, que está demostrado que si uno no está bien no aprende. O sea, los seres humanos si no estamos bien, no aprendemos, no creamos, no somos resilientes, hay un montón de cuestiones que tienen que ver con lo emocional. Me parece que eso es importante para esta escuela y en todas.
¿Los docentes misioneros se adecuaron a esa línea?
Creo que a los docentes, nos gratifica lograr cosas, aportar, sentirnos valiosos, sentir que lo que hacemos funciona, que estamos logrando cosas. Entonces, si uno piensa en docentes que están formados, que tienen las herramientas, que saben cómo hacerlo, que se los acompaña, si uno ve que con cambiar las prácticas de enseñanza logras que tus estudiantes estén más motivados, que estén más contentos, que aprendan más, eso para mí es la clave.
¿Y en cuánto tiempo podemos ver resultados?
Hay que ver eso, porque las condiciones son distintas pero las condiciones son más propicias para la innovación en la zona rural, porque hay menos estructura, hay más flexibilidad, más cercanía de las relaciones interpersonales, entonces el tema de los vínculos es muy importante para el aprendizaje, para animarse a innovar también. Son condiciones distintas, pero en ambos casos se puede lograr. De hecho, si uno mira los resultados de las pruebas Aprender, los resultados de las escuelas rurales han mejorado un montón, han mejorado de una manera impresionante en relación con las urbanas, que estarían más estancadas. Hay condiciones más propicias en zonas rurales para la innovación, tiene que ver quizás más de participar de experiencias de formación que te transformen como docente, después es un ambiente que es más propicio.
¿Esta política de innovación en Misiones, cómo está en relación con otras provincias?
Hay una tendencia desde la Ley de educación nacional del 2006, mirando los indicadores educativos del nivel secundario, hay una intención de transformar la educación secundaria en las provincias, hay experiencias muy interesantes en Río Negro, Tucumán, en Córdoba, en Buenos Aires, en Ciudad de Buenos Aires, en Neuquén, cuando uno quiere acordar hay un camino recorrido, mismo en Misiones. Yo no soy misionera, pero seguro si empiezo a investigar, a preguntar seguramente que han habido muchas cosas de camino a la mejora y la transformación de la escuela secundaria, con un resultado monumental, con mejoras en el aprendizaje, en la trayectoria. Esta política de Misiones, es misionera, es innovadora, es creativa, pero aprende también de lo que se ha hecho en otros lados, no hay que inventar la pólvora, pero sí hay que reconocer que es misionera, con toda la riqueza y la diversidad que tiene Misiones y es impresionante. Es una provincia muy especial.