La foto Macri-Lagarde y un balance a la “renegociación” que pide toda la oposición
La foto que obtuvo ayer Mauricio Macri con la propia Christine Lagarde, titular del FMI, buscó contrarrestar las reuniones que los funcionarios del organismo internacional mantuvieron con los candidatos de la oposición, todos ellos con la propuesta de una renegociación, que despierta tantas dudas como los deseos de continuidad de la actual administración.
El diario ‘La Nación’ fue quizás uno de los más elocuentes al dedicar su foto central al encuentro de Mauricio Macri con Christine Lagarde, titular del FMI. El matutino da cuenta que el mandatario argentino “se llevó otro fuerte gesto de respaldo” y asegura que el Mercosur y la Unión Europea “podrían cerrar hoy un histórico acuerdo de libre comercio”.
En el otro extremo, el diario ‘Página/12’ se refirió a “Otra prueba de amor entre Macri y Lagarde”, y dice que sus destinos parecen cada vez más unidos”: “Si Macri no reelige, Lagarde se enfrentará con una tormenta”.
“Celoso por la posible repercusión mediática de las reuniones que el enviado del Fondo Monetario Internacional a Buenos Aires, Alejandro Werner, mantuvo con Alberto Fernández, del Frente de Todos, y Roberto Lavagna, de Consenso 2019, consiguió que su primera actividad oficial en Osaka, Japón, donde se reúne la cumbre del G-20, sea un encuentro con la mismísima directora general de ese organismo, la francesa Christine Lagarde”.
Así explica el matutino la foto que intentó balancear las reuniones del director del Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, con los candidatos de la oposición: Alberto Fernández, y Roberto Lavagna, para analizar las perspectivas económicas tras las elecciones de octubre.
“Aunque el Fondo pone todas sus fichas a la continuidad del oficialismo -tanto que, bajo la presión de la Administración Trump, aceptó autorizar la continuidad de la fuga de divisas con los dólares que le provee al gobierno de Macri-, seguramente no le vendrá del todo mal tener algún tipo de acercamiento con la Argentina que posiblemente asome después del 10 de diciembre. Después de todo, cualquiera sea entonces el inquilino de la Casa Rosada, le deberá decenas de miles de millones de dólares”, remarca el diario.
Y agrega: “La Argentina y FMI tienen firmado un acuerdo stand by por el cual, el organismo garantizó asistencia financiera al país por 57.300 millones de dólares, a 3 años, para que pueda equilibrar sus cuentas externas y fiscales. De ese total, el FMI ya desembolsó 39.000 millones de dólares y antes de las elecciones debe girar otros 5400 millones. Una vez efectivizado ese monto, se habrá girado el 78 por ciento del monto comprometido. A quien gane las elecciones presidenciales de octubre le tocará el turno de devolver lo gastado por Macri en este último año”.
El diario ‘BAE’, por su parte, remarca que el FMI rechazó una posible renegociación del acuerdo que reclama la oposición. En efecto, “renegociación” fue el término que dominó ambas reuniones, y que el diario considera necesario.
Lo avala sosteniendo que es inviable la continuidad sostenida de los ajustes fiscal y monetario, y citando al economista jefe de Ecolatina, Matías Rajnerman, el más duro a la hora de explicar qué ocurrirá con la economía si no hay renegociación: “Las políticas del Fondo sirven sólo para ordenar las cuentas públicas. Subsumen la performance de la economía entera, el crecimiento, la inversión, todo lo referido a la economía real, al desempeño de una sola variable, que es el déficit fiscal, porque la tasa hoy es para contener al dólar. Más que sentar las bases de un crecimiento sostenido, hoy la política fiscal sienta las bases de la recesión. Si hay rebote será estadístico y caída en el PBI per cápita”.
También da voz al director de Epyca, Martín Kalos, quien sostuvo que “hoy el FMI afirmó que al plan económico hay que mantenerlo. Eso te pone un claro corset en tu capacidad soberana de definir políticas económicas. Ambas metas son para estabilizar y la verdad es que es difícil estabilizar así, sin horizonte productivo. Cualquier Gobierno va a tener desequilibrios recurrentes con este contexto en el que esas dos son las únicas premisas. Es una trampa y resulta insostenible, con esta inflación, mantener la emisión 0%”.
‘El Cronista’, por otra parte, que prioriza que Macri iniciará hoy su participación en la Cumbre del G-20 y consigna que “tendrá su atención puesta en Bruselas, donde el canciller Faurie espera arribar a un acuerdo político entre la Unión Europea y el Mercosur”, destacó que Lagarde ratificó su apoyo a las políticas del Gobierno, pero también Hernán de Goñi expuso lo que le quedó claro al FMI:
“Werner quería escuchar de primera mano el diagnóstico de los dos referentes sobre lo que está haciendo Mauricio Macri y evaluarla potencial continuidad del actual esquema monetario y scal. El eco que encontró sobre esas chances fue poco. De hecho, son unos cuantos los economistas que aseguran que de cara al 2020 la Argentina tiene que tener un plan de estabilidad que ante todo, permita detenerla inflación, bajarlas tasas de interés y favorecer un mayor crecimiento de la economía.
Lo que le quedó claro a Werner es que eso se hará con el FMI, y no sin él. Carlos Melconian lo dijo con claridad en un foro: “los primeros dos años Macri hizo un uso abusivo del endeudamiento, el 2018 y el 2019 los cerró el FMI y lo que queda ver es quién va a cerrar 2020 y 2021″.”
‘Ámbito Financiero’, que también se muestra ansioso por el “acuerdo demorado hace 20 años” y considera que es “la última chance” para Macri de cerrar un acuerdo que “sea el sello de su política internacional en los cuatro años de su gestión iniciada en 2015”, destaca de la reunión de Alberto Fernández la “renegociación” propuesta:
“Nosotros negociamos muy duro con Horst Köhler en septiembre de 2003. Finalmente llegamos a un acuerdo y lo cumplimos. Y en diciembre de 2005 ya no le debíamos nada al FMI. Lo que hicimos es poner en marcha el aparato productivo del país. Ahora proponemos lo mismo”. Alberto Fernández fue cordial, directo y duro con la delegación de altísimo nivel que el Fondo Monetario Internacional envió ayer a Buenos Aires para hablar con la oposición, y conocer de manera directa sus verdaderas intenciones ante el organismo en el caso de que venzan a Mauricio Macri en las próximas elecciones. Enfrente se encontraron a un ex jefe de Gabinete crítico en un capítulo central: la habilitación para que se puedan utilizar los dólares del stand by para contener reservas. Fernández dejó en claro que, en un eventual gobierno de su frente, “deberá aplicarse una política de crecimiento que le permita al país generar los dólares para pagar la deuda. Todo lo contrario del acuerd o actual”.
En cuanto a la foto de Macri con Lagarde, destacó las palabras de esta última, quien destacó que “los esfuerzos están comenzando a dar resultados y deberían sentar las bases para el retorno de la confianza y el crecimiento”.
Por último, el diario ‘Clarín’, remarca lo que dijo “Alberto Fernández por el temor del FMI a Cristina Kirchner”. Lo hizo Marcelo Bonelli en un análisis que afirma que el “candidato a Presidente fue duro en su léxico, pero dejó en claro que no iría a un default, en caso de ganar”.
“Así le habló, ayer, al enviado del Fondo Monetario, Alejandro Werner. Pero sus palabras tenían una audiencia mayor: los mercados internacionales, que descreen de Cristina, La Cámpora y los “gurkas” del kirchnerismo. Ocurrió en las oficinas de Fernández. Estaba con Matías Kulfas, Cecilia Todesca y Santiago Cafiero. Guillermo Nielsen está en misión en Europa.
Fue cuando el director del Hemisferio Occidental del FMI, puso el dedo en la llaga: Werner hizo una directa alusión al pánico que genera en los mercados una eventual vuelta de la ex presidenta. (…)”
De modo similar, a como lo hizo Ámbito, mencionó que Alberto intentó ser convincente: “Nosotros siempre cumplimos. Pero por este camino que eligió Macri y avaló el Fondo no se generan los dólares para pagar”. (…) planteó la posibilidad de una reprogramación del acuerdo con el FMI. Así lo dijo: “La última vez que hablé con el Fondo, fue con Kohler. Hicimos un acuerdo a tres años para poder pagar”. Y remató: “Cumplimos y cancelamos la deuda con el FMI”.”
Bonelli contó que Werner habló poco, y que se “molestó porque le echaron en cara, el evidente apoyo político de Christine Lagarde a favor de la reelección de Mauricio Macri”.
En su artículo, insiste en que la “reprogramación del acuerdo con el FMI, lo plantean todas las fuerzas políticas” y remarca que “los hombres de negocios internacionales –y los locales– viven con cierto dramatismo el proceso electoral. Todos sostienen que la actual inestable “pax cambiaria” depende del resultado electoral en las primarias. Afirman que un triunfo amplio de la formula Fernández-Kirchner puede reavivar la corrida del dólar.