Jorge Ameal sobre las SAD: “Los clubes no ven cerca al monstruo, pero el monstruo está”
El vicepresidente de Boca Juniors, Jorge Amor Ameal, visita Misiones de la mano de la Fundación Ideas en Movimiento para dar una charla a dirigentes deportivos. En la previa aceptó una entrevista con Economis donde hablo del rol de los clubes, la pasión que genera Boca y las SAD.
El Gobierno de Javier Milei en Argentina está impulsando un plan para habilitar el ingreso de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) en los clubes de fútbol, una propuesta que busca transformar el modelo de gestión tradicional basado en asociaciones civiles sin fines de lucro. Según las explicaciones oficiales, esta iniciativa tiene como objetivo modernizar la estructura financiera y administrativa de los clubes deportivos, muchos de los cuales enfrentan serios problemas económicos y de endeudamiento.
El Gobierno sostiene que el cambio permitiría a los clubes acceder a nuevas fuentes de financiamiento mediante la capitalización privada. Con la estructura de las SAD, los inversores podrían adquirir acciones y participar en la toma de decisiones estratégicas, algo que, según sus defensores, traería mayor profesionalización y estabilidad financiera. Además, el oficialismo asegura que esta medida podría atraer inversiones extranjeras, dinamizando el mercado local y aumentando la competitividad de los equipos en el plano internacional.
Otro de los argumentos es que las SAD ayudarían a mejorar la transparencia y la gestión de los recursos. A través de mecanismos de regulación y auditoría más estrictos, el Gobierno espera reducir la corrupción y el mal manejo de fondos, problemáticas que han afectado a varios clubes en las últimas décadas.
Desde una perspectiva económica, la implementación de las SAD podría generar un nuevo esquema en el fútbol argentino, donde los clubes grandes podrían beneficiarse del acceso a capitales internacionales. No obstante, algunos sectores críticos alertan sobre los riesgos de la privatización del deporte. Se teme que los intereses comerciales primen sobre los valores comunitarios y deportivos, lo que podría derivar en una mayor desigualdad entre clubes ricos y aquellos con menos recursos.
En términos sociales, el impacto sobre la cultura del fútbol en Argentina podría ser significativo. Los hinchas, que históricamente han tenido un fuerte sentido de pertenencia y participación en los clubes, podrían ver limitada su influencia en las decisiones que afectan a sus equipos. En otros países donde se han implementado las SAD, como España e Inglaterra, ha habido casos de clubes que perdieron parte de su identidad local tras la llegada de grandes inversores.
El proyecto ha generado un intenso debate entre dirigentes de clubes, hinchas y especialistas en derecho deportivo. Mientras algunos clubes, especialmente los de menor envergadura, ven con buenos ojos la posibilidad de sanear sus economías, otros –especialmente los grandes clubes históricos como Boca Juniors y River Plate– se muestran más reticentes a la idea de perder el control sobre sus decisiones.
Por otro lado, el sindicalismo del deporte y diversos colectivos de hinchas han expresado su preocupación por los efectos sociales de esta transformación, enfatizando la importancia de preservar la esencia de los clubes como asociaciones civiles que cumplen una función social.
El plan de Milei para permitir el ingreso de las SAD busca modernizar el fútbol argentino y adecuarlo a las dinámicas del mercado global, aunque sus repercusiones a nivel social y deportivo aún generan interrogantes y tensiones en un país donde el fútbol es más que un deporte: es parte fundamental de la identidad cultural.
En este contexto la llegada de Ameal a Misiones es interesante. Histórico dirigente de Boca Juniors, club en el cual ha desarrollado diferentes roles desde 1986 a la fecha, llegando a ocupar la Presidencia y actualmente la Vicepresidencia detrás de Juan Román Riquelme.
Ameal ha promovido la idea de que Boca siga siendo una asociación civil sin fines de lucro, oponiéndose abiertamente a la iniciativa del Gobierno de Javier Milei sobre las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD). Ameal argumenta que los clubes deben mantener su naturaleza social y comunitaria, priorizando la participación de los socios y rechazando la privatización del fútbol.
En la charla con Economis, Ameal remarcó que los clubes tienen un rol social “más allá de lo deportivo”, por eso es importante mantenerlos como Sociedades Civiles sin fines de lucro. Porque para las empresas o capitales que dirigirán los clubes como una SAD, “lo que no es rentable se cierra. Y ahí que pasa con los jóvenes de los barrios, donde irán, ellos y sus familias”.
Para Ameal, la función principal de los clubes de barrio es “alejar a los jóvenes de las drogas y las cosas malas. El deporte debe ser un aliado de la juventud y los clubes deben pensarse para eso”.
Para el dirigente deportivo los clubes son mucho más que el fútbol. Lo definió diciendo que “de lunes a sábado prima la lógica y los domingos la pasión”. Remarcando que en los clubes se hacen una infinidad de actividades sociales que ofrecen inclusión a los jóvenes y sus familias.
“Boca por ejemplo no es solo fútbol, tenemos basket, judo, hockey, infinidad de disciplinas. Aparte no todos los chicos van a jugar a algo, pero tienen que estar dentro del club. El club los aleja de cualquier droga, cualquier cosa rara que pueda andar por la cabeza de los chicos. La esquina es mala. La esquina es mala consejera”, remarcó Ameal.
“Por eso hay que aportarles a los clubes. Los clubes de barrio. Yo me crie en un club de barrio Berazategui, yo me acuerdo de que a las ocho de la noche me llamaban y me decían los mayores anda a tu casa, te tenés que ir”, ahí los grandes que eran nuestros ejemplos nos cuidaban y así debe ser”, remarcó.
Ante la consulta de que pasa por los clubes, que no salen a sentar postura claramente más allá de AFA, explicó que los clubes “no ven cerca el monstruo. Pero el monstruo está. O sea, están confiados en que no va a prosperar la idea de las SAD. Que no va a pasar porque primero tiene que pasar por el Congreso y por el congreso no va a pasar”, dijo concluyente Ameal.
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