Miles de turistas, científicos y habitantes observaron el eclipse en San Juan desde varios lugares
El departamento sanjuanino de Iglesia se convirtió hoy en el epicentro de la observación del eclipse solar en la provincia con la llegada desde el fin de semana pasado de turistas y científicos que ocuparon todas las plazas hoteleras en 250 kilómetros a la redonda, muchas de las cuales estaban reservadas desde hace más de un año.
El lugar privilegiado para ver el fenómeno, fue la localidad de Bella Vista donde según la ministra de Turismo de San Juan, Claudia Grynspam “hay más de siete mil personas entre las que se cuentan a miles de astrónomos y cazadores de eclipses, especialmente de Europa y otros países como Estados Unidos, Canadá y Japón”.
Poco después del mediodía, en el predio preparado en el medio del campo por el gobierno, empezaron a instalarse los observadores con sus equipos y desde las 16 se iniciaron los estudios para registrar cómo la luna se acercaba a la línea directa para interponerse entre el astro rey y la tierra.
A las 17,39 llegó el momento esperado, duró apenas poco más de 2 minutos, pero alcanzó para provocar emociones que se manifestaron con aplausos, risas, gritos y hasta lágrimas por el eclipse solar total que oscureció el cielo de San Juan.
En la ciudad, se oscureció la Plaza 25 de Mayo, en pleno centro, donde los transeúntes se detuvieron para observar el espectáculo que empezó a las 17:40:36 y duró por apenas 30 segundos durante los que se hizo de noche en pleno día.
Los sanjuaninos de la capital eligieron las amplias veredas del Teatro del Bicentenario para observar el eclipse, lo mismo que la altura del campanil de la Catedral de San Juan.
En esos lugares no había tecnología como en Bella Vista, pero sobraba creatividad, como en la Plaza del Bicentenario donde dos estudiantes jujeños de ingeniería sorprendieron a todos con el modo que eligieron para protegerse del eclipse.
Allí Fabian Cusi (22) y Alvaro Joaquín Robles (24) se inspiraron en un episodio de Los Simpson para realizar “la cámara oscura” con una caja de zapatos, una hoja A4, un rollo de papel higiénico, una tijera, un lápiz, plasticola y una aguja.
En el mismo lugar también estaban Mateo (6) y Fernando (53) de Capital, quienes hicieron una caja en la escuela y compraron los lentes para ver el eclipse.
El punto de observación más concurrido en la zona capitalina fue el Complejo Ferial Costanera, ubicado en el departamento de Chimbas, lindero a la ciudad de San Juan, hasta donde el gobierno dispuso de transporte en colectivos.