El futuro demanda el uso sostenible de los recursos forestales

Compartí esta noticia !

Los representantes del Consejo Foresto Industrial Argentino – CONFIAR – se dieron cita en MUNDO FORESTAL, el trailer itinerante e interactivo de Arauco – una de las más importantes empresas forestales del país- para visibilizar a un sector productivo que emplea en forma directa y formalmente a más de 100.000 personas y exporta alrededor de 700 millones de dólares anuales.

El Consejo Foresto Industrial Argentino – CONFIAR – compuesto por la Asociación de Fabricantes de Celulosa y Papel (AFCP), la Asociación Forestal Argentina (AFoA), la Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera (ASORA) y la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA), apoya y promueve el desarrollo de este tipo de encuentros, con el fin de destacar el valor de la toda la cadena productiva foresto-industrial, con especial foco en la oportunidad que la madera ofrece para la mitigación del cambio climático, productos  sostenibles y oportunidades de inversión y empleo. En tal sentido, promueve el desarrollo de la forestación y de la industria de base forestal y sus industrias y servicios de apoyo en todo el t erritorio del país, en forma económicamente competitiva, socialmente responsable y ambientalmente sostenible en el contexto conceptual de una bioeconomía circular.

MUNDO FORESTAL es un trailer especialmente adaptado con innovadora tecnología que propone diversas actividades lúdicas para descubrir la actividad forestal nacional y toda la cadena foresto-industrial. Con especial foco en la educación ambiental, dentro de este espacio se emiten contenidos interactivos que cuentan sobre esta industria, su aporte al cambio climático, sus usos para la construcción con madera, muebles, industria, bosques nativos y forestaciones y, la gran atracción es un sistema único que permite calcular la huella del carbono de cada visitante. La propuesta es aprender a traves del juego y, ademas, enviar un mensaje de concientizacion sobre cuánto significan los bosques para un futuro más sustentable para todos. En tal sentido, MUNDO FORESTAL reafirma estos conceptos y dice presente por segunda vez en la Rural. Este espacio ya se ha convertido en una de las atracciones más destacadas de la feria. “Hay un gran interés de la gente por conocer en profunidad todas las etapas de la industria forestal argentina y descubrir cómo se realizan todos los procesos productivos. La sorpresa es grande y positiva en cada uno de ellos” explican los organizadores.

Argentina tiene actualmente un patrimonio de 1,3 millones de hectáreas de plantaciones forestales, un 55% de ellas certificadas con sellos por gestión sostenible reconocidos internacionalmente. La foresto-industria de Argentina se provee en un 95% de madera proveniente de dichas plantaciones. El agregado de valor incluye la producción de celulosa y papel, madera y tableros para viviendas y muebles, energía eléctrica y térmica, y diversos productos químicos. Con 13.000 productores forestales y más de 6.000 empresas, la foresto industria es hoy es una herramienta del desarrollo sostenible que permite la mitigación del cambio climático y alternativas de bienes renovables y carbono positivo.

Osvaldo Vassallo, presidente de la Asociación Forestal Argentina, AFoA, destacó que “existe un ideal de una nueva Argentina Forestal, que genera materia prima sostenible para alimentar industrias y sectores estratégicos como ser las energías renovables, la construcción de viviendas; muebles, el papel (el país importa unos 1000 millones de dólares al año en papeles) y biorrefinerías que aportan a múltiples productos sostenibles, como los textiles y nanocelulosa, entre otros rubros. Sin dudas estamos ante uno de los sectores que más potencial tiene para desarrollarse y generar empleo y divisas en el país y en toda América Latina.”

Por su parte, Claudio Terréspresidente de la Asociación de Fabricantes de Celulosa y Papel (AFCP), expresó: “Somos un sector con una cadena de valor con alto potencial de crecimiento por condiciones naturales, pero con dificultades estructurales. Una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil. Por eso, es necesario fortalecer a todos sus eslabones. El desafío es generar las condiciones para atraer inversiones de alto valor, que potencien el desarrollo de las economías regionales, aumenten las exportaciones y mejoren la balanza comercial del sector. El compromiso es hacerlo a través de una gestión sustentable, en donde la forestación contribuye a la mitigación del cambio climático y la reciclabilidad potencie la Economía C ircular”.  

Luego, Osvaldo Kovalchuk, vicepresidente de la Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera (ASORA), destacó: “La participación de CONFIAR en La Rural es una muestra de la importancia que tiene la madera en la vida cotidiana. Desde ASORA sumamos la tecnología que hace posible el agregado de valor para toda la cadena de la industria de la madera. De hecho, durante la próxima década, la actividad foresto industrial estará influenciada por el creciente protagonismo de los temas medioambientales. Desde nuestra entidad aportamos soluciones para que la industria dé respuestas a las nuevas exigencias de un mercado donde los consumidores y la tecnología jugarán un rol fundamental. Al mismo tiempo, la tecnolog&iac ute;a 4.0 comienza a marcar el rumbo que tomarán en el futuro las industrias de la cadena de valor de la madera. En este contexto, la foresto industria deberá ser protagonista y mantenerse unida para lograr mayor representatividad y reconocimiento”.

Finalmente, Román Queiroz, presidente de la Federación Argentina de la Industria de la Madera (FAIMA) que representa a nivel nacional el sector industrial maderero a través de sus 28 cámaras asociadas, afirmó que “la participación de CONFIAR en La Rural es un paso más para toda la cadena en el compromiso de llevar adelante políticas tendientes a incrementar el impacto positivo sobre el medioambiente, aumentando los procesos productivos afines a la economía circular y a la mitigación del cambio climático. Toda la cadena de valor desde la forestación hasta el mueble tiene un enorme potencial con una capilaridad que llega a todos los rincones del país. Es un eje central que permite reactivar economías regionales, expandir el c onsumo mientras se piensa en el mercado externo. Nuestro trabajo como empresarios industriales no se limita a nuestro saber hacer del día a día dentro de la fábrica. Somos creadores de empleo, somos creadores de marca país, somos nuestras horas en las asociaciones y federaciones, donde buscamos destapar el potencial para un país cada vez más grande e inclusivo”.

Compartí esta noticia !

La Foresto Industria presentó propuesta para la Estrategia Nacional de Mitigación de Cambio Climático

Compartí esta noticia !

El Consejo Foresto Industrial Argentino-CONFIAR– presentó al Gabinete Nacional de Cambio Climático su aporte para la mitigación del cambio climático, en el contexto de la elaboración de la Estrategia de Desarrollo a Largo Plazo Bajo en Emisiones y Resiliente con objetivos de Carbono-Neutralidad al 2050.

CONFIAR – formado por la Asociación de Fabricantes de Celulosa y Papel (AFCP), Asociación Forestal Argentina (AFoA), Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera (ASORA) y la Federación Argentina de la Industria Maderer a y Afines (FAIMA)- manifiesta  el apoyo al mantenimiento de las metas de aumentar la superficie forestada a 2 millones de hectáreas en 2030 presentada en las Contribuciones Nacionales en 2019 y se solicita se sume el aporte que puede realizar el uso de la madera para avanzar en la descarbonización de la economía con las políticas e inversiones previstas en Plan Estratégico Foresto Industrial 2030.   Por otro lado, se considera imprescindible realizar un ejercicio similar para evaluar e incluir el aporte de los árboles y el uso de la madera en la estrategia de largo plazo con los objetivos de carbono-neutralidad para el 2050 en la seguridad de que los árboles y el uso de la madera son actores principales e imprescindibles en dicha estrategia.

Cinco claves para entender por qué se considera fundamental incluir a los árboles, las plantaciones forestales y al uso de la madera sostenible en la Estrategia Nacional:

1.- La plantación de árboles es una de las principales medidas de absorción de CO2 para las estrategias de mitigación del cambio climático.  En el documento publicado por la UE el 16 de julio pasado, tomando antecedentes de documentos de diversas COP, manifiesta que “los árboles son una solución basada en la naturaleza para una forma eficiente y rentable de absorber CO2 de la atmósfera, lo que da tiempo para desarrollar e implementar soluciones tecnológicas innovadoras para los objetivos de reducción de emisiones en otros sectores”.

2. Las plantaciones forestales en Argentina – distinción de stock y flujo: Una de las críticas al uso de plantaciones forestales en políticas de mitigación de cambio climático es que luego el árbol se corta. En este sentido, es importante distinguir el aporte en stock (carbon sink) de las plantaciones con el flujo de madera sostenible de dicho patrimonio forestal. Actualmente Argentina tiene una superficie de 1,3 millones de ha de plantaciones forestales, un 55% de ellas certificadas con sellos por gestión sostenible reconocidos internacionalmente. Con una extracción de unos 15 millones de Ton anuales (el 50% de la producción anual de la masa forestal), la foresto-industria de Argentina se provee en un 95% de madera de dichas plantaciones. El agregado de valor incluye la producción de celulosa y papel; madera y tableros para viviendas y muebles; energía eléctrica y térmica y diversos productos químicos. Con 13.000 productores forestales y más de 6.000 empresas de agregado de valor, la foresto-industria emplea en forma directa y formalmente, a unas 100.000 personas y exporta alrededor de 700 millones de dólares anuales. Históricamente, tiene una ba lanza comercial negativa, principalmente, por la importación de papel. El stock de plantaciones de Argentina se ha incrementado y se mantendrá en la medida que haya industrias que utilizan y valoran el flujo. Por ejemplo, para alimentar una planta de celulosa Kraft de escala internacional (1 millón de ton de celulosa al año), se requieren 5 millones de ton de madera de pino. O sea, se debe mantener una plantación de 125.000 ha en forma permanente para asegurar un flujo de madera constante para alimentar la planta.Otro concepto importante es que el carbono que emite el sector de agro y bosques es carbono biogénico, o sea, está dentro del ciclo de la naturaleza. No es carbono proveniente de fósiles que se agregan a la atmósfera luego de su extracción del subsuelo.

3. Aportes a la descarbonización de la economía: las plantaciones forestales tienen uso múltiple y complementario. Por un lado, la madera sólida se utiliza en construcción de viviendas, muebles, pisos, etc. por el otro, los subproductos del manejo forestal (raleo) y de la industria de la madera (chips, aserrín), se utiliza en la industria del triturado: celulosa, papel, textiles, paneles, bioproductos, bioenergía. El uso de todos estos productos colabora en la descarbonización de la economía al reemplazar productos no renovables o fósiles, como es el cemento, los plásticos, el gas-oil, etc. En particular, se está impulsando tanto el uso de papeles y cartones kraft para reemplazar plásticos, la construcción con madera para reemplazar cemento, ladrillo s y otros productos no renovables e intensivos en energía y el uso de pellets y chips para calderas y estufas en reemplazo de combustibles fósiles

4. Bioenergía: En Argentina existen grandes volúmenes de biomasa de origen forestal sin aprovechar. Se trata de subproductos provenientes de dos fuentes. Por un lado, los disponibles en la foresto industria, como consecuencia del rendimiento de los aserraderos que es cercano al 50%, estimado en 2 millones tn/año. Por el otro, en las plantaciones quedan residuos de las podas, raleos y de la tala rasa, que se estiman en volúmenes mayores a 5 millones tn/año. A esto se suma el potencial de manejo sustentable del bosque nativo que permitiría actualmente obtener más de 9 millones de tn/año (según estimación de Probiomasa). Este volumen potencial, estimado en 16 millones de toneladas de biomasa, concentrado principalmente en las provincias del NEA y NOA, permitiría instalar de l orden de 4.200 MW de generación térmica con una eficiencia promedio del 80% y 8.000 horas al año de uso en reemplazo de combustibles fósiles. La sustitución de combustibles fósiles por BCS permitiría reducir emisiones de GEI cercanas a los 4 millones de tnCO2e.

5. Biorefinerías: es importante incluir a la producción de bioproductos y biomateriales de base forestal dentro de la Estrategia del país para la descarbonización de la economía y evaluar el aporte de las biorrefinerías y la nanotecnología de recursos forestales a la economía circular y el desarrollo sostenible. La biorefinería es un concepto que involucra un esquema de procesos o una planta integrada que produce múltiples productos de valor agregado a partir de materias primas renovables. La biorrefinería genera mayor valor a la materia prima del sector forestal, en forma de productos clásicos (celulosa y papel), nuevos materiales, productos químicos y energía

Compromisos de Argentina al 2030:

Dentro del Acuerdo de Paris, Argentina comprometió como aporte condicional a lograr un patrimonio de plantaciones forestales de 2 millones de ha para el 2030, con un aumento de 700.000 ha sobre la superficie actual de 1,3 millones de ha, lo que permitiría una absorción de 18,06 millones de tn de CO2eq en 2030. Esto implica aumentar la tasa de plantación a unas 100.000 ha anuales, o un 300% lo que se planta actualmente. Ese stock de plantaciones permite un flujo de madera de alrededor de 40 millones de m3 anuales para alimentar a diversas industrias que permiten la descarbonización de la economía. En el Plan Estratégico 2030, se proyectan las inversiones potenciales con dicho flujo de madera que permite más que duplicar la actividad actual, con la creación de más de 160 mil emple os regionales y atracción de importantes inversiones.

Condiciones habilitantes para lograr una expansión forestal sostenible:

a.    Superficie disponible: Argentina tiene una amplia superficie para expandir las plantaciones forestales en forma ambientalmente sostenible. Un estudio realizado por el FAO (2020) v en el marco de Probiomasa para evaluar el potencial de plantaciones dendroenergéticas en Argentina detectó cerca de 15 millones de hectáreas potencialmente aptas para plantaciones forestales en todo el país. En dicha estimación no incluyeron suelos utilizados en agricultura ni superficies consideradas en el ordenamiento de bos ques nativos.

b.    Ordenamiento territorial: Para que la expansión sea realmente sostenible, se debe plantar el árbol correcto, en el lugar correcto, de la manera correcta y con el propósito correcto. Para ello, la Ley 25080 (en su modificación por la Ley 27487) incluye avanzar en la zonificación para realizar análisis de impacto ambiental a nivel de cuenca forestal, en vez de a nivel de predio, en función a criterios de sostenibilidad ambiental, económica y social. Para asegurar que se planta en el lugar correcto se debe acelerar la disponibilidad de esta herramienta de ordenamiento territorial.

c.    Inversión en valor agregado: El mantenimiento y ampliación de la superficie forestada por la Ley 25080 se logrará si y solo si hay un destino cierto de la madera que incentive cortar y volver a plantar. Una estrategia de expansión de las plantaciones debe estar acompañada por financiamiento y promoción de inversiones en agregado de valor. El Plan Estratégico 2030 estima que se pueden atraer alrededor de 7 mil millones de dólares de inversión para agregar valor a los 2 millones de ha previstas de superficie forestada.

d.    Financiamiento interno: La Ley 25080 y la promoción forestal para plantaciones y enriquecimiento de bosques nativos puede cubrir una parte considerable de las metas propuestas al mismo tiempo de crear empleo y desarrollo local. Los plazos entre la plantación y la cosecha – de alrededor de 16 años- reducen los incentivos a la forestación comercial lo que ha justificado en todo el mundo el apoyo de las mismas hasta, al menos, que se desarrollen las inversiones industriales en agregado de valor que impulsan plantaciones forestales y cierran un círculo virtuoso. Recientemente se aprobó con media sanción en e l Senado el proyecto de Ley S806/21 mediante el cual se crea el Programa de Sustentabilidad Ambiental y Seguros (PROSAS) para financiar la Ley 25080 de promoción de inversiones forestales y enriquecimiento de bosques nativos. Para ello, crea un aporte obligatorio del 0,5% que deben realizar los asegurados sobre los seguros automotores. El proyecto vincula directamente a una importante fuente de emisión de GEI -automotores- con las fuentes de absorción de GEI -árboles-. Este proyecto, convertido en Ley puede financiar parcialmente los objetivos de expansión de plantaciones forestales comerciales y el enriquecimiento de bosques nativos en forma sostenible, así como brindar materia prima renovable y carbono positivo para el agregado de valor en productos que permitan la descarbonización de la producción y el consumo.

e.    Financiamiento internacional: Como se indica, hay un redireccionamiento del sistema financiero internacional hacia la acción climática y países y grupos de países priorizando la acción climática en sus relaciones internacionales. Esto otorga una gran oportunidad de acceder a financiamiento internacional de diversas fuentes. En este sentido, el financiamiento climático a través del mercado de carbono jugará un papel clave para el desarrollo de nuevos proyectos, y para que esto suceda, la claridad y seguridad jurídica será condición indispensable para promover acciones de largo plazo.

El sector forestal y foresto-industrial argentino no solo está en condiciones de generar desarrollo sostenible en el sentido más amplio de la palabra, sino que el impacto social que traerá aparejado la implementación de inversiones propuestas será sumamente positivo en la creación de empleo de calidad, educación, arraigo, promoción de la biodiversidad y servicios ecosistémicos, desarrollo de tecnología y reactivación de economías regionales”, destacó Claudia Peirano, quien presentó el documento en la reunión.

Compartí esta noticia !

¿Pasteras sí o no? Laharrague dice que Corrientes tiene los árboles y el interés para atraer una planta de celulosa y papel

Compartí esta noticia !

Nicolás Laharrague podría haberse quedado cómodamente al frente de su empresa forestal, pero decidió jugársela y aceptar un cargo en la función pública como subsecretario a cargo de este sector, convocado por el nuevo ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere.

Desde ahí Laharrague trabaja para aprovechar un momento crucial para delinear políticas de Estado para el desarrollo forestal, que promueva la generación de trabajo y el desarrollo de provincias como Misiones y Corrientes.

Laharrague está impulsando el debate de la prórroga a la Ley 25.080 y juntando a todos los sectores para consensuar una visión común.

En una entrevista que concedió a la Revista de Asora, Laharrague se refirió a estos desafíos y dejó en claro que su gran objetivo es lograr “la industrialización de la madera” y que trabajará para captar a las grandes inversiones forestales “en pasta celulósica, papel y madera MDF”.

A continuación, reproducimos los pasajes principales de la entrevista de Laharrague con la Revista de la Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera (ASORA).

-¿A qué atribuye que a pesar de haber contado con un régimen de promoción forestal desde 1992, Argentina no haya alcanzado el desarrollo de países vecinos como en el caso de Uruguay, Brasil y Chile?

-La forestación siempre fue vista en la Mesopotamia o en la Patagonia. Gracias a que hubo una ley de promoción se mantuvo la superficie y en el caso de Corrientes se ha incrementado. Hoy sabemos que la masa forestal está lograda y lo que tenemos que hacer es transformarla. Darle valor y eso llevará a que sea redituable para el sector de manera que se puedan forestar más hectáreas. Que se pueda reforestar lo que se va cortando e incluso, que se pueda ampliar la superficie. Obviamente, los inversores grandes, que son jugadores internacionales (plantas de celulosa y papel, fábricas de OSB, MDF, etc.), han visto a países vecinos con más agrado que Argentina, ya sea por su estabilidad política, impositiva o laboral. En nuestro caso, los crecimientos son mejores que en Uruguay, iguales a los de Brasil y mejores que en Chile. Entonces, como país, claramente podemos mejorar el nivel y ser elegidos  para desarrollar la actividad forestal. Eso es lo que hay que revertir y hay que cambiar.
-¿Comparte la visión que para optimizar los recursos forestales del país habría que instalar una planta de celulosa y papel en Corrientes?

– Sí, la Provincia tiene la masa forestal y hace tiempo que viene trabajando para posicionarse en captar una inversión de ese tipo. Se apunta a una planta de papel marrón porque dentro de la matriz de importación es la que más pesa. En todo lo que es embalaje y otros tipos de papel somos deficitarios, y a nivel mundial la tendencia de consumo está creciendo. Se están instalando plantas de este tipo en otros países por qué no hacerlo en Argentina. Creo que hay que buscar la aceptación social y ambiental para conseguirlo. Asegurarse que la inversión se haga de una manera correcta tomando todos los recaudos. Este, precisamente, es el camino que han recorrido exitosamente los países vecinos.
-¿De su experiencia como industrial, piensa que hoy Argentina está en condiciones de volver al mercado de exportación con productos madereros?

-Los mercados existen, el desafío es ver cómo llegamos a ellos. Pienso que hay que trabajar sobre todos los aspectos que tienen que ver con la competitividad. Nuestra industria, la logística, la parte impositiva. Todas la cadena forestoindustrial y todos los sectores involucrados (privado; público; provincias; municipios; cámaras; productores), tienen que hacer un esfuerzo para alcanzar ese logro. Actualmente hay industrias locales que están exportando con un margen de rentabilidad muy chico, pero con el objetivo claro de ser híper eficientes en eso. En este punto hay mucho por recorrer. En lo que es logística hay que bajar todos los costos en la cadena, y en eso se está trabajando en la Mesa Forestoindustrial. El mundo se mide por la oferta y la demanda. Además, la madera es un commodity. Solo por ser Argentina no van a aceptar pagar un 20% ó 30% más.
-¿Le pesa ser el primer representante del sector privado de la forestoindustria que ocupa un cargo de decisión en el Ministerio?

-Sí, ahora estoy más tranquilo. Hace tres o cuatro semanas cuando me lo ofrecieron, era algo que no me lo veía venir. La aceptación de este desafío es grande para el sector. De mi parte voy a dar todo. El día que ya no pueda aportar daré un paso al costado. No vengo para calentar la silla sino para hacer cosas. Dejé mi zona de confort en la empresa para incorporarme a un puesto público y me apasiona lo que me ofrecieron, y voy a hacer todo lo posible para que la forestoindustria siga en la agenda presidencial.
-¿Cree que en estas mesas de diálogo público-privada se encontrará solución a los problemas que tiene la forestoindustria para su desarrollo?

– Sin lugar a dudas. En la mesa estamos todos los sectores. Podemos hablar, discutir sobre las diferencias, y también coincidir. Hay un pedido del Presidente Macri para que las partes resuelvan los temas, que muchas veces no se hizo por burocracia o desconocimiento. En la Mesa se van sorteando los problemas para ir logrando pequeños pasos que son bastante grandes. A fin de año se dio con la baja del arancel de la maquinaria importada para cosecha, algo que hasta ese momento era impensado para las PyMEs. Lo que veo es que el sector y todas las cámaras están con nuevos aires de esperanza y energía.
-¿Cuáles van a ser las prioridades de su gestión?
-La idea es consensuarlo con el mismo equipo de la Subsecretaría. Ver en qué estado están todos los trabajos, relevamientos e información que se fueron llevando adelante todos estos años. También consensuar con las cámaras sobre las necesidades. Y, un poco en línea con el eje del trabajo que puso el Ministro, facilitarle la vida a los productores y desburocratizar el sistema. En la parte forestal, una de las cosas sería tratar de simplificar los procedimientos de la Ley 25.080. Que la información sea pública, que el forestador pueda acceder facilmente a toda la información de sus planes. Seguir trabajando con las cámaras en la búsqueda de soluciones en las cuatro áreas que se establecieron en la Mesa Forestoindustrial: Infraestructura y Logística; Ley de Promoción Forestal; Industria; Medioambiente.  El otro eje importante que nombró el Ministro a nivel industria, es buscar relacionarse internacionalmente. Ver qué se necesita en el mundo y adaptarnos a esa demanda. En nuestro sector, captar inversiones  buscando alguna co-gestión con privados. Afuera se percibe que Argentina ha cambiado, pero es necesario mostrar que hay empresas y empresarios idóneos. El patrimonio forestal está y la mitad de la forestación no se está procesando, por lo que hay  que tratar de darle valor en forma urgente.
El sector viene planteando la necesidad de bajar los costos de los fletes. ¿En qué estado se encuentra el tema del uso de los bitrenes y la posibilidad de usar la Hidrovía?
-Recientemente se hizo una primera prueba en Misiones, en la Ruta Provincial 16. Fue una gestión de Vialidad Provincial con el Gobierno de Misiones para corroborar el comportamiento de los vehículos, y todavía no están las concluisiones. También es importante que se va a habilitar para bitren el tramo Zárate-Virasoro. El otro gran desafío es la puesta en valor de la Hidrovía. Para eso, hay que hacer inversiones en puertos. Argentina tiene casi nulos los puertos en la Hidrovía. Hay que trabajar en la ley de Cabotaje para que sea viable transportar los productos madereros por el río. Para la Patagonia se tendrá que utilizar el bitren. Lo ideal sería el ferrocarril pero por ahora no hay planes al respecto. En cuanto al NOA, se está pensando en la puesta en valor del Ferrocarril Belgrano Cargas.
El Gobierno tiene como objetivo la diversificación de la matriz energética. Con la biomasa forestal el sector tiene una oportunidad. ¿Cómo se piensa impulsar su desarrollo?
-La generación de energía a partir de biomasa forestal se está despertando de a poco. A diferencia del Renovar 1, en el Renovar 2 hubieron varios proyectos. Siempre hubo muchas trabas, el precio garantizado por el Gobierno, la forma de conectarse a la red para transportar, fueron más los obstáculos que los incentivos. Pero eso se está revirtiendo. Me parece que las empresas que hoy están en el sector necesitan ver que los proyectos que salieron licitados se empiezan a construir. En ese sentido, el rol del Estado es garantizar esos contratos, que son a largo plazo contra la inversión que hace el empresario. También la dendroenergía, que es algo poco conocido en nuestro país. Con productos forestales también podemos ayudar a abastecer el cambio de la matriz energética. Claro que esto también va de la mano del transporte, porque movilizar productos como pellets o chips secos requiere de un costo logístico competitivo. Si se pudieran transformar las usinas lácteas o aceiteras (ya son pocas las que están utilizando leña nativa), y otras que utilizan gas o fuel oil, para ser alimentadas con productos forestales sería espectacular. En esto el país tiene mucho que crecer, no solo en cuanto a los productos forestales sino también en la oferta de maquinaria. No hay mucha tradición para la quema de productos de madera, pero aquí hay buenas empresas que fabrican calderas y quemadores y también está la posibilidad de importar. Y otro aspecto fundamental es la difusión para que la gente comprenda las ventajas de usar este tipo de energías limpias.
En muchas ocasiones se ve que Gobierno intenta bajar la carga fiscal de las empresas en función del aumento de la productividad y la creación de empleo y choca con la resistencia de las provincias.
-No siempre va a estar todo alineado. Esto es negociar, y el Estado Nacional, como autoridad, tendrá que ir dando y pidiendo cosas a las provincias para conseguir beneficios para el sector. De ahí deberá surgir algo que sea beneficioso para todos. Es un esfuerzo que tienen que hacer todas las partes. Hay que poner todas las cartas sobre la mesa con buenas intenciones y entre todos tratar de mejorar la competitividad. Porque si este sector se desarrolla y crece, va a significar más trabajo para todos los argentinos.
El sector está esperando una señal clara sobre la continuidad del régimen de promoción forestal. ¿Qué va a pasar con la Ley?

-En todos estos años, el tema más hablado en el sector fue la Ley 25.080. Todos los temas que hoy se están tratando eran impensados. Creo que el mensaje va a tener que salir de la Mesa Forestoindustrial con un acuerdo de todas las partes. No se puede dejar de lado que el Estado está con recursos escasos, pero eso no significa que tenga que desfinanciar la Ley. Habrá que analizar bien el impacto que tiene la Ley sobre la forestación de manera que el Estado sostenga el financiamiento. No quiero adelantar nada al respecto porque sería irresponsable de mi parte. Además vengo con el impulso del sector privado y hoy me toca ocupar un cargo en la función pública que en cierto modo implica la defensa de los intereses del Estado. Hoy el mayor desafío es industrializar el patrimonio forestal que ya tenemos.
-¿Cuándo debería enviarse la Ley al Congreso?

-Se irá viendo en la Mesa y seguramente será el Presidente Macri quién evalúe el mejor momento para enviarla.

Compartí esta noticia !

Categorías

Solverwp- WordPress Theme and Plugin