A fines del 2024 y principios del 2025 desde el Ministro de Ecología de la provincia realizaron una denuncia por la tala ilegal de árboles nativos en el Parque Nacional Piñalito, una reserva de aproximadamente 3000 hectáreas ubicada en San Pedro. La intervención se produjo tras una inspección de rutina a realizar por la Dirección de Control Forestal.
Durante el procedimiento se dictó el ingreso no autorizado y el uso de maquinaria pesada para la extracción de ejemplares de gran porte. Por lo que el dueño del aserradero donde era destinado los árboles, fue detenido y se investiga su entorno.
En las últimas horas la Justicia de San Pedro, a cargo del Juez Ariel Palomar y el fiscal Francisco Insfrán, rechazaron nuevamente un pedido de excarcelación del detenido. La imputación al sospechoso, además de que la tala de árbol en una reserva natural protegida se considera un hecho grave, es por encubrimiento por receptación proveniente de un delito.
En esta línea dos hombres identificados que trabajan para esta persona se encuentran prófugos de la Justicia, motivos que llevó al Juez a rechazar el pedido de excarcelación. Posterior a la respuesta negativa, el sospechoso de 31 años, con prisión preventiva será trasladado desde una dependencia policial a la unidad penitenciaria correspondiente.
Según el informe oficial, los responsables del delito abrieron un camino dentro del área protegida y cortaron los árboles hasta 15 metros de altura. Dejando rastros que indican que usaron una motoarrastradora forestal para la actividad. Considerando la gravedad del hecho se radicará una denuncia penal y se iniciará un expediente administrativo por violación a las leyes de Áreas Naturales Protegidas y de Bosques.
Conjuntamente se inició un sumario interno para determinar posibles responsabilidades del personal encargado del cuidado del parque. Frente a esto los guardaparques expresaron que no cuentan con personal ni con herramientas necesarias para cubrir todas las áreas a cuidar.
En el lugar del hecho, la policía en conjunto con el Ministerio de Ecología, secuestraron máquinas, como un tractor marca Caterpillar modelo CAT 518 que habían ocultado entre la maleza, con el cual realizaban la apertura de camiones.
La biodiversidad es una herramienta clave para el desarrollo ambiental y socio-productivo, especialmente en contextos locales donde los ecosistemas desempeñan un papel crucial, ya que forman parte del paisaje productivo y en general del ambiente en el que las comunidades desarrollan sus actividades. Este documento analiza la relevancia de la biodiversidad en el Campo Anexo Manuel Belgrano (CAMB) y la Reserva Natural Estricta San Antonio (RNESA), en la provincia de Misiones, Argentina. Se aborda la importancia de conservar especies clave como Araucaria angustifolia e Ilex paraguariensis y especies frutales nativas indagando sobre el impacto de estas iniciativas en el desarrollo de las comunidades locales.
Importancia de la Biodiversidad en la Región
La biodiversidad sustenta el bienestar humano y el desarrollo sostenible al proporcionar alimentos, agua, materias primas y regulación climática. En la región de Misiones, la degradación de los ecosistemas ha alcanzado niveles críticos, afectando en forma directa la capacidad de los sistemas naturales para sostener actividades humanas. Esto subraya la necesidad de implementar estrategias integrales para la conservación y restauración de la biodiversidad, acciones estrechamente vinculadas al uso racional del suelo y a la disponibilidad de agua potable; redundando en la sostenibilidad de la actividad productiva de las chacras.
Conservación de Araucaria angustifolia. Contexto y Estado Actual. Resultados de Estudios Genéticos
El CAMB y la RNESA protegen el 0,5% del remanente del Bosque de Araucaria angustifolia, una especie críticamente amenazada. Históricamente, la explotación forestal y la fragmentación de los hábitats han reducido drásticamente su distribución y diversidad genética. A pesar de no contar con inventarios actualizados para araucaria, es posible notar una disminución de los individuos adultos por mortalidad natural. Si bien, es un proceso natural y la especie podría recuperarse en el futuro, el grado de fragmentación de la población remanente actual, a nivel regional, hace necesaria la intervención para mantener su presencia en el bosque. Sí se han avanzado los estudios relacionados a la diversidad genética de las plantaciones de A. angustifolia del CAMB. La diversidad genética en una población sea ésta animal o vegetal, favorece la adaptación a los cambios generados en el ambiente, ya sean estos de origen humano o de origen natural sin intervención humana. Por lo tanto, una alta diversidad genética es un rasgo esperado para el desarrollo de las poblaciones animales y vegetales. Cuando hablamos de población nos referimos a un grupo de individuos (animales o vegetales) de la misma especie que habitan en un mismo espacio (hábitat) y con continuidad en el tiempo y se reproducen entre sí, es decir, es un grupo de organismos que viven en el mismo lugar a lo largo del tiempo. Estudios recientes muestran que las plantaciones de Araucaria angustifolia en el CAMB poseen una mayor diversidad genética en comparación con poblaciones nativas, lo que, como proveedor de semillas, refuerza su potencial como recurso para programas de conservación ex situ, es decir, fuera de su zona natural de conservación. Actualmente, la conservación de A. angustifolia se lleva a cabo en unas pocas y, a menudo, pequeñas áreas protegidas en Brasil y Argentina. El pino Paraná (uno de los nombres comunes de la A. angustifolia) está en mayor riesgo en Argentina debido a su difícil regeneración natural, el polen se dispersa a distancias cortas, y el aumento de la temperatura media reduce su viabilidad. El incremento de la temperatura forma parte del cambio climático pronosticado para la región. Además, la regeneración de la especie depende de la apertura de grandes claros, que no sean perturbados por la actividad humana o por otras especies vegetales de crecimiento más rápido, como por ejemplo las cañas. Sin embargo, los remanentes de A. angustifolia en Argentina aún pueden ser salvados, ya que cuentan con protección legal. La Reserva Forestal de CAMB está bajo manejo sostenible y conservación según la Ley de Bosques N.º 26.331, sumado al material de A. angustifolia presente en la RNESA (Decreto Presidencial N° 2.149/1990). La plantación del CAMB representa un valioso acervo genético para programas de conservación ex situ y mejoramiento a través de la producción de semillas. Mientras que las poblaciones nativas con menos grupos genéticos que la plantación podrían aportar nuevo material para mejorar su acervo genético actual.
Respecto a fauna, el CAMB alberga a Amazonia vinacea, el loro de pecho vinoso especie protegida por ley XVI-127, considerado uno de los monumentos naturales de la Provincia de Misiones por su población decreciente estimada en no más de 260 individuos. Amazona vinacea permanece en relictos de Araucaria angustifolia, siendo su distribución coincidente.
El último monitoreo con cámaras trampa de la RNESA, puso en evidencia la presencia de especies de vertebrados de valor especial (EVVE). Las EVVE constituyen parte de los valores de conservación que se protegen debido a diversas características, relevadas minuciosamente por el personal, como pueden ser su grado vulnerabilidad, en cuanto al riesgo o peligro de extinción, su endemicidad, entre otras.
Recomendaciones
Fortalecer la conectividad entre fragmentos mediante corredores biológicos.
Promover la regeneración natural mediante el manejo sostenible.
Ampliar las áreas protegidas para preservar el acervo genético y la diversidad adaptativa.
Conservación de Ilex paraguariensis. Importancia y Situación Actual. Resultados de estudios genéticos preliminares
La yerba mate (Ilex paraguariensis) constituye un recurso estratégico tanto por su relevancia cultural como por su potencial económico. Estudios realizados en el CAMB revelaron una diversidad genética moderada, clave para su conservación y mejoramiento.
Como resultado del inventario del bosque nativo realizado en el CAMB en el año 2019, se verificó la existencia de una importante población de Ilex paraguariensis nativas acompañando a A. angustifolia. En el caso de la yerba mate, la población existente permite disponer de una base importante para la conservación de genes y la realización de estudios de dinámica poblacional y productividad de yerbales naturales bajo monte.
Los estudios genéticos de la yerba mate son cruciales para la sostenibilidad futura y el avance de la producción de yerba mate. Los rasgos genéticos de los ejemplares que se encuentran en el bosque constituyen recursos genéticos inexplorados que encierran adaptaciones locales valiosas.
Propuestas de Conservación
Implementar sistemas agroforestales que incluyan yerba mate arborizada para mitigar el cambio climático.
Caracterizar genómicamente las poblaciones silvestres para identificar variantes únicas.
Fomentar la incorporación de nuevo material genético de origen local a su cultivo a escala industrial.
Frutales nativos. Contexto y Estado Actual de conservación. Avances de estudios realizados en el CAMB (INTA)
En cuanto a otras especies de importancia, más allá de las de valor maderable, para el año 2018 se publicaron resultados acerca de las especies frutales presentes en el bosque nativo (CAMB). Estos estudios acompañan la tendencia creciente del mercado de los productos llamados “naturales” y ponen en evidencia la necesidad de desarrollar estructuras productivas y comerciales de los mismos, haciendo hincapié en un manejo sustentable y en los beneficios que pueden reportar a las comunidades. A fin de poder conservar el recurso disponible es necesario conocerlo, evaluar los desafíos de fomentar la producción y el aprovechamiento de los frutales. Si bien, son muchas las especies frutales presentes en la Selva Paranaense, este recurso no está debidamente cuantificado, se desconoce mucho de la biología de estas especies.
La diversidad florística del remanente de bosque nativo bajo estudio (CAMB INTA) resultó similar a otros bosques de zonas subtropicales. La cantidad de árboles de las diferentes especies frutales nativas hace necesaria una correcta evaluación al momento de planificar emprendimientos agroalimentarios en base a una explotación del monte nativo o en la generación en sistemas agroforestales propiciando la diversificación productiva de los actores locales.
Impacto Socioeconómico. Desarrollo de Comunidades Locales
El CAMB y la RNESA han contribuido significativamente y en forma directa al desarrollo local mediante:
Provisión de agua de calidad: Programas de extensión implementaron sistemas de bombeo sostenibles para garantizar el acceso al agua potable a más de 70 familias de San Antonio. Ante las sucesivas sequías de las últimas dos décadas, ha quedado resaltado el gran valor de las fuentes de agua de superficie para asegurar el abastecimiento de agua para las poblaciones locales y sus actividades productivas (población urbana, huertas y animales de granja y ganado), incluso de mejor calidad que las aguas de pozos perforados de 60 – 200m de profundidad. En tal sentido, se implementó un programa de extensión con apoyo activo de empresas y ONG’s, que han convertido al CAMB en un referente para la constitución de fuentes protegidas y de sus sistemas de bombeo asociados. El agua utilizada en las chacras proviene de las precipitaciones, aguas subterráneas (pozos excavados o perforados), arroyos y vertientes. Cerca del 80% de las familias rurales suple el consumo familiar de agua a partir de las vertientes que poseen en sus predios. Los ojos de agua, comúnmente conocidos en la zona como vertientes, son formaciones naturales que perduran en el tiempo gracias a los depósitos hídricos que hay en el subsuelo por infiltración del agua de lluvia, la que se acumula subterráneamente (acuífero). Para su perpetuidad es necesario mantener las áreas de preservación permanente establecida por Ley XVI N° 136 de Bosques protectores. Entra así en juego la diversidad genética de especies nativas del CAMB y la RNESA. El bosque nativo del CAMB está registrado ante INASE como un área productora de semillas nativas. El acceso al agua de calidad es indispensable para una vida rural digna.
Fotos: Sara Barth-Javier Waller.
Diversificación productiva: Se promueve el uso de frutales nativos y sistemas agroforestales para aumentar la resiliencia y productividad de pequeños productores. Vinculado a la función de proveedor de semillas de especies nativas del CAMB, INTA lleva adelante un proceso de selección de semilleros de distintas especies. Es así como, tratándose de especies frutales nativas, trabaja en conjunto con la FCF – UNaM en un proyecto de rescate y conservación de tres especies de la Selva Paranaense, a saber: Plinia cauliflora o Myrciaria cauliflora (yabuticaba), Eugenia involucrata (cerella) y Eugenia uniflora (pitanga o ñangapirí). Dichas especies son empleadas por la población local utilizadas en la producción de vinagres y licores, presentan un bajo grado de domesticación y productividad por hectárea, y creciente vulnerabilidad por su estado de conservación. En un trabajo y colaborativo entre el Laboratorio de Propagación Vegetativa y Conservación de Recursos Fitogenéticos (LAPROVECO FCF-UNaM), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria INTA-EEA Montecarlo, y las cooperativas Nueva Esperanza (Paraje Gentile), Mujeres Soñadoras y vivero Reverdecer-Somos Red (Salto Encantado), se acordaron metodologías de selección, recolección y propagación vegetativa para la domesticación y conservación de germoplasma. A 2025 se está trabajando en la implantación de 3 áreas productoras de semillas de estas especies frutales, una en el INTA Campo Anexo Laharrague (CAL), una en la zona de 2 de Mayo – Salto Encantado (campo de productoras) y, de ser posible, una en el CAMB (INTA San Antonio). De esta manera se brinda a la comunidad apoyo indispensable para la diversificación productiva tomando en cuenta atender su necesidad de suministro de materia prima para sus microemprendimientos alimenticios y a la vez se conserva el germoplasma nativo de las especies nativas bajo estudio.
Rol de los Sistemas Agroforestales
Los sistemas agroforestales con yerba mate no solo mejoran el rendimiento productivo, sino que también contribuyen a la conservación de la biodiversidad al disminuir la presión sobre los bosques nativos. Desde INTA se brinda apoyo a productores yerbateros medianos y pequeños de la provincia de Misiones (agrupados o no en Cooperativas o Asociaciones), generando y transmitiendo conocimiento sobre arborizado de yerbales en base principalmente a especies nativas de la Selva Paranaense. Estos sistemas agroforestales son inicialmente apoyados con provisión de plantines nativos, siendo los mismos principalmente provenientes de semillas recolectadas en el CAMB (INTA) y viverizados en el CAL (Laharrague) al igual que 10.000 de las plantas a instalar en las mencionadas áreas productoras de semilla. Los sistemas agroforestales (SAF) con yerba mate pueden de distintas maneras colaborar en mitigar el efecto del cambio climático al disminuir la presión sobre los bosques, amortiguar las temperaturas extremas y proteger al cultivo de yerba mate de condiciones ambientales extremas que se dan en forma frecuente debido a la variabilidad del tiempo que se viene dando en los últimos tiempos en la Provincia de Misiones. La yerba mate arborizada, comparada con su monocultivo, representa también un beneficio para la retención del agua caída, tanto en las copas de los árboles como en el suelo. Asimismo, mejora notablemente las condiciones de la tarefa, ya que se realizan bajo sombra.
La importancia del apoyo brindado a los productores de la provincia de Misiones radica en la característica de sus explotaciones agropecuarias. Conviven productores de más de 100 hectáreas con otros de 25 hectáreas como superficie media de plantación (con distintos cultivos) y pequeños agricultores de 5 a 10 hectáreas o productores de la agricultura familiar con 1 a 2 hectáreas de yerba mate sumadas a otros cultivos. El nivel socioeconómico de las distintas familias y emprendimientos agrícola-yerbateros da lugar a un sinnúmero de diferentes sistemas productivos. Según el Censo Nacional Agropecuario 2018, ese universo está compuesto por 23.113 explotaciones agropecuarias (EAP) de distinta envergadura, entre ellas, 1927 EAP´s correspondientes al Departamento Manuel Belgrano al que pertenecen el CAMB y la RNESA. Según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), en enero de 2023, se encontraban registrados un total de 12.518 productores en la provincia de Misiones (13.123 en todo el país). El que un 96% los predios de esos productores tengan plantada una superficie igual o inferior a 10 hectáreas remarca la importancia del acompañamiento del INTA, Universidades como la UNaM y demás estamentos del gobierno nacional, provincial y municipal. La necesidad de trabajar en el aumento de la productividad de esas propiedades remarca la de potenciar la promoción de sistemas agroforestales, que, además, principalmente en explotaciones de pequeña escala, pueden brindar renta adicional dada la diversificación productiva que trae aparejado el sistema. Esto no es menor si se toma en cuenta que en años recientes el estrés hídrico sufrido por el cultivo de la yerba mate dio lugar a la pérdida de hasta un 30 a 40 % de la producción de hoja verde por hectárea, variando la gravedad de ello según la zona considerada. En estas situaciones, los yerbales arborizados, presentaron un mejor desempeño, se encontraban mejor adaptados para afrontar los efectos de la escasez de precipitaciones. Al igual que en el caso de frutales nativos, estos sistemas acompañan la conservación de las especies nativas y su diversidad genética. El potencial de los sistemas agroforestales con yerba mate es notorio dado a que a 2024, datos INYM, existían 28.841,1 hectáreas bajo ese sistema de cultivo, con un incremento anual dado en los últimos años de un 15 % de dicha superficie.
Durante el año 2021y 2022, en las chacras vecinas a la RNESA, se realizaron numerosas capacitaciones a las familias, y se comenzó con la arborización de yerbales. Desde el proyecto abocado a ese sector clave para la protección del área protegida, se comenzó a elaborar el mapa del uso del suelo, lo cual tiene como objetivo indagar acerca de las prácticas agrícolas e intercambiar información, de manera de llevar adelante los principios del programa Una Salud. Este programa considera que la salud ambiental está estrechamente ligada a la salud de las personas, por lo tanto, brindar toda la capacitación necesaria para que las familias puedan tomar decisiones de manejo, en sus chacras, en beneficio tanto de su salud, como de sus ingresos económicos.
Consideraciones finales
La biodiversidad es un recurso esencial para el bienestar humano y el desarrollo sostenible. La experiencia del CAMB y la RNESA demuestra que es posible combinar la conservación ambiental con el desarrollo socioeconómico.
La biodiversidad atenúa el impacto de otras crisis, como el cambio climático y diversos conflictos en el desarrollo socioproductivo; representa así riqueza para las naciones y las comunidades pobres dentro de los países, ya que genera empleos y producto interno bruto (PIB). Este hecho es de particular importancia ante la diversidad de la estructura productiva de países como Argentina, dada sus distintas producciones regionales. La biodiversidad sustenta la prosperidad económica del país. Datos internacionales mencionan que más de la mitad del PBI mundial, el equivalente a aproximadamente US$ 44 billones, es moderada o altamente dependiente de la naturaleza.
Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA, 2021), cada dólar invertido en la restauración de los ecosistemas genera hasta 30 dólares en beneficios económicos, por ejemplo, mediante el uso sustentable del suelo en tierras agrícolas o bosques previamente degradados. Además, la restauración de los ecosistemas productivos es esencial para sustentar la seguridad y soberanía alimentarias. La sola restauración a través de los sistemas agroforestales tiene a nivel mundial el potencial de proteger la seguridad alimentaria de 1.300 millones de personas.
En los temas de biodiversidad, medio ambiente, cambio climático y desarrollo sostenible se requieren políticas integradas y que ofrezcan beneficios colaterales, a fin de que puedan apoyar múltiples objetivos y evitar que se presenten consecuencias negativas en un área mientras se está atendiendo otra (IPBES-IPCC 2021). Este enfoque es la base del principio básico de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), según el cual el desarrollo no se produce en forma aislada. El éxito de la aplicación de los ODS relativos a la biodiversidad (#14 Vida bajo el agua y #15 Vida en la tierra) requiere que los gobiernos adopten un enfoque integrado en la formulación de políticas y comprendan las interrelaciones entre la biodiversidad y los ODS.
Sólo recientemente se ha reconocido que la crisis de la biodiversidad está a la par con la crisis climática. La biodiversidad tiene una dimensión de alcance global que influye en todos los ámbitos de nuestra vida. Nuestras economías, medios de sustento, seguridad y soberanía alimentarias, salud y calidad de vida en todo el mundo están en riesgo debido a que estamos explotando la naturaleza con más rapidez de lo que ésta puede reponerse. Si no abordamos el desafío de la biodiversidad de forma integral estaremos poniendo en peligro la base de nuestras vidas.
Investigadores: Martín Alcides Pinazo, Sara Regina Barth, María Virginia Inza, Natalia Cristina Aguirre, Susana Leonor Torales, Norberto Manuel Pahr, Hugo Enrique Fassola, Luis Fernando Fornes, Noga Zelener, Yias Paloma, Schoffen Vanesa, Gauchat María Elena, Gottlieb Alexandra, Niella Fernando y Rocha Patricia. Si bien el tema ecofisiología no fue incorporada al presente artículo, en el CAMB trabajaron en ello Luis Ritter, Graciano Corina, Moretti Ana paula, Vera Bahima José; Olguin Flavia y Gortari Fermin, entre otros investigadores que nos acompañan en las distintas temáticas.
En forma especial se contó con la colaboración de PN, en los últimos tiempos representado por el apoyo brindado por Verónica Bernava.
Por INTA Montecarlo acompañan además el responsable del Campo Anexo Manuel Belgrano (INTA), Jorge Costa y personal de apoyo técnico de campo: Javier Waller, Otto Eduardo Knebel, Ramón Alcaraz y Juan María Rodríguez.
En un mundo en constante cambio, donde tanto los consumos culturales y turísticos como las dinámicas económicas y sociales impactan en cada rincón del planeta, Misiones se sostiene firme en el desafío de ser elegida por sus bondades, su vínculo con la naturaleza, su innovación y su hospitalidad. Ser un destino de preferencia por sobre la conveniencia es el camino para la sostenibilidad turística.
Este año que cierra nos invita a reflexionar sobre las acciones concretas que nos consolidan como un modelo turístico sostenible, sustentable y de calidad, dejando claro que nuestra oferta trasciende cifras, coyunturas políticas y fluctuaciones económicas.
El 2024 confirmó nuevamente que el turismo en Misiones es una prioridad en la agenda pública. Tenemos conexión aérea con Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Salta y Tucumán, y un total de 124 vuelos semanales entre el aeropuerto de Posadas y el de Iguazú. Recibimos a 1.450.000 visitantes y se registraron cerca de cinco millones de pernoctes. Destinos clásicos como el Parque Nacional Iguazú contabilizaron 1.215.000 ingresos hasta noviembre, consolidándose como el principal atractivo internacional de la provincia.
Las políticas implementadas sostuvieron el crecimiento de la actividad, incluso frente a un contexto político-económico complejo a nivel nacional, con una caída promedio en el movimiento turístico.
Sin embargo, Misiones logró mantenerse por encima de la media nacional, destacándose como un modelo de resiliencia y adaptación. La colaboración entre los sectores público y privado fue clave: más de 30 mil familias dependen directamente del turismo.
Misiones apostó a un enfoque que privilegia la sostenibilidad como un eje central en sus políticas públicas. Durante el 2024, fortalecimos estrategias que conectan al visitante con nuestra cultura, historia y naturaleza. Caminatas por senderos en plena selva, observación astronómica, avistaje de aves, degustación de platos típicos preparados por chefs y producción local… cada propuesta buscó dejar una huella en quienes nos visitan. Esta mirada integral del turismo es la que nos permite distinguirnos y seguir creciendo como un destino de referencia.
Nuestras diferentes iniciativas protegen nuestros recursos naturales, y, además, nos posicionan como un punto donde la conexión con la naturaleza se convierte en una experiencia transformadora. Con el 52% de la biodiversidad del país, somos el pulmón verde. Quien nos visita, se lleva el deseo de volver y ese logro es nuestra principal conquista turística.
A su vez, la seguridad es un pilar fundamental para los viajeros, garantizando un entorno confiable para los diferentes planes que se pueden realizar en la provincia. No es un dato menor que los visitantes puedan sentirse seguros.
Es que el turismo de Misiones es reconocido por la calidez y profesionalismo de su gente. Asumimos un compromiso con la excelencia para que, incluso en un contexto económico desfavorable, nos sigan eligiendo. Teniendo en cuenta que, de cada diez turistas brasileños encuestados, seis son de ciudades lindantes a nuestra provincia en un radio de 400 kilómetros, vamos a intensificar ese mercado. Más allá de explorar otros, el turismo funciona por proximidad.
Por otro lado, las fiestas populares también jugaron un papel crucial este año. Se realizaron 50 eventos, y más de 500 encuentros deportivos, culturales y MICEque convocaron a 400 mil personas. Esta diversificación permite un movimiento turístico más equilibrado durante todo el año. Además, muchos de ellos fueron llevados adelante bajo el concepto de green meetings, es decir, respetando principios de sostenibilidad ambiental para minimizar el impacto negativo de las actividades en el medio ambiente.
En este sentido, contamos con una calculadora interactiva que invita a los turistas a medir la huella de carbono que deja su paso por la provincia con la intención de generar conciencia y realizar recomendaciones sobre cómo mitigar y compensar ese impacto.
En Misiones hay alojamientos con infraestructura sustentable, que recuperan agua de lluvia, que utilizan calefactores solares y cuentan con un diseño que aprovecha la luz natural. El proyecto de la Selva Iryapú, por ejemplo, promueve el desarrollo de emprendimientos turísticos-culturales medioambientales en un área resguardada especialmente para ese fin, para fomentar actividades económicas y respondiendo a las demandas crecientes de los visitantes de Puerto Iguazú y de la región. Y allí, en el complejo también conocido como “las 600 hectáreas”, se aloja el 40% del turismo internacional que visita la ciudad de las Cataratas.
Además, en el lote 1 de ese espacio, se está llevando adelante una obra privada que consiste en el Centro de Convenciones más grande del norte argentino, con una capacidad total para 10 mil personas y que significa una inversión de 30 millones de dólares, desde sus comienzos. Esta apuesta está pensada no sólo para captar mercado nacional, sino a toda la Triple Frontera. Tendrá una dimensión de unos quince mil metros cuadrados.
Las inversiones privadas, tan necesarias para potenciar el turismo, tienen en cuenta el buen uso y distribución del suelo de acuerdo a las condiciones ambientales, cuidado de los recursos naturales y respetando la biodiversidad.
De cara a 2025, el desafío es continuar profundizando este modelo que pone al turismo sustentable y responsable en el centro del mapa, tanto de los viajeros como de nuestra gestión. La consolidación de Misiones como un destino de preferencia requiere seguir fortaleciendo políticas de preservación ambiental, mejorando la infraestructura turística y promoviendo experiencias únicas que resalten nuestra identidad cultural.
El futuro del turismo también pasa por profundizar la articulación entre los sectores público y privado, promoviendo una sinergia que permita potenciar a todos los actores que forman parte de la cadena turística: hoteleros, gastronómicos, transportistas, emprendedores, artistas, productores… así se apunta a garantizar un crecimiento equilibrado y en equipo, como lo venimos haciendo.
Hoy más que nunca, defendemos que el verdadero éxito turístico no se mide solo en cifras, sino en los beneficios que ofrece a su gente, a su entorno y a los viajeros. Que el 2025 sea un año para seguir inspirando y creciendo juntos como una provincia que enorgullece, porque no somos un destino de paso; somos un destino para quedarse y volver. El turismo en Misiones será sostenible o no será.
Ingeniero Forestal y con un Ph.D en Plant Science de la Universidad de Lincoln en Nueva Zelanda, Pablo Peri se desempeña como coordinador del Programa Nacional Forestal del INTA. Desde una perspectiva nacional, Peri brinda una visión sobre el aporte de las tareas de investigación desarrollada en los campos experimentales como el de San Antonio en la provincia de Misiones. En este sentido, Peri destaca que “se viene realizando una significativa contribución en la introducción y mejoramiento genético de especies subtropicales de pino, eucaliptos y salicáceas, las cuales constituyen la base del desarrollo de la industria forestal”.
Actualmente, los huertos semilleros y bancos clonales del INTA en San Antonio constituyen la principal fuente de material de propagación mejorada (tanto en semillas o clones) para forestadores independientes o nuevos inversores que no cuentan con sus propios programas de mejoramiento. De esta manera, el proyecto de mejoramiento genético del INTA en materia forestal busca potenciar atributos de crecimiento, adaptabilidad y sanidad pero enfatizando además en aquellos aspectos relacionados a la calidad de la madera u otras industrias como la resina.
El coordinador del Programa Nacional Forestal remarca que el Campo San Antonio cumple un importante rol en términos de avizorar “escenarios de cambio climático que pueden afectar al sector agropecuario y forestal, lo cual determina que el sector I+D desarrolle por ejemplo genética forestal resistente al estrés térmico e hídrico (tanto en lo que refiere a déficit o exceso de agua) y que pueda estudiar el potencial impacto sobre plagas, por ejemplo”. La continuidad de estas investigaciones permite determinar escenarios de adaptación y mitigación al cambio climático para la producción forestal nacional.
“Tanto desde la trayectoria del Programa Nacional Forestal como desde el sector privado han reconocido a la silvicultura como un aporte sustancial al avance tecnológico vinculado con la producción primaria en lo que respecta a la existencia de material genéticamente mejorado, al manejo forestal sostenible, a la resiliencia al cambio climático y también a la disponibilidad de paquetes tecnológicos tendientes a aumentar la productividad y la calidad de la madera”, sostuvo Peri en relación a las tareas desarrolladas por INTA en el Campo Anexo Manuel Belgrano en San Antonio.
Continuidad y sostenibilidad de las investigaciones forestales
Peri remarca que es clave que el Campo Anexo Manuel Belgrano continúe bajo la órbita del INTA “porque el sector forestal requiere de mediciones con métodos en el largo plazo y replicables en el tiempo. Este es un campo ubicado estratégicamente en Misiones, con más de dos mil hectáreas que involucran manejo del bosque nativo de selva, plantaciones forestales como las de Araucaria angustifolia y área experimental con huertos semilleros de Araucaria angustifolia, Pinus elliottii, Pinus taeda, Pinus Caribaeas, pino híbrido, Grevillea robusta, Toona ciliata, entre otras especies. No hay muchos antecedentes y espacios así en el país”.
Peri considera de relevancia que “el trabajo de mejoramiento genético en la producción forestal de pino en Argentina está basada, entre muchos factores, en la genética, siendo de gran relevancia el aporte del Campo de San Antonio con sus huertos semilleros, sus programas de mejoramiento y la provisión de semillas de alta calidad que da estabilidad y calidad a la producción forestal del país, principalmente en lo refiere a pino, ya sea para madera sólida como para la industria de la resina que genera toda una serie de productos derivados”.
Por último, el especialista forestal remarcó que “nuestra producción de genética de alta calidad está dirigida directamente a una producción que mira a la industria y a los productores, un trabajo sostenido en el largo plazo reconocido y validado a partir de una articulación conjunta entre el Estado y el sector privado vinculado a la producción forestal”.
Sobre el Campo Anexo Manuel Belgrano
El Campo Anexo Manuel Belgrano (CAMB) es una unidad funcional dependiente del INTA Estación Experimental Agropecuaria de Montecarlo. Se encuentra ubicado en la localidad de San Antonio, siendo atravesado por la Ruta Nacional Nº 101. Su origen data del año 1948, cuando se crea la primera Reserva Forestal con el objeto de realizar trabajos de reforestación con Araucaria.
La administración del CAMB fue asumida por el INTA en el año 1992, a partir de la disolución del Instituto Forestal Nacional (IFONA). El predio abarca una superficie de 2.136 hectáreas, de las cuales, en 1990, 470 hectáreas pasaron a formar de la Reserva Natural Estricta dependiente de la Administración Nacional de Parques Nacionales (APN).
Más de 30 profesionales comprometidos con la conservación de la biodiversidad participaron los días 11 y 12 de diciembre en Península Andresito de una capacitación intensiva sobre coexistencia entre grandes felinos y animales de la chacra. La actividad, liderada por el equipo de Projeto Onças do Iguaçu y organizada en conjunto por Fundación Vida Silvestre Argentina, Aves Argentinas y Proyecto Yaguareté (CeIBA-CONICET), combinó teoría y práctica en un enfoque integral de trabajo.
Durante la primera jornada, los asistentes exploraron en profundidad la situación del yaguareté, una especie emblemática y esencial para el equilibrio de los ecosistemas. Los participantes aprendieron sobre las características de este felino, sus diferencias con el puma y los factores que inciden en los conflictos con actividades humanas. Un punto central fue la identificación de las situaciones que predisponen a la depredación en establecimientos agropecuarios, así como el desarrollo de herramientas para diferenciar huellas y daños causados por distintas especies. También se compartieron buenas prácticas en la cría de ganado bovino, ovino y caprino que mejoran el rendimiento productivo al tiempo que reducen conflictos con la fauna silvestre.
La segunda jornada se realizó en la Reserva Natural El Puente Verdede Aves Argentinas, donde los participantes pusieron en práctica lo aprendido mediante dinámicas de juegos de rol. Estas simulaciones permiten recrear escenarios reales de conflicto con fauna silvestre, analizando variables clave y proponiendo soluciones concretas para cada caso.
“Este curso cierra un año de grandes avances en esta estrategia de coexistencia con los grandes felinos en la Península Andresito y es un trabajo articulado entre diferentes instituciones en pos de la conservación del yaguareté y sus ambientes”, manifestó Rodrigo Fariña, coordinador de Proyecto Bosque Atlántico de Aves Argentinas.
El evento contó con el apoyo de los Ministerios de Ecología y del Agro y la Producción de Misiones, y reunió a expertos de diversas instituciones, como la Policía Ambiental, Parques Nacionales, guardaparques provinciales, representantes del INTA, Fundación Vida Silvestre Argentina, Proyecto Yaguareté, Aves Argentinas y Güirá Oga, entre otros.
Esta iniciativa representa un avance significativo hacia la convivencia armónica entre las comunidades humanas y la fauna silvestre en Península Andresito. Al fortalecer las capacidades de los actores locales, se busca promover prácticas sostenibles que minimicen los conflictos y aseguren la conservación del yaguareté y otros animales silvestres.