Vuelta a lo lúdico: La propuesta de dos amigas para una infancia sana y feliz
Ramé es el singular nombre del emprendimiento de dos jóvenes profesionales que crearon un espacio de enseñanza en pleno centro de la ciudad de Posadas, con propuestas y actividades que tienen como eje la recreación, socialización y a su vez potenciar el aprendizaje de niños con o sin discapacidad.
La recreación en niños y niñas es fundamental para lograr un desarrollo integral que refuerce las habilidades que el menor está adquiriendo. Promover espacios de distensión en las infancias ayuda a potenciar su autoconfianza, creatividad, motricidad, sus formas de relacionarse, entre otras
En ese sentido Aldana Brycki, profesora de Educación Especial, Especialista, Diplomada en Atención e Intervención Temprana y Araceli Aguirre, Profesora de Educación Especial con amplia experiencia en TEA, plasmaron un programa de talleres en el que sostienen que el juego, el amor y la diversión son los ejes de una infancia sana y feliz.
“Quizás en la rapidez de la actualidad, la tecnología y el día a día, nos olvidamos que los niños necesitan jugar y compartir entre pares. La propuesta en sí ofrece y consiste en talleres recreativos, organizados y pensados para cada niño en su singularidad”, sostuvo Brycki.
Detalló además que los talleres están categorizados en tres temáticas, arte y manualidades, expresión corporal, cocina y diversión. En los cuales trabajan transversalmente varios objetivos como, potenciar el lenguaje y la comunicación, trabajar y aumentar las habilidades sociales, generar situaciones que permitan mejorar o aprender las conductas adecuadas en contextos, fomentar actividades de la vida diaria y estimulación cognitiva, entre otros.
“Los primeros años de vida son cruciales en nuestros niños, por ello la importancia de adquirir nuevos conocimientos y experimentar a través de ellos, pero sin olvidar que son niños, que quieren aprender, divertirse y conocer el mundo que los rodea, y qué mejor que haciéndolo a través del juego y el compartir con sus pares, entendiendo que todos somos diferentes y por ende todos aprendemos y nos relacionamos de manera única, pero juntos”, señaló Aguirre.
Expresaron que no hay requisitos previos, que lo único que buscan como profesionales es que las familias que quieran formar parte de Ramé sean aquellas que quieran cuidar y respetar a las infancias. Actualmente los talleres están pensados para niños de entre 4 y 8 años, con la visión de ampliar el rango etario en un futuro no muy lejano, teniendo como objetivo el crecimiento.
En los talleres, los cuales están diseñados con entusiasmo, ingenio, mucho trabajo y amor los niños disfrutan de momentos importantes para su desarrollo, respetando el tiempo de cada uno.
“Esperamos poder crecer en nuestras propuestas, en los servicios brindados, en la población en general, sin olvidar la importancia de las infancias y sus necesidades/particularidades. Creemos en esta propuesta apuesta a la recreación y disfrute, de la mano del aprendizaje, un aprendizaje diverso para los niños. Como profesionales buscamos brindar un espacio dinámico pero organizado y con objetivos claros, acompañando las necesidades de los niños y de las familias”, expresaron.
Después de trabajar juntas en el año 2021, la relación profesional se transformó en una linda amistad, en las que ambas comparten visiones y experiencias laborales similares, razón por la que al compartir les surgieron varias interrogantes con respecto al sector donde se desempeñan, una de las preguntas más fuerte fue ¿hay espacios pensados para que las infancias interactúen, socialicen y compartan entre sí?.
Inquietud que las motivó a generar ese espacio necesario en un mundo cada vez más acelerado, al principio el proyecto estuvo pensado para talleres de verano pero por diferentes razones no se llegó a concretar, sin embargo no bajaron los brazos y al contrario redoblaron la apuesta y hace tan solo cuatro meses trabajan arduamente para ser ese cambio en el sistema de aprendizaje y desarrollo.
“En cuanto a la educación especial, no encontramos tantos espacios pensados para la recreación de niños con discapacidad, actualmente si hay grandes profesionales y variedad de terapias que permiten trabajar contenidos específicos y necesarios, pero en la cotidianidad quizás se pierden los espacios de interacción, socialización y diversión que son necesarios para las infancias”, dijo Aldana.
Conscientes de que apostar por algo propio en la actualidad requiere de mucho trabajo, preparación, estudio y tiempo, no se dejan abatir por los desafíos. “El mayor reto actualmente es el alcance y poder llegar a más familias junto a sus niños, que busquen espacios diversos, más aún en vacaciones, donde consideramos importante mantener ciertas rutinas o brindar actividades que permitan la interacción y diversión de los mismos”.
Aunque los talleres son relativamente nuevos, Aldana y Araceli enfrentan desafíos como el alcance y la financiación. En ese sentido y en consideración con el impacto socioeconómico en la población, el costo de los talleres se destina en su mayoría para los materiales y tiempo utilizado, haciéndolo accesible para las familias.
Ambas, trabajan en otros espacios con jóvenes y adultos con discapacidad severa, niños con y sin discapacidad, y clases de apoyo pedagógico particulares, por lo que actualmente la propuesta se sostiene a través de sus ingresos personales sumado a las cuotas de los talleres. “Podemos decir que es un proyecto muy a pulmón, donde reciclamos, buscamos, repensamos cada material utilizado. Son infinidades las actividades que se pueden realizar con un maple de huevos y pintura, pero si hay que pensar y planificar mucho en ello”.
Contar con un espacio propio significa ante todo compromiso, tiempo y responsabilidad, sin embargo su motivación es clara, “ver a los niños y familias felices después de cada taller es nuestro mayor agradecimiento. Por lo que queremos incrementar horarios, propuestas y destinatarios, siempre respetando las individualidades y potenciando las habilidades de cada sujeto”.
Ramé que en balinés expresa algo que es caótico y hermoso al mismo tiempo, propio de la vida en la infancia, una etapa de caos, movimiento, descubrimiento, diversidad, belleza y mucho amor, tiene como misión y visión crear y brindar oportunidades de momentos caóticamente hermosos de aprendizaje en todas las infancias.
Ubicados en 3 de febrero 2329, Ramé abre sus puertas martes y jueves de 17:30 a 20 horas. Para más información están en Instagram como @rame_talleres.
Teléfonos: 3765-390793 o 3764-329397