Desde la Asociación de Comerciantes de Misiones, afirmaron que desde hace más de un año se modificó el comportamiento del consumidor en los supermercados. Repuntan las marcas alternativas y las compras en los mayoristas.

Nelson Lukoski, asesor de la asociación que nuclea a los supermercados y comerciantes de la provincia, refirió la preocupación del sector por la preferencia de los consumidores hacia los mayoristas como alternativa a la inflación.

Detalló que desde el año pasado y con más fuerza desde febrero de este año, se viene modificando el comportamiento de los consumidores quienes, ya se vuelcan por segundas marcas o bien, hacen compras al por menor en los mayoristas.

“La elección por las primeras marcas, las marcas líderes cayó 40 por ciento, mientras que en las alternativas aumentó 20 por ciento”.

Lukoski precisó asimismo que, por la crisis, mucha gente dejó de adquirir productos de perfumería, limpieza y enlatados. “Ya no compra lavandina ropa color por ejemplo, compra lavandina común”.

Se quejó porque los supermercados mayoristas vienen ganando espacio no solo por los precios, sino por la modalidad de venta por unidad. “Es una vergüenza lo que pasa acá, ellos venden por unidad y no se puede competir, acá las asimetrías son internas, y estamos hablando de puestos de trabajo que se pierden. Ya cerraron dos distribuidoras por no poder competir. Es crítica la situación. En todo el 2016 alrededor de 400 personas se quedaron sin trabajo por la caída en las ventas. Para nosotros, los supermercados de 300, 500 metros cuadrados es difícil, estamos despidiendo gente”.

Finalmente, aseguró que es importante la caída en el consumo de carne vacuna. Por los altos precios, los consumidores optan por comprar pollo, cerdo o pescado. “En la semana casi no se compra carne vacuna, pero la gente no deja de comer asado el fin de semana”.

Como publicara este medio hace un tiempo, datos de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes, indicaban que en todo el 2016 el consumo de carne vacuna había caído 4,1% y se redujo a 57 kilos por persona, el nivel más bajo en los últimos cinco años.

Desde el Sindicato de la Carne de Misiones, precisaron que el comparativo anual exhibe una caída del 30 por ciento en el consumo de carne en toda la provincia.