Carlota Stockar es sinónimo de viajes y turismo en Misiones desde hace tres décadas y media. Esta empresaria fundó y conduce una de las firmas más tradicionales del rubro en Posadas y desde hace cuatro años también opera en Encarnación con una sucursal que crece día a día, de la mano de la explosión del turismo en Paraguay.

“Los costos de un paquete son los mismos en la Argentina y Paraguay, hoteles, parques de atracciones, pero la diferencia en el precio viene con los impuestos, tanto en los aéreos como en el IVA, los Ingresos Brutos o el costo laboral”, explicó Stockar, ante la pregunta de cuánto sale comprar un paquete para conocer un destino como Disney, si se adquiere de uno u otro lado del río Paraná.

Stockar participó hace unos días de la II Edición del Congreso Binacional de Marketing Turístico y dialogó con Economis en los salones del hotel Savoy, uno de los emblemas de las nuevas inversiones que recibió Encarnación en el sector turístico.

Al hablar con esta empresaria que hace casi 40 años desarrolla el turismo en Misiones, quedan en evidencia muchas materias pendientes que la Argentina debe aprobar para seguir creciendo en este rubro donde Paraguay, arrancando mucho más tarde y de mucho más atrás, parece estar aventajando a nuestro país.

Sus afirmaciones dejan lugar a la reflexión y, un poco, duelen porque dejan al descubierto las falencias de un país que lo tienen todo pero que por “h” o por “b” no puede terminar de desarrollarse a pleno.

Cuando tenía 14 años, Stockar –hija de un suizo y una francesa que se radicaron en Misiones- estuvo recorriendo por un año Europa, junto a sus padres y a su hermano. “Creo que ahí nació mi vocación por el turismo”, dice.

Esta empresaria y emprendedora inquieta, encontró relativamente rápido su vocación. “Estudié en Santa Fe, donde vivían mis abuelos, trabajé un tiempo en la firma Bullrich que era una corredora de ganado, y después en una aseguradora, la Franco Argentina, vendiendo seguros de cauciones”, cuenta.

Luego volvió a Posadas para ayudar al padre en la administración del campo familiar. “Pero la administración no era lo mío, entonces pensé en volcarme al turismo, que estaba empezando a crecer”, rememora. Al principio, trabajó para una firma paraguaya, Inter Express, que tenía una sucursal en Posadas.  Luego, con una amiga les compraron la sucursal a los paraguayos.

“Pero al tiempo decidí seguir sola, porque mi ritmo no era el de mi socia y me di cuenta que me cuesta tener un socio”, explicó. Fue el comienzo de Carlota Stockar, que hoy es sinónimo de viajes y turismo.

A continuación, reproducimos una parte del diálogo con esta emprendedora misionera que le pone mucha pasión a todo lo que hace.

-¿Qué tipo de productos venden en Carlota Stockar?

-En una época me dediqué al turismo receptivo, el cual tengo stand-by (parado) si bien tengo un producto registrado que es el Camino de los Jesuitas, que abarca Paraguay, Argentina y Brasil. Con esta ruta que se está trabajando fuertemente acá en Paraguay. La fuerza que le está poniendo la ministra de Turismo a toda esta ruta es destacable. Creo que nos está contagiando. Aprovecho para reiterar la importancia que tendría la solución del cruce del puente, no podemos supeditar al horario del tren, que lo tenemos ofrecido, para poder trabajar hasta las 18.

-¿El puente está frenando el turismo binacional?

-Exactamente, no el tren, que cumple con su horario de 6 de la mañana a 6 de la tarde, por cuestiones legales del tema de Aduana y otros organismos. Está dando un servicio impecable. El tema son los canales de cruce del puente porque entiendo, yo que voy y vengo mínimo dos veces por semana a Encarnación, es que si nosotros tuviéramos más casillas sería distinto. El cruce se bloquea por la cantidad de casillas habilitadas.

-¿Qué piensa del crecimiento turístico de Encarnación?

-Tengo una profunda admiración por el impresionante giro que hizo Paraguay en estos últimos años. Eso motivó que abriera mi oficina en Paraguay hace cuatro años, es admirable el cambio de mentalidad que hizo el Paraguay, de la manera como ellos se han compenetrado de la importancia del turismo y su giro hacia la atención al cliente, en vez de mirarlo con envidia los miro con admiración. Todo esto podemos estar emulándolo y trabajándolo en conjunto. Cuando hacés turismo en Europa no te das cuenta cuando pasás de un lado al otro de la frontera. El tránsito es libre y no hay un entorpecimiento entre una frontera y la otra. Eso tendría que existir acá, debería haber otro sistema de controles.

-¿Qué hacen en la oficina de Carlota Stockar de Encarnación?

-Hacemos turismo exportativo, vendemos todos los servicios, paquetes, etcétera a todo el mundo. Saliendo desde Asunción o desde Brasil (Foz de Iguazú). Porque nosotros tenemos una venta muy importante por Brasil. Depende hacia dónde vas. Si vas a América es más baja (la tarifa) saliendo desde Asunción. Si querés ir a Europa u Oriente, normalmente la tarifa es mejor saliendo desde Foz, siempre con escala en San Pablo.

-¿El cliente paraguayo qué tipo de destinos demanda?

-Es amante del Caribe y toda la zona de la Florida, ese es el destino número uno. Pero también se está empezando a inclinar por Europa y ahora están apareciendo los destinos exóticos como Medio y Extremo Oriente.

-¿Qué diferencia de precios tiene un paquete similar, vendido en Posadas o Encarnación?

-Tienen el mismo precio desde el punto de vista del costo del paquete en sí, porque los servicios son los mismos, y si tomás los mimos aéreos, saliendo de Asunción o Foz es lo mismo. Varía en los impuestos, porque tenemos una gran diferencia cuando vemos los impuestos saliendo de Buenos Aires, contra impuestos aéreos saliendo desde Asunción. Cuando compartimos la misma salida, tenemos una carta impositiva donde tenemos el 21 por ciento en contra del 10 de IVA, el 3,5 de Ingresos Brutos, más el 1,2% del gasto bancario. Acá (en Encarnación) solo tenés el 10 por ciento de IVA. El costo bancario del 0,025% y terminó la historia.

-¿Hay incidencia en el costo laboral también?

-Sí, totalmente, te diría que es uno a tres. Entonces, no solamente es lo que establece la ley acá. Te establece un sueldo de 5000 pesos, cosa que nosotros pagamos más. En Argentina arrancás de 15 o 18.000 pesos para arriba, ese costo laboral también es considerablemente importante.

-¿Qué destino le gusta al posadeño?

-Tiene el tema del Caribe, está más osado con otros destinos, con incursionar a Extremo Oriente, Tailandia que está de moda. Vamos a incursionar con Japón, que se está lanzando agresivamente.

-¿Qué hay que hacer para que las agencias de Posadas empiecen a trabajar con el turismo receptivo?

-Tenés dos opciones. Primero que el misionero que decide ir a Moconá o Iguazú va por sus medios. Siempre tiene un amigo o un familiar, conoce la zona. Así es que es muy difícil que un misionero contrate una agencia, a menos que sea una cuenta corporativa que pide servicios. Donde tenemos nuestro nudo gordiano que a mí me interesaría desarrollar en la región, es el circuito de los 30 pueblos jesuitas. Si mirás mi página www.elcaminodelosjesuitas.com lo tengo certificado con normas ISO por una consultora inglesa, miembro de UCAS (organización mundial que nuclea a las consultoras habilitadas para estas certificaciones). Pero estoy frenando mi actividad por el problema del puente. Estoy empezando a pensar en arrancar pero con algo integrado, tengo armado un producto que va de un día a 12 contemplando el circuito, haciendo los siete patrimonios de la humanidad, le agregás Esteros del Iberá, Moconá, y tenés una panorámica de la región. Tengo mercado para esto porque estoy dentro del grupo GEA de España por productos exportativos. Siempre me preguntan: “Cuánto lo vas a largar”.

-¿Usted lo arma y quién lo vende en el exterior?

-Una agencia, yo sería el proveedor local y estaría la agencia en Buenos Aires o en el exterior y que lo vende y nos solicita el servicio a nosotros. El rol de la agencia es organizador y contrata los servicios, es lo mismo que cuando compro un producto en Europa, que lo compro a uno operador que se encarga. Tenemos profesionales perfectamente capacitados para hacerlo. Pero todo esto lo corté en 2008 o 2009, cuando tuve una mala experiencia con el puente.

-¿Cómo fue?

-Tenía un contingente de 75 alemanes que venían de la empresa Bayer, hice todas las carpetas para que pasaran rápido por Migraciones. A las 7 de la tarde el vuelo venía demorado, aviso en el puente que en vez de pasar a las 9 iban a pasar 10.30 pm. Pero cuando llego la gente de Migraciones no le avisó, había un chico que no sabía ni discar y me demoró tres horas el cruce. Volvió a cargar los 96 pasajeros, nombre DNI, fecha de nacimiento. La gente venía desde temprano de Alemania, tuvo reuniones en Buenos Aires, estaban cansados. Al otro día arrancaban temprano con visitas a chacras vinculadas a Bayer. Dije, nunca más. Es la última operación que yo hago, no puedo salir con este servicio.

Martín Boerr

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