Con su exitosa f贸rmula de patadas y nostalgia, vuelve “Cobra Kai”
La quinta temporada de 鈥淐obra Kai鈥, la serie que retoma m谩s de tres d茅cadas despu茅s a los personajes de la trilog铆a de 鈥淜arate Kid鈥, regresa ma帽ana a Netflix con una quinta temporada que promete volver a sacarle provecho a la combinaci贸n de peleas de artes marciales, nostalgia 鈥渙chentosa鈥 y un tono algo rid铆culo que no deber铆a, pero funciona.
Un magnate villano que quiere imponer su cosmovisi贸n a nivel global por medio de sus escuelas de karate, un grupo de cincuentones que resuelven cada conflicto a los golpes y adolescentes que sufren instant谩neos lavados de cerebro al exponerse a la filosof铆a de artes marciales equivocada podr铆an ser los componentes de una parodia.
Sin embargo, en el contrato propuesto al p煤blico por los creadores Josh Heald, Jon Hurwitz y Hayden Schlossberg, siempre condimentado con una buena dosis de evocaciones a la recordada saga cinematogr谩fica de los 80, la historia de Daniel LaRusso (Ralph Macchio) y los suyos aparece como una amena experiencia escapista.
La trama revive y multiplica la de los filmes, en la que el karate y la disciplina deportiva son la arena en la que los j贸venes se forman y toman herramientas para el adulto en el que se convertir谩n.
Si el sensei es 茅tico y bienintencionado, como lo era el Sr. Miyagi de Pat Morita en los 80 o su propio aprendiz hoy devenido maestro en la serie actual, el o la joven explotar谩 sus virtudes. Por el contrario, si las ense帽anzas difunden la falta de compasi贸n y la bravuconada, el alumno tender谩 a ejercer el bullying.
Adem谩s de reeditar la din谩mica de amor-odio entre un Daniel LaRusso entrado en a帽os y su oponente de aquella cinta, Johnny Lawrence (William Zabka), la serie trajo toda una nueva generaci贸n de chicos y chicas que encuentran en las artes marciales un modo de expresi贸n.
La quinta temporada encuentra el relato planteado en dos subtramas principales, la de los adultos y la de los j贸venes. La primera, con el regreso de Macchio, Zabka y muchos otros personajes de las pel铆culas de los ochenta, opera como 鈥渇an service鈥 para las audiencias m谩s grandes, que pueden volver a ver en pantalla a esos personajes, si bien con bastantes m谩s arrugas.
All铆 aparece John Kreese (Martin Kove), el malvado fundador de Cobra Kai y jurado enemigo de Daniel; Chozen (Yuji Okumoto), antiguo rival de Okinawa y ahora aliado-alivio c贸mico del personaje de Macchio, y Mike Barnes (Sean Kanan), un duro peleador que regresa tras participar de 鈥淜arate Kid III: El desaf铆o final鈥 (1989).
Entre los viejos conocidos tambi茅n se cuenta al gran villano de esta temporada, el millonario Terry Silver (Thomas Ian Griffith), que volvi贸 a la saga tras su 煤nica aparici贸n en la tercera pel铆cula para desplazar a Kreese con un maquiav茅lico plan que consiste en abrir dojos de Cobra Kai por todo el mundo y as铆 infectar a la juventud con su modo de pensar -鈥淧egar primero, sin piedad鈥-.
Los pupilos de ambas doctrinas, defender谩n en cada ocasi贸n sus ideales, casi como instrumentos aut贸matas, tanto en su vida cotidiana como en los torneos por puntos, pero siempre con compromiso.
Entre m谩s, se siguen las aventuras de Miguel D铆az (Xolo Maridue帽a), Robby Keene (Tanner Buchanan), Samantha LaRusso (Mary Mouser), Hawk, (Jacob Bertrand), Demetri (Gianni Decenzo), Tory (Peyton List) o Kenny (Dallas Dupree Young).
En 10 episodios de media hora, escasos para desarrollar con profundidad decenas de arcos argumentales individuales, todos los personajes, tengan la edad que tengan, coinciden en un punto: los problemas, que no faltan, se dirimen a las patadas.
All铆, entre m煤ltiples escenas de acci贸n bien coreografiadas y gente un poco pavota que se toma el karate acaso demasiado en serio, la temporada conducir谩 hacia un entretenido desenlace repleto de tensiones entre el bien y el mal.