
Deuda: Economía sale a renovar vencimientos y el mercado está expectante por las tasas
Este miércoles colocará cuatro títulos. Vencen cerca de $2 billones. Tras el dato de inflación de diciembre y el anuncio de la baja del ritmo de devaluación,
El equipo de Luis Caputo encarará este miércoles la primera licitación de deuda en pesos del año. La operación se realizará en una semana marcada por la difusión del dato de inflación de diciembre y el anuncio del Banco Central sobre el recorte del ritmo de devaluación a la mitad a partir de febrero. Ante estos cambios en la tablita del dólar oficial, en las mesas de la city hay expectativa sobre la evolución de las tasas de interés y entienden que la curva de rendimientos de los títulos en moneda local podría volver a comprimirse.
Enero es un mes de importantes vencimientos de deuda en pesos. De acuerdo con datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), éstos se acercan a los $14 billones. Mientras que, según estimaciones de la consultora 1816, totalizan $15,8 billones. De todas maneras, la mayor parte se concentra a fin de mes y será afrontado en una segunda licitación, programada para el miércoles 29.
En tanto, en la licitación de este miércoles, Economía enfrentará compromisos por cerca de $1,7 billones, un monto mucho más liviano sobre todo concentrado en una Lecap (letra capitalizable a tasa fija) que expira este viernes. Si se contabilizan los distintos pagos de Boncer (bonos atados a la inflación) que hubo desde la última licitación del año pasado, el monto a renovar se acerca a los $2 billones.
En busca de refinanciar esos pagos, la Secretaría de Finanzas, que conduce Pablo Quirno, decidió ofrecerles a los inversores un menú de cuatro instrumentos.
Se reabrirán dos Lecap: la S31L5, que expira en julio de este año, y la S31O5, que vencen en octubre de 2025. También dentro del segmento de tasa fija, se emitirá un nuevo Boncap (bono capitalizable) al 30 de junio de 2026, que pasará a ser el más largo de la curva. Por último, se reabrirá el Boncer TZXM7, que caduca en marzo de 2027.
La colocación se realizará este miércoles, entre las 10 y las 15, un día después de que el INDEC difundiera que la inflación de diciembre fue 2,7%, tres décimas por encima del IPC de noviembre. Luego de esa publicación, el BCRA confirmó que reduciría el ritmo del “crawling peg” del 2% mensual al 1% a partir del 1° de febrero.
En ese marco, las miradas en la city apuntan a dilucidar cómo se acomodarán el resto de las variables nominales ante el recorte a la mitad del ritmo de suba del dólar oficial que imprime la tablita cambiaria de Caputo. Sobre todo, qué ocurrirá con las tasas de interés.
Por un lado, porque buena parte de los analistas del mercado esperan que el Banco Central acompañe esa reducción del “crawling peg” con un recorte de la tasa de política monetaria, que es la que remunera las LEFI (las letras de liquidez emitidas por el Tesoro que el Central les vende y compra a los bancos). “Asumimos que, cuando bajen el ‘crawl’, también bajarán la tasa de política monetaria (TPM), aunque en una proporción considerablemente menor. El ritmo de ‘crawl’ bajará a la mitad, pero la tasa quizás baje 10% o 15%, es decir, entre 300 y 500 puntos básicos desde el 32% TNA actual de la tasa de LEFI”, sostuvo la consultora 1816.
Otros creen que el BCRA debería ser más cauteloso y tomar en consideración la caída estacional de la demanda de dinero que tendrá lugar durante las próximas semanas para evitar arriesgarse a una mayor presión sobre los dólares paralelos.
Por otro lado, hay expectativa por ver cómo reaccionarán los rendimientos de los instrumentos de deuda soberana, tanto en la licitación de este miércoles como en el mercado secundario ahora que se anunció oficialmente la nueva tablita cambiaria.
En ese sentido, el economista Federico Machado señaló que, con la baja del “crawling peg” al 1%, la tasa actual en pesos pasará de un rendimiento del 8,5% anual en dólares a oficiales al 22,2% anual. “Es esperable que el mercado se tire de cabeza y esa tasa comprima. Para volver al rendimiento del 8,5%, la TNA en pesos tendría que caer 12 puntos”, planteó.
Es que, además de apuntar a restarle inercia a la inflación, el menor ritmo de devaluación tiene también por objetivo incrementar el atractivo de las apuestas al “carry trade” (la estrategia conocida como la bicicleta financiera), que ofreció jugosas ganancias en dólares durante 2024 pero que aminoró en parte su incentivo en el último tiempo por la compresión de las tasas de interés en pesos.
Un informe de Portfolio Personal Inversiones (PPI) sostuvo que recortar el ‘crawling peg’ es “una maniobra estratégica tanto para profundizar la desinflación al influir en los bienes no regulados (ponderación de 64,3%) como para devolverle mayor atractivo al spread tasa-crawl, que es clave para que se sostenga el ‘carry trade’ de importadores y exportadores y eso redunde en compras de reservas del BCRA”.
Así, PPI coincidió en que hay margen para una reducción de los rendimientos en pesos: “Con las declaraciones de Milei (tras el dato de octubre) y Caputo (tras el dato de noviembre), el mercado empezó a pasarlo a precios vía una fuerte compresión de tasas, especialmente en el tramo largo de la curva a tasa fija. Esto llevó el spread con el crawl a casi cero en la parte larga de la curva. Una reducción del crawl ampliaría el spread con la tasa de alrededor de 0,6/0,7 puntos porcentuales TEM (tasa efectiva mensual) a 1,6/1,7 puntos porcentuales en el tramo corto de la curva y lo reestablecería a 1,1/1,2 en el tramo largo. Es por ello que vemos espacio para que haya un recorte de tasas”.