Ellas, la otra cara de la protesta yerbatera

Compartí esta noticia !

Por Julieta Martinez. El olor a leña quemada utilizada para resguardarse de estos días de bajas temperaturas y para cocinar durante el día y la noche o preparar un mate compartido en ronda, se siente a varias cuadras. Los productores yerbateros afianzan su protesta en Posadas y reciben la solidaridad de los vecinos que les acercan mercaderías, colchones y frazadas. Su estadía se prolonga porque la respuesta que esperan desde el Instituto Nacional de la Yerba Mate, aquel que fuera creado para resguardarlos por ley, no llega. Por momentos, hasta pareciera que los ningunea.

Mientras tanto, sobre el asfalto, en el rostro de la chacra misionera sobresale el de la mujer. Esa mujer que mientras presta atención a las discusiones, no pierde de vista a sus retoños, o aquella que se animó a dejar a sus hijos a resguardo de algún familiar, el mayor de los hermanos para acompañar la lucha por su tierra, su producto, aquello que trabajó durante años, sola, junto a su esposo, o a sus hijos.

Uno de esos rostros es el de Catalina Almirón, productora de San Pedro. De mirada fuerte, la sonrisa justa para demostrar amabilidad y las manos gastadas por la tarefa. Hizo varios kilómetros convencida de la lucha por precios justos para una vida digna. Catalina habló de su causa, y de la de muchas otras mujeres que trabajan la tierra y que pocas veces pueden hacer escuchar su voz.

Yo soy productora, tengo 60 años y me ocupo de mi chacra, yo la dirijo. En este caso no acompaño a ningún hombre, la chacra es mía, pongo el hombro en todo, desde agarrar un animal hasta tareferar la yerba, siempre fui así”, cuenta en una entrevista a Economis.

¿Cómo es compartir el tiempo entre el trabajo en la chacra y cuidar y criar a los hijos?

Es un trabajo fuerte el de la chacra pero también es fuerte criar a los hijos, realmente ahora esto nos preocupa porque la situación está difícil, los chicos no pueden ir a la escuela, los padres no tienen trabajo. Nosotros somos productores, pero hay una cadena que yo defiendo y entiendo porque sin ellos no hacemos nada, que son los tareferos. Familias humildes que están en los pueblos que no tienen un pedacito de tierra para plantar una mandioca. Nosotros tenemos tierra para trabajar. Yo tengo tres hijos, pero hay familias que tienen ocho, nueve chiquitos muy chiquitos, que quieren leche, que necesitan pañales, alimentos para crecer. Esa familia de tareferos es la que está sufriendo, a mí lo que más me duele no somos nosotros, como productores, sino que alguien nos ayude para que podamos ayudar a la familia de tareferos a que no pasen hambre. Ellos están pasando muy mal.

Te puede Interesar  El Merval subió 0,58% y las ADRs argentinas en Nueva York avanzaron más de 4%

¿En la chacra se valora el lugar que ocupa la mujer?

Nunca se valoró a la mujer. En mi caso, tengo 60 años, problemas de columna, y hoy por hoy ya debería estar recibiendo una pensión, pero nadie valora a la mujer que está para todo, desde que se levanta atendiendo a los chicos, a la gallina, el chanchito, ordeñando la vaca, terminás en el rozado, viniendo al mediodía a cocinar, descansar media hora sin bañarse, comer algo, muy poco para volver de nuevo a la chacra, así es la vida de la mujer.

Catalina tenía programada una operación de vesícula en Oberá para sacarse unas piedritas.

Llamó a cancelar el turno, porque “no pienso moverme de acá”

 

 Catalina considera válido que las mujeres acompañen a sus maridos, a su familia. “Yo no tengo marido pero vengo por mí y por mis hijos, somos una cadena, somos la base de cada pueblo. Sin nosotros, el pueblo no crece, sin nosotros las familias tareferas no comen, lo que hacemos va a parar a los comercios”.

¿Cree que algún día tendrá solución el problema de los yerbateros?

Confío en Dios. Esta difícil, pero estamos decididos a quedarnos y vamos a ir a buscar los tractores y cada vez vamos a ser más.

 

“Estoy muy agradecida con Posadas y pido que Dios multiplique lo que la gente nos da todos los días acá en la ciudad, recibimos leche, mercadería, colchones, frazadas, porque estamos durmiendo en la calle”

About The Author

Compartí esta noticia !

1 thought on “Ellas, la otra cara de la protesta yerbatera

Comments are closed.

Categorías

Solverwp- WordPress Theme and Plugin