Hackers chinos se infiltraron en USA y roban datos ultrasecretos del Tesoro
En medio de la guerra tecnológica entre USA y China, hackers del gigante asiático lograron vulnerar los sistemas del Departamento del Tesoro norteamericano.
China logró violar las defensas del Departamento del Tesoro estadounidense mediante un sofisticado ciberataque. Los hackers tuvieron acceso a documentos clasificados y estaciones de trabajo remotas. La Casa Blanca acusa directamente al gobierno chino. Máxima tensión con USA. ¿Pero cómo ocurrió?
Los investigadores creen que los hackers buscaban información, no robar dinero.
Una precisión temporal: la actividad sospechosa se detectó inicialmente el 2 de diciembre, pero BeyondTrust tardó tres días en confirmar que habían sido hackeados.
Una nueva crisis diplomática estalló entre Estados Unidos y China luego de que el Departamento del Tesoro norteamericano confirmara que sufrió un “importante incidente de ciberseguridad” a principios de diciembre. Los hackers, vinculados directamente con el gobierno chino, lograron acceder a documentos gubernamentales y a estaciones de trabajo remotas de empleados de la entidad.
Según TechCrunch, la brecha de seguridad se produjo cuando los piratas informáticos consiguieron una clave de acceso de BeyondTrust, empresa proveedora de servicios de soporte técnico remoto para el Tesoro. Esto permitió que los atacantes se infiltraran en los sistemas y obtuvieran información sensible, aunque no clasificada.
Los detalles técnicos del ataque revelaron que los hackers chinos ejecutaron una sofisticada intrusión en servicios en la nube, lo que les permitió eludir las barreras de seguridad del Tesoro estadounidense. La maniobra fue detectada por BeyondTrust, el proveedor de servicios técnicos, quien alertó al departamento gubernamental.
La guerra cibernética se intensifica
Este ataque no es un hecho aislado. En los últimos meses, grupos de hackers chinos como “Salt Tycoon” vienen apuntando contra objetivos estratégicos estadounidenses. Entre sus blancos figuran gigantes de las telecomunicaciones como AT&T y Verizon, desde donde intentaron acceder a comunicaciones privadas de altos funcionarios y candidatos presidenciales.
Michael Gwin, vocero del Tesoro, aseguró que la entidad “se toma muy en serio todas las amenazas” y reveló que en los últimos cuatro años reforzaron significativamente sus ciberdefensas. Por su parte, Liu Pengyu, portavoz de la Embajada china en Washington, negó todas las acusaciones: “Estados Unidos necesita dejar de usar la ciberseguridad para difamar a China y dejar de difundir desinformación sobre las supuestas amenazas de hackeo chinas“.
El Tesoro contrató a la agencia de ciberseguridad CISA para investigar el incidente. Hasta el momento aseguran que los atacantes ya no tienen acceso a sus sistemas, aunque el daño ya está hecho. Este nuevo capítulo en la Guerra Fría tecnológica entre ambas potencias promete escalar las tensiones diplomáticas a niveles preocupantes.
Según la BBC, El Tesoro se comprometió a entregar un informe complementario a los legisladores en 30 días.