El cónsul general en Tel Aviv, Ramiro Gutiérrez, confirmó que ya son 7 los argentinos muertos en Israel tras el ataque terrorista de Hamas.

Ya son siete los argentinos muertos en Israel, tras el ataque de Hamas. Así lo confirmó el cónsul general en Tel Aviv, Ramiro Gutiérrez, quien además informó que hay al menos otros 15 desaparecidos, todos oriundos dekibutz del sur del país, en zonas aledañas a Franja de Gaza.

Los fallecidos fueron identificados como Tair Bira, Tahel Bira y Laura Jazmín Kofman.

Ayer por la tarde, Cancillería Argentina había informado sobre la cuarta víctima fatal, que fue identificada como Ronit Rudman, de 55 años y que estaba casada con Roland Sultan, quien también falleció en el atentado.

La Cancillería abrió un registro en el Consulado en Tel Aviv para los argentinos que quieran ser repatriados. “Hay argentinos que están queriendo salir, sobre todo lo que estaban de manera transitoria, por turismo”, informó a Radio 10 el cónsul general, Ramiro Gutiérrez.

“Se infor ma que el Consulado General en Tel Aviv tiene disponible el teléfono de guardia consular de emergencias: + 972 52 597 8359 (número local)“, indicaron a través de las redes sociales. También se puso a disposición una casilla de correo: consultasargentinosisrael@mrecic.gob.ar.

Y pidieron: “Además, se recomienda que todos los nacionales que tengan pasajes aéreos, o que puedan comprarlos, aborden cuanto antes los vuelos comerciales disponibles desde el Aeropuerto Ben-Gurion, que continúa operando”.

También ayer se había confirmado el fallecimiento de Silvia Mikanoski de Mirensky, de 80 años, que vivía en la granja colectiva Ein Hashloshá, a 17 kilómetros de Gaza. En el ataque, se incendió su casa y ella no alcanzó a salir.

El sábado, en tanto, se informó la muerte de Rodolfo Fabián Skariszewski, de 56 años, que vivía en Moshav Ohad, en el sur de Israel, a 15 minutos de la frontera con la Franja de Gaza. Y también de Abi Korin, hijo de un importante referente de la comunidad judía en la Argentina.

Entre los desaparecidos, dos, Iair y Eitan Horn, son hijos del periodista Itzik Horn, de quienes no hay información desde el sábado cuando inició el ataque en el kibutz Nir Oz, cercano a la Franja de Gaza.

Cabe destacar que Hamas mantiene como rehenes a más de cien personas (se desconoce el número exacto), la mayoría de las cuales serían civiles.

Hace instantes, Hamas anunció que ejecutará uno por uno a los rehenes que fueron capturados en el festival de Re’im y en otras ciudades fronterizas, si continúan los bombardeos a civiles en la Franja de Gaza.

“Cualquier ataque contra casas inocentes en Gaza sin previo aviso y alerta se enfrentará a la ejecución pública de un rehén”, declaró en un comunicado Abu Obeida, portavoz de las brigadas de Al Qasam, brazo armado de Hamás.

El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu ha prometido una “poderosa venganza”, pero el destino de los soldados israelíes, los ancianos, las mujeres y los niños llevados a Gaza (las cifras aún no están claras) complica la forma en que Israel cumple su promesa de devolver el golpe con fuerza y rapidez, manteniendo al mismo tiempo un acuerdo de larga data: principio de no dejar a nadie atrás.

En 2011, Israel intercambió cientos de prisioneros palestinos para lograr la liberación de un soldado israelà ­, Gilad Shalit, que estuvo detenido durante 5 años. Ese tipo de intercambio, que incluso en su momento fue criticado por algunos israelíes por ser demasiado desequilibrado, parece un trato imposible cuando esta vez pueden estar detenidas decenas de personas.

“La cruel realidad es que Hamás tomó rehenes como póliza de seguro contra las represalias israelíes, en particular un ataque terrestre masivo, y para canjear por prisioneros palestinos”, dijo Aaron David Miller, investigador principal del Carnegie Endowment for International Peace.

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