La nueva deuda que deberá enfrentar al Banco Central
Ante la falta de dólares en el país, se generó otra deuda frente a los importadores por parte del Banco Central.
El medio Bloomberg, afirmó que la escasez de reservas en las arcas del Banco Central, llevó a que la deuda con importadores llegue hasta los U$S14000 millones, casi el doble que los U$S 7500 millones que se habían acumulado al cierre de 2015, estableciendo un récord para los últimos años con cepo cambiario.
El jefe de research de Romano Group, Salvador Vitelli, los pagos debieron postergar los importadores argentinos por la escasez de divisas ascendía a U$S10900 millones al cierre del 2022, pero ya superan los U$S14150 millones. “La situación es considerablemente más complicada que en años anteriores”, señaló el economista, que explicó que la cifra se desprende de estadísticas oficiales del BCRA y del Indec.
Durante el último año y medio esta deuda creció, al cierre del 2021 el saldo era positivo en unos U$S247 millones.
¿Por qué esta deuda complica la salida del cepo?
Los más de U$S14150 millones de deuda representaría el registro más elevado para los años con el cepo cambiario, superando ampliamente los U$S7461 millones de 2015 y los U$S6330 millones de 2014. “Cuando no hay cepo no tiene demasiada injerencia ya que, en definitiva, no hay un dólar atrasado”, aclara.
Martín Vauthier, director de Anker Latinoamérica expresó que, si bien no hay un registro oficial, las estimaciones muestran que es “un número significativo que se fue acumulando a medida a medida que el BCRA fue tratando de administrar el corto plazo”.
El especialista señaló que la deuda comenzó a espiralizarse desde el año pasado, mientras la entidad monetaria fue postergando el acceso a dólares para el pago de importaciones. “Son importaciones que se realizaron pero que no se pagaron, con lo cual se fue acumulando esta deuda que queda pendiente y efectivamente es una consecuencia más del cepo que va a tener que ser encarada eventualmente hacia adelante”, advirtió.
En tanto el economista del medio Econviews, Alejandro Gacoia sostuvo que “esta deuda que se acumula es producto de altísimo nivel de restricciones sobre las importaciones que tenemos actualmente”.
Además, recalcó que, “ante la imposibilidad de acceder al mercado de cambios para importar, hay muchas empresas que se endeudan con casas matrices o en el exterior para conseguir insumos necesarios. En un escenario de normalización, esa deuda debería volver a niveles anteriores y eso implica mayor demanda de divisas en el futuro, lo cual debe tenerse en cuenta cuando se diseñe el plan para salir del cepo”.
Francisco Ballester, director de MindY-Economics afirmó, que esta situación representa una suerte de “devaluación encubierta” para algunos productos, ya que “esos dólares que el BCRA no les vende, los importadores deben conseguir en otro lugar”.
Ante este panorama el economista de la consultora que encabeza Guido Sandleris afirmó que “las empresas no saben cuál es realmente el costo de reposición de bienes o insumos importados”, lo que hace que las referencias de precios terminen siendo negativas.