Cómo llegó a Posadas el cine más moderno del país
La pandemia, como se dijera en reiteradas ocasiones, hasta el hartazgo, reconfiguró las prácticas económicas y sociales en diferentes niveles. El paradigma cambió y, así como demostró que algunos sectores o actividades ya estaban obsoletas para esta nueva modernidad, otros rubros ratificaron su importancia como actividad, tal vez no esencial, pero sí de peso en la comunidad, como lo es el cine.
Esto lo ratificaron esta semana, los integrantes de la firma Las Tipas, quienes apostaron a Misiones para instalarse con uno de los complejos de salas de cine más modernos de la región, en el Paseo Libertad (o el Hiper, cómo se lo conoce localmente). La empresa, fundada por José Luis Brunone, actualmente es una de las más importante del país, no sólo por la cantidad y calidad de las salas que tiene en varias provincias argentinas, sino también porque se dedican al abastecimiento, asesoramiento y acompañamiento de empresas “colegas”. En la actualidad, Las Tipas tiene como socios principales a José Luis, su hijo Paulo y a Martín Adami, el último miembro en sumarse a la sociedad.
Las Tipas, que debe su nombre a las especies de árboles que había (y todavía hay) en el predio donde emplazaron el complejo recreativo donde José Luis inició, a finales del 2.001, en la localidad de Morteros, Córdoba, pueblo que lo vio nacer. Periodista, tuvo una amplia carrera profesional donde fundó radios, canales de televisión, recorrió el mundo y conoció a importantes celebridades como Juan Manuel Fangio, Ángel Labruna, Alberto J. Armando o también del plano internacional, como Magic Johnson, Kart Malone o el mismísimo Michael Jordan.
Luego de radicarse un tiempo con toda su familia en Buenos Aires, donde sus hijos estudiaban y su hija se había casado, llegó el momento de volver a su Morteros natal. “Vendí una casa que tenía en San Isidro, le dejé a los chicos en un departamento en Belgrano y volví para invertir en el pueblo que me vio nacer”, explicó José Luis a Economis, a quien se le nota su pasado de periodista y locutor en su forma de hablar, el léxico y, como mencionan en el libro que escribió “Era y aún lo es, pero en menor medida, una máquina de hablar (..) nunca vacilante, sea autoridad o no, de jerarquía o del llano” (Mary Pieroni, presentación del libro Pasión de Radio).
Con sus 72 años, José Luis pasa la posta a su hijo Paulo, con quien trabaja codo a codo en la inauguración de nuevas, salas, en el mantenimiento y todas las tareas que involucren a la Pyme. “Yo ya estoy hecho, esto es para ellos, para mis nietos y para aportar algo a la comunidad; pero veo esto y no puedo evitar emocionarme, ver todo lo que ellos logran con su trabajo”, diría el día previo a la inauguración, cuando todavía no se calzaba el traje azul que lo diferenciaba como ese empresario irreverente que logró reinventarse pese a las adversidades.
El predio que consiguió en Morteros, allá por el 2.001 para la inauguración del primer complejo recreativo, se encontraba lleno de Tipas, árboles frondosos muy comunes en plazoletas y bulevares. Por este motivo, decide bautizar a su nuevo emprendimiento con este nombre. “Muchos piensan que es en referencia a mujeres, pero no, son árboles y están en todos lados. A las mujeres no se les puede decir así, sería irrespetuoso”, refunfuña, cada vez que lo recuerda.
Con lo que no contaba la familia Brunone, en ese tiempo, fue el colapso económico que azotó al país con la renuncia del entonces presidente radical, Fernando De la Rúa y todo el conflicto que vino después. “Tuvimos que dejar ir empleados, fue un cimbronazo, de pronto de tener un montón de trabajadores, estábamos nosotros limpiando las mesas, preparando todo, para mantenerlo. Pero supimos reponernos, cuando nadie te aceptaba bonos, ni lecops (la “moneda” que circulaba en aquellos años) nosotros lo tomamos todo igual, debíamos salir adelante”, recordó.
Lo económico, aunque suene paradójico, juega un rol casi secundario en la visión de la empresa. Cuando se les pregunta por números, inversión y tiempo de recupero de inversión, no saben qué responder. No porque oculten algo, porque les de pudor, simplemente es porque el dinero para ellos es un canal que usan para gestionar los recursos que necesitan, para hacer eso que aman.
“Recuerdo cuando fue a Buenos Aires a ver la primera película de Avatar, en 3D, me la pasé espantando pajaritos frente a mi cara, toda la función”, recuerda jocoso José Luis. Es que, en aquellos años, casi todas las salas del país usaban el proyector a carrete de 35 mm. como en Cinema Paradiso, aunque la tecnología ya llegaba de a poco a renovar los cines argentinos. “Salgo del cine y lo llamo a Paulo, le digo que debemos instalar un proyector como ése en nuestras salas”.
Paulo completa la anécdota recordando, “Le dije que ese proyector salía muy caro, que nos iba a costar mucha plata. Mi papá me responde que lo hagamos igual, debíamos brindar un mejor servicio y fuimos pioneros en el interior del país en tener un proyector digital. Sólo había algunas salas en Buenos Aires, Ciudad de Córdoba, y Rosario que lo tenían…. y nosotros”.
El socio que faltaba
Las Tipas, arrancó como un complejo que tenía patio de comidas, casino, discotecas y salas de cine. Fue esto último que los hizo más fuerte para expandirse y algo que aman. No obstante, fue la llegada de Martín Adami, quien completó la ecuación para cerrar la sociedad a cómo la conforman actualmente.
Con un poco de fortuna y tal vez de picardía, la llegada de Martín a la sociedad de Las Tipas, no deja de ser curiosa. Ya habían instalado el primer proyector digital y llegó el segundo, pero el técnico estaba de vacaciones y Paulo decide instalarlo él, ya que tenía formación técnica y luego llega Martín. “Cuando voy a la mañana, el trabajo estaba hecho y Martín, que estaba de vuelta del Caribe, de instalar unas salas, me dijo que Paulo había hecho casi todo el trabajo. Mi hijo me dice: mirá que hay que pagarle igual los 5.000 dólares. Entonces lo llamo a mi oficina, me cobra otra plata, porque no tenía esa cantidad y luego lo seguimos llamando y empezamos a trabajar en conjunto”, recuerda Paulo.
Rafaela, San Franciso fueron las siguientes salas que instalaron en conjunto. Del trabajo en conjunto surge la amistad y luego una sociedad donde brindaban servicios a terceros. Con el correr de los años se convirtieron en uno de los proveedores más importantes de Argentina y Sudamérica de proyectores e insumos para salas de cine.
Destino Posadas
Posadas contaba con dos salas de cine: el céntrico ubicado en el Shopping y el IMAX del Conocimiento, ubicado en el Parque del Conocimiento. No obstante, desde el 2.019 se inició la gesta de la tercera sala, de la mano de la sociedad Brunone- Adami y que se concretaría casi tres años después de la proyección inicial.
“Nosotros trabajamos con el Paseo Libertad en Córdoba y nos dijeron que tenían intenciones de instalar un cine en Posadas, que es una ciudad grande y que, a pesar de contar con algunas salas, la Provincia se encontraba deficitaria de este servicio”, recordó Paulo. No hubieron muchas vueltas en el asunto, ni siquiera un estudio de mercado formal, la idea se planteó en alguna mesa a poco menos de 1.000 kilómetros de la capital misionera y prendió enseguida.
No obstante, dos nuevos escollos se presentaron a la hora de iniciar este nuevo proyecto. El primero fue una fuerte devaluación a finales de ese año los empujó a comprar todo el material que podían, también los insumos, antes de que las cosas aumentaran más. El segundo, menos previsible para nadie, una pandemia que obligó a parar cualquier actividad que quisieran realizar y, peor para ellos, todas las actividades económicas que tenían en funcionamiento: bares, pizzerías, casinos, boliches y, obviamente, los cines.
Cuando se empezaron a habilitar las actividades, iniciaron las primeras ideas de obras, pero era difícil a la distancia. Los primeros viajes para controlar el proceso fueron difíciles, había que ingresar con PCR negativo y fue recién en el 2.022 cuando empezó forjarse con un ritmo más vertiginoso el emplazamiento de las salas. “Es un proceso que debemos ver cómo va, después que empezamos a poder venir con mayor regularidad, nos cierran el aeropuerto y siempre pasaba algo”, recordaron los empresarios.
Con todas las fuerzas concentradas en la instalación y puesta a punto de la propuesta nueva que traían a la ciudad, descuidaron (aunque si lo hicieron adrede, no lo mencionaron) la parte publicitaria. Todo este proceso se llevó frente a los ojos de los clientes regulares del Hipermercado Libertad, pero por el desconocimiento general de la comunidad que se enteró del emplazamiento del mismo, luego de que Economis realizara la primera entrevista a Paulo, varios días atrás.
Nobleza obliga, el encargado del Paseo y los 40 trabajadores con sus respectivos círculos sociales sabían de qué se trataba, aunque públicamente no trascendió mucho más que por algunas publicaciones en redes que no muchos prestaron atención.
Estos 40 trabajadores fueron incorporados también como parte de las políticas implementadas por la Municipalidad de Posadas y el sector privado, a través de la Oficina de Empleo. Respecto a esto, el Jefe Comunal, Leonardo Stelatto resaltó la inversión realizada en la ciudad, durante la inauguración oficial y muestra de la propuesta, que se realizó el pasado jueves 10 de noviembre en el cine, donde también estuvieron presentes autoridades provinciales y locales, como invitados de otros medios y también colegas del IMAX del conocimiento.
“Esta inauguración es muy importante para la cultura, para la recreación y para el sector comercial, porque Posadas sigue creciendo. Agradecemos al sector privado por esta inversión y por generar empleo. También a los 40 jóvenes de la Oficina de Empleo que han sido seleccionados y que hoy prestan servicio en este lugar, es un orgullo”, expresó. En esa misma sintonía, el gobernador, Oscar Herrera Ahuad, que también participó del acto de corte de cinta, destacó la propuesta “propuesta única en la región y que generará puestos de trabajo local”.
Proyecciones
El cine Las Tipas Posadas se inauguró con la puesta en marcha de tres de las seis salas que están previstas en el complejo y donde la propuesta fuerte es la tecnología 4D, que se encuentra en la Sala 3. No obstante, esperan culminar para el verano la cuarta sala y, unos cinco meses después, estiman estarán la Sala 5 y la Sala 6, para tener el complejo 100% operativo.
“Para la Sala 4 ya tenemos casi todo, faltan algunas cositas y unos detalles, pero asumimos que en los próximos meses habilitamos, los otros se demorarán un poco más porque se nos está haciendo difícil comprar el hierro, por lo que demoraremos un poco más, pero confiamos en que se solucionará paulatinamente”, expresó Paulo.
No obstante, Las Tipas no terminará su recorrido nacional en Posadas, ya que tienen cerrado la construcción de dos salas más: una en Rosario, Santa Fe y la otra en Paraná, provincia de Entre Ríos. “La primera debería estar lista para el año que viene, ya está todo firmado, todo ok y la otra debería estar para fines del 2.023 a principios del 2.024”, explicó Paulo.
“Somos una pyme, nos manejamos así y es más lo que invertimos que lo que ganamos, seguramente, es nuestra manera de ver las cosas. Hacemos lo que nos gusta y el dinero es una consecuencia, nos gusta manejarnos así”, finalizó José Luis que, con esa filosofía, mal no le fue.