La selección de Japón ha hecho historia en el Mundial de Rusia 2018 al conseguir una clasificación a los octavos de final con un método jamás aplicado en la historia del torneo, la regla del ‘Fair Play’.

El elenco “nipón“, que perdió 1-0 ante Polonia en el cierre del Grupo H, pasó la siguiente ronda por su cantidad de tarjetas amarillas y rojas.
Japón y Senegal terminaron ambos con 4 puntos e igualados en todos los aspectos mencionados, por lo que se recurrió la instancia de las tarjetas. Cabe resaltar que si también estuvieran empatados en tarjetas el último escollo sería un sorteo entre ambos seleccionados.

Los “Samuráis Azules” recibieron cuatro tarjetas amarillas a lo largo de la fase de grupos, mientras que el combianado africano tuvo seis amonestaciones.
También la imagen japonesa quedó opacada por los últimos minutos de su partido frente a los polacos donde claramente bajaron “la persiana”  a pesar de que caían 1 a 0. Hicieron tiempo, fingían lesiones y calambres para agotar el tipo del encuentro. Totalmente anti “Fair Play”.
De esta forma, Japón quedó en segundo lugar detrás de Colombia, que terminó líder del Grupo H con seis puntos tras imponerse a Senegal por 1-0 con gol de Yerry Mina.