El educador uruguayo Julio Pereyra Sánchez, que realiza tarea docente en Misiones, resultó uno de los ganadores del premio de Derechos Humanos que la ONU concedió también al grupo bielorruso Viasna, la activista congoleña Julienne Lusenge y la campaña mundial por el derecho a un “medio ambiente sano”.
“La dedicación de los galardonados atestigua la naturaleza universal de los derechos humanos en un momento crítico”, declaró Csaba Korosi, presidente de la Asamblea General de la ONU, que dirige el comité encargado de seleccionar a los galardonados.
“El premio envía un mensaje claro a los defensores de los derechos humanos de todo el mundo: la comunidad internacional reconoce y apoya sus esfuerzos por promover los derechos humanos para todos”, añadió.
Pereyra Sánchez es un activista centrado en los derechos de los niños, las personas con discapacidad y los pueblos indígenas.
“Como persona con autismo, es educador comunitario en Misiones, Argentina”, destacó en su sitio la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Los ganadores de 2023 incluyen además a Viasna, principal colectivo de derechos humanos de Bielorrusia; Lusenge, activista de los derechos de la mujer en la República Democrática del Congo; y al Centro de Estudios de Derechos Humanos de Amán, Jordania, consignó la agencia de noticias AFP.
El premio también recayó en la Coalición Mundial de Organizaciones de la Sociedad Civil, Pueblos Indígenas, Movimientos Sociales y Comunidades Locales por el Reconocimiento Universal del Derecho Humano a un Medioambiente Limpio, Saludable y Sostenible, principio que fue aceptado como tal por la Asamblea General de la ONU en julio de 2022.
“En un momento en que el espacio cívico está amenazado en todo el mundo, la concesión del premio de Derechos Humanos de la ONU a la campaña por el reconocimiento universal del derecho a un medioambiente sano es una prueba del poder del esfuerzo colectivo y de la importancia de la sociedad civil para lograr un futuro más justo y más verde”, ponderó Elaine Geyer-Allély, de WWF-International, miembro de la coalición.
Creado por la Asamblea General de la ONU en 1966, este premio de Derechos Humanos, que se concede cada cinco años, ha distinguido en el pasado a Nelson Mandela, Malala Yousafzai, Jimmy Carter, Eleanor Roosevelt y el Comité Internacional de la Cruz Roja.
Se conocieron en Chile los ganadores de la Fase Internacional del IV Premio “Oscar Arnulfo Romero”, organizado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) y la Fundación SM. Allí “Caminos de Tiza” fue destacada como el mejor proyecto educactivo no formal de Argentina.
El Premio Iberoamericano de Educación en Derechos Humanos ‘Óscar Arnulfo Romero’ se entrega cada dos años en honor a San Óscar Romero, sacerdote salvadoreño, asesinado el 24 de marzo de 1980 mientras oficiaba una misa, y canonizado por la Iglesia Católica en 2018. Es recordado en toda la región como un firme defensor de los derechos humanos.
El premio, en sus ediciones anteriores, ha contado con proyectos ganadores de Brasil, Colombia, Perú, El Salvador, México, Guatemala y Puerto Rico, y ha recibido hasta la fecha más de 1.500 candidaturas provenientes de todos los países del espacio iberoamericano.
En dialogo con radio Open 101.7, el profesor Julio Pereyra destacó que el proyecto trabaja en 14 comunidades de Misiones en las que incluyen aldeas guaraníes, colonias, parajes y barrios desde Gobernador Roca hasta San Antonio. “Trabajamos con niños con discapacidad que están en zonas de vulnerabilidades y algunos no tienen trazas escolares, entonces buscamos reinstitucionalizarlos a la vez que se hace procesos terapéuticos pedagógicos y apoyó escolar para evitar lo que es el abandono y la repetición escolar”.
Julio Manuel Pereyra Sánchez es docente y educador. Ejerce la docencia formal, pero ocho años atrás creó el proyecto escuelita ambulante “Caminos de tiza”. Prefiere ser nombrado como “El profe Julio”. Trabaja a la par junto a Yanina Rossi, profesora en educación especial y encargada de la Educación Sexual Integral (ESI) en niñas, niños y adolescentes.
El profe Julio cuenta sobre “Caminos de tiza” y cómo articula la “educación comunitaria voluntaria”, la alfabetización y la pedagogía en contextos rurales, selváticos e, incluso, en los basurales del noroeste argentino. Para él, la conectividad no es requisito indispensable para generar una comunidad educativa. Su pilar principal es el compromiso con los poblados a veces algo olvidado por el sistema formal.
Explicó que este reconocimiento es valioso y además le permitió compartir su propuesta educativa con otros “proyectos Latinoamericanos y de España y Portugal fue importante para trabajar lo que es la educación las diferentes miradas y bueno ser reconocido como educación no formal por la OEI es muy importante“.
El profe Julio indicó que “articulamos con escuelas interculturales bilingües, escuelas especiales eventualmente con espacios de primera infancia que hemos logrado entre ellos el primero y único que hay en argentina en una comunidad guaraní en Kaa’guy Porà y lo que hacemos es trabajar con los padres y con los niños temas de alto impacto inmediato. En los casos de discapacidad bueno tiene que ver con estimulación temprana así como motricidad cuestiones de higiene posturales y promoción de Lenguaje y Comunicación Alternativa. Y en otros casos trabajamos los chicos prevención decente con animales ponzoñosos, bullying, grooming y otras cuestiones que tienen que ver con prevenir accidentes eléctricos y prevenir intoxicaciones en la casa con productos químicos”.
Al ser consultado sobre como coordinan las actividades en las comunidades donde trabajan, el profe Julio explicó que trabajan con difusión previa de las actividades a través de las radios, así los padres se organizan y “ahí nos esperan, pero ya coordinamos con con la comunidad y más allá de que nosotros dependemos de las inclemencias del tiempo para entrar a las aldeas o acceder a las colonias, básicamente hay un itinerario armado y nosotros vamos atendiendo las problemáticas que ellos nos van comunicando que necesitan ser atendidas en su contexto, sea el barrio o tekoá, o el paraje. o llevamos nosotros la propuesta para trabajar con los chicos”.
Indicó que “por ejemplo la semana próxima estaríamos en Comandante Andresito y en San Antonio, estamos articulando actividades del marco del autismo y estamos trabajando las problemáticas de la Salud Mental. Vamos a estar trabajando problemáticas de chicos en situación de depresión, el bullying y el acoso escolar”.
Con respecto a los recursos el profe Julio indicó que “en realidad nos manejamos con donaciones, no aceptamos dinero. Recibimos material terapéutico, ortopédicos, pedagógico, sillas de ruedas, etcétera. Generamos propuestas de proyectos no para Caminos de Tiza, sino para las comunidades a través de la responsabilidad social empresarial; así hemos conseguido perforaciones de agua, hemos construido escuelas, construido baños, hemos conseguido traslados sanitarios para niños”.
Además destacó que trabajan en conjunto con las municipalidades “los cuales les brindan la asistencia de los promotores de salud, además articulamos con CAPs eventualmente con gabinetes interdisciplinario para acciones conjuntas. A veces nos han brindado un espacio donde pernoctar y algunas veces nos colaboran con combustible también”.
En cuanto al reconocimiento que reciben por su tarea, el profe Julio recordó que han sido premiados en varias ocasiones a nivel internacional, entre los cuales mencionó al “Global Teacher Award” (2019-2020); el premio Espiral Internacional de España; el Premio Iberoamericano por labor educativa. Pero sin embargo reconoció que en Misiones “pasamos bastante invisible y bueno, hemos recibido. No doy parte del gobierno, sino del área de Educación Especial serias y graves denuncias. Censuras que las hemos denunciado incluso en el ministerio de Derechos Humanos. Pero seguimos trabajamos para articular actividades en Misiones y bueno por suerte el trabajo es visible más allá de que pasa invisibilizado”.
Entre las cosas que destacó a nivel provincial es poder llevar adelante junto a otros equipos de profesionales una actividad en el Parque del Conocimiento en Posadas, hablando de autismo y las cuestiones que tienen que ver con el suicidio, la discapacidad y la salud mental; y entonces empezamos a generar nuevas redes de organismos y del tercer sector y ONGs que a partir de este reconocimiento no solo nacional, sino internacional, nos están propiciando recursos para traer a la provincia”.
Sobre la metodología de trabajo aplicada, y que lo llevó a ser reconocido internacionalmente por distintas organizaciones, explicó: “Trabajamos una pedagogía de la emergencia, haciendo alfabetización inicial, apoyo escolar y lo que tiene que ver con procesos terapéuticos pedagógicos de niños con discapacidad. La idea es formar referentes pares trabajando con padres con auxiliares indígenas y educadores de primera infancia, en mecanismos y estrategias en atención especialmente a niños con dislexia, sordos, ciegos y todo lo que tiene que ver con problemática del aprendizaje”.
Asimismo, señaló que el logro real de Camino de Tiza está directamente relacionado con el impacto pedagógico. “En las 14 comunidades que trabajamos tenemos cero casos de dengue, no tenemos embarazo infantil, el 100% de los niños están escolarizados, erradicamos en analfabetismo a los mayores de 8 años, no tenemos casos de desnutrición, no hay un solo registro de trata de personas, algo muy significativo en el caso de Misiones. Esos son los grandes impactos de Caminos de Tiza, hay una evolución en el sentido de que siempre fue estratégico y situacional, es atender la problemática propia y una pedagogía de la emergencia, cada comunidad necesita algo específico”, remarcó.
Este martes, 27 de septiembre, fueron desvelados los cuatro proyectos ganadores de la fase internacional de la 4ª edición del premio de Educación en Derechos Humanos ‘Óscar Arnulfo Romero’ que impulsan la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y la Fundación SM.
El acto de premiación tuvo lugar en el marco del IV Seminario Iberoamericano de Educación en Derechos Humanos que se celebra desde el 26 de septiembre, en la capital chilena, con la participación de las 32 iniciativas finalistas de los países iberoamericanos en sus fases nacionales.
La mención honorífica fue para la iniciativa hondureña “Todos somos migrantes, todos somos humanos” del Instituto Gubernamental Polivalente Roberto Micheletti Baín.
De acuerdo con Mariano Jabonero, este premio es importante para la OEI porque “nos preocupa la promoción y la defensa de los derechos humanos, pero no en lo teórico, que no acaba con la lectura de la carta de derechos humanos, no acaba con declaraciones retóricas vacías de contenido. Acaba y empieza a través del trabajo en las escuelas, el trabajo en la sociedad civil que es donde realmente se está trabajando, y este galardón es un ejemplo de ello, que convoca a todos los países de la región, todos participan y presentan magníficos proyectos y esa es la mejor noticia que podemos recibir, afirmó el secretario general.
Por su parte, Mayte Ortiz, directora general de la Fundación SM señaló que, “nos sentimos orgullosos de apoyar y dar a conocer los proyectos que fomentan la educación en derechos humanos. Nuestro objetivo en conjunto es continuar luchando por las vulnerabilidades que existen en las comunidades sociales y educativas, para así poder potenciar y transformar los espacios que hoy en día están existiendo.
¿Te lo vas a perder? El próximo 18 de septiembre VAMOSAZOOMAR vuelve a Posadas, Misiones, con un evento presencial al aire libre en la sede del Ministerio de Cambio Climático ubicada en la antigua estación de tren sobre la Costanera.
Conducido por Belén Hernández, lxs invitamos a reunirnos nuevamente para conocer historias y proyectos con impacto social que nos permitan conocer otras realidades.
Además, en un show en vivo, el músico misionero Gonzálo Bernal recorrerá las canciones más emblemáticas de su repertorio.
Ya seleccionamos a lxs 4 oradorxs para este reencuentro que nos compartirán sus charlas cortas e inspiradoras. Ellxs son:
Julio Pereyra (fundador Escuelita Caminos de Tiza -Misiones- una iniciativa itinerante dedicada a la alfabetización inicial, apoyo escolar, estimulación temprana, comunicación alternativa aumentativa, lenguaje de signos y psicomotricidad); Ileana Rossi (arquitecta, fundadora de Mujeres a la Obra -Santa Fe- que capacita a mujeres en diferentes oficios relacionados con a la construcción),
Araceli Ledesma (referente de TECHO y Representante de La Mesa Nacional de Barrios Populares, Provincia de Buenos Aires) y Mirta Abreu (presidenta de la Asociación Civil Hogar de Niños Merceditas y fundadora de Pilotos Sachecitos, un proyecto solidario de la ciudad de Oberá, Misiones, que consiste en fabricar pilotos con sachets de leche y yogur reciclados).
Además, con la proyección de los módulos de Crisis Climática Ambiental (protagonizados por Nicole Becker de Jóvenes por el Clima y el biólogo Martín Kowalewski) y Crisis Habitacional (encabezado por la actriz Mey Scapola Morán, el arquitecto Fernando Murillo y la referente de TECHO Gabriela Arrastúa) invitaremos a las personas presentes a preguntarse: ¿Qué desafíos tenemos por delante? ¿será posible reducir las consecuencias de la crisis climática y ecológica? ¿De qué hablamos cuando hablamos de crisis habitacional?
Para el desarrollo de toda comunidad, la educación cumple un rol fundamental. Es la herramienta basal donde emergen las oportunidades de progreso y prosperidad de la sociedad.
Bajo estos preceptos, Julio Pereyra impulsó Caminos de Tiza, un proyecto que se basa en Educación Comunitaria Itinerante desde el voluntariado en contextos rurales, barriales, selváticos y basurales.
“Caminos de Tiza trabaja actualmente en catorce comunidades de Misiones en un proceso que va desde alfabetización inicial, en contexto interculturales bilingües y de niños con discapacidad, hasta educación sexual integral, atención primaria de la salud, apoyo escolar”, indicó Pereyra en Open 101,7.
La propuesta, que se inició en Corrientes, lleva cuatro años de trabajo en la provincia. “Actualmente se traba en catorce comunidades que van desde Gobernador Roca, hasta San Antonio y participan unos 164 chicos”, remarcó.
Desde Caminos de Tiza atienden secuencias didácticas terapéuticas (estimulación temprana y oportuna, psicomotricidad, argots en lengua de señas, comunicación alternativa, braille, usos de material terapéutico y ortopédico) y pedagógica (alfabetización inicial, apoyo escolar, estrategias de aprendizaje, grafomotricidad, reinserción escolar) generando estrategias de aprendizaje y técnicas de estudios.
Pereyra, que actualmente reside en Capioví, es oriundo de Uruguay y está formado en Estimulación Temprana/Oportuna, Psicomotricidad, Psiconeuroeducación, Intérprete en Lengua de Señas, y además es Profesor. Eventualmente, es acompañado por Yanina Rossi (oriunda de Capioví), Profesora en Educación Especial egresada de la UNaM (Universidad Nacional de Misiones), quien colabora con algunas tareas.
Su trabajo se basa en recorrer las aldeas y comunidades, asiste en el Aula Satélite EIB N°761 de la aldea Kaa’guy Porá (Andresito), la aldea Ivira Potý, y colabora de manera coordinada en la Escuela n° 130 de Gobernador Roca, Escuela Especial n° 36 de Capioví, Escuela Intercultural Bilingüe n° 761 de Andresito y un trabajo en primera infancia de San Antonio y Andresito. También recorre otras localidades como Yacutynga (Puerto Iguazú), San Gotardo (Libertador General San Martín), Paraje 130 (San Antonio), y Puerto Rico.
Cabe destacar que todo esto lo hace de manera voluntaria, totalmente gratuita, sin adscripción política ni religiosa, lo que resulta aún más admirable por su esfuerzo y dedicación.
Gracias al trabajo continuo, lograron alfabetizar a 76 niños y otros 21 fueron reintegrados a instituciones educativas. Se trabaja en la atención primaria de la salud, educación sexual integral, potabilización del agua y gestión de residuos, entre tantas cosas más.
Trabajar durante la pandemia
Debido a la emergencia epidemiológica tuvieron que redoblar esfuerzos, debido a que la falta de presencialidad en las escuelas provocó que subiera la demanda de chicos que necesitaban apoyo escolar.
“No suspendimos las tareas, porque ya teníamos protocolos de seguridad e higiene, ya que la provincia estaba en emergencia sanitaria y epidemiológica del dengue”, aseveró Pereyra, que entiende a la educación como una herramienta fundamental para la inclusión social, laboral, educativa y cultural.
“Generar condiciones de alfabetización en zonas interculturales, bilingües y de frontera, como es Misiones, siempre es un reto, pero también es una oportunidad básica para que a muchos de ellos, entre esos adultos mayores, se les permitan ser parte de la sociedad”, afirmó.
Es que Caminos de Tiza no sólo trabaja con niños y adolescentes, también con adultos mayores que precisan adquirir conocimientos básicos que van desde cómo realizar un trámite, usar un cajero automático a interpretar una receta o un cartel de advertencia.
Este proyecto ha recibido reconocimientos a nivel mundial y lo llevó a ganar grandes premios. En 2019, recibió el premio “Global Teacher Award” (Premio Mundial de Docentes) en la India.
También ganó el premio iberoamericano a “La Labor Docente”, de la Asociación Internacional Educar, que tiene como objetivo reconocer a docentes de nivel inicial a superior que, pese a las circunstancias a veces difíciles de su profesión, día a día realizan acciones significativas para la vida de sus alumnos, en beneficio de toda la comunidad.