Industria: el clima sigue frío y la demanda no reacciona
La industria manufacturera entra al último trimestre del año con confianza empresarial (ICE) en -23,2% y un balance de producción esperado de -9,1%: solo 14,8% prevé aumentar el volumen, 61,2% no ve cambios y 23,9% proyecta caídas. La cartera de pedidos actual es el principal dolor: 52,8% la ubica “por debajo de lo normal” (balance -49,5%). En paralelo, los stocks aparecen adecuados o algo holgados (24,5% “por encima”), con balance +10,8%, una señal de demanda débil.
Caja y crédito. En septiembre, la situación financiera fue “normal” para 63,1%, “mala” para 22,3% y “buena” para 14,6% (balance -7,7%). El acceso al crédito sigue tenso: 34,9% “difícil”, 6,4% “fácil” (balance -28,5%). La situación empresarial actual se percibió “mala” en 28,4%, “buena” en 8,1% (balance -20,2%).
Qué limita producir más. La demanda interna insuficiente explica la mitad de las restricciones (49,9%), seguida por incertidumbre económica (10,4%) y competencia importada (10,1%). Insumos y materias primas pesan menos (4,0%).
Exportaciones y empleo. Para oct–dic, las exportaciones son el único renglón con leve sesgo positivo (balance +2,3%: 19,9% cree que subirán y 17,5% que caerán). En cambio, horas trabajadas (balance -14,2%) y empleo (balance -14,4%) se anticipan estables a la baja: más de 7 de cada 10 empresas no moverían dotaciones, pero la proporción que proyecta recortes triplica a la que planea contratar. La situación futura del negocio apenas insinúa mejora (balance -3,0%). Precios: 32,1% espera aumentarlos y 58,3% mantenerlos.
Lectura de coyuntura. Con pedidos flacos y stocks cómodos, la industria entra al trimestre final defendiendo caja, con parques productivos más ociosos y decisiones de personal prudentes. El motor externo podría amortiguar, pero no alcanza —por ahora— para torcer el clima general.



