(Por Julio Martínez).- River Plate se hizo fuerte hoy en La Bombonera y venció a Boca Juniors en el Superclásico, por 2 a 0, en un triunfo resonante, correspondiente a la 7ma. fecha de la Copa de la Liga, que lo celebró con alma y vida, después de un lustro.
Los goleadores del último campeón del fútbol argentino fueron el venezolano Salomón Rondón y el defensor Enzo Díaz, ya en tiempo de descuento.
River se quedó con un Superclásico que por momentos fue muy luchado y caliente, en un marco imponente que le dio mucho color al choque futbolístico más importante de la Argentina, acaso uno de los mejores clásicos del mundo.
El “Millonario” lo ganó con mucha concentración y por momentos con buen juego en el toque con la pelota. Aprovechó sus oportunidades y le propinó a Boca un impacto mayúsculo ya que el próximo jueves se jugará el pasaje a la final de la Copa Libertadores.
River tuvo puntos muy altos en Enzo Pérez, Paulo Díaz y Rondón, autor del primer gol y de gran despliegue en ataque, seguidos del seguro Franco Armani y Nicolás De La Cruz.
Boca, que no gana en la Copa de la Liga desde el 3-1 ante Platense en la primera fecha, no pudo convertir una vez más. La sequía goleadora también es moneda corriente en la Libertadores, pero encontró en los penales la vía para estar entre los cuatro mejores.
El equipo de Jorge Almirón, con escasas ideas, terminó con todos sus titulares en cancha, preservados para el duelo ante Palmeiras en San Pablo del próximo jueves, pero ni así pudo quebrar el cero.
Por momentos, Boca lució inconexo, desorientado y sus hinchas se retiraron muy fastidiados por el resultado y el desempeño de algunos jugadores como Ezequiel Bullaude y Lucas Blondel.
Después de los nervios iniciales, River mostró un mejor juego en el primer tiempo con el despliegue de sus volantes. Enzo Pérez y De La Cruz marcaron los tiempos, beneficiados por la confusión general de Boca que por momento lució muy impreciso.
Lo más interesante de la primera parte se produjo a partir de la media hora de juego cuando tanto Boca como River dispusieron de situaciones.
Darío Benedetto resultó el más regular del equipo de Almirón, entre tantos puntos bajos. El “Pipa” se las arregló para inquietar a la defensa de River que contó con la vuelta de Leandro González Pírez, en dupla con el chileno Paulo Díaz para la zaga central.
Benedetto tuvo un mano a mano con Armani (15m) que el arquero resolvió con oficio, mandando la pelota la córner, y un cabezazo al medio que contuvo el oriundo de Casilda, luego de un centro ejecutado por Lucas Janson (31m).
Con pocos toques, Boca podía generar peligro, especialmente a las espaldas de Andrés Herrera, pero River tenía al ex San Lorenzo como opción para aprovechar el bajo rendimiento de Marcelo Saracchi.
El gol de River llegó con presión en ataque ante las claras falencias de Boca. Un rebote quedó para Enzo Pérez, quien sin marca ensayó un remate al arco que en el camino encontró al oportuno Rondón. Boca reclamó una supuesta infracción a Marcelo Weigandt en el inicio de la jugada que no existió.
Al término de la primera etapa, la hinchada de Boca se preocupó por el nivel del equipo, pero descargó su bronca con el árbitro Andrés Merlos, acusado de muchos fallos a favor del eterno rival.
Almirón, uno de los tantos enojados con Merlos, tomó nota de la discreta actuación de sus jugadores y dispuso cambios con las entradas de Valentín Barco (ovacionado por la gente), “Equi” Fernández y Cristian Medina.
Boca, con otro ímpetu y decisión, se adelantó en el campo, y arrinconó a River con dos aproximaciones.
River salió de a poco del asedio local al recuperar la pelota con el buen trabajo de Enzo Pérez más el auxilio de Esequiel Barco, determinante en el segundo tiempo para atacar y defender.
Cuando iban 15 minutos, la hinchada de Boca cantó: “¡Movete xeneize, movete!”, como testigo del bajón futbolístico de Boca que tuvo su gran chance con Edinson Cavani (27m). El uruguayo recibió de cabeza un centro que dio en el travesaño y en el rebote ensayó una tijera que venció a Armani. Toda La Bombonera gritó gol, pero hubo bandera levantada y ratificación desde el VAR por un milimétrico fuera de juego.
A partir de ahí, Boca no volvió a inquietar y River resurgió. Demichelis armó línea de 5 en el fondo y buscó definirlo de contra con Facundo Colidio. El ex Boca tuvo dos ocasiones muy claras en el final y en la segunda tuvo la ayuda de Enzo Díaz para definir ante el desconcierto de la defensa xeneize.
Con este resultado, River alcanzó los 13 puntos en la zona A (a uno del líder Independiente), mientras que Boca tiene 7 en la zona B, fuera de los puestos de clasificación.
En la próxima fecha, River recibirá a Talleres de Córdoba y Boca visitará a Belgrano. El xeneize tendrá el próximo jueves la revancha de semifinales de Copa Libertadores ante Palmeiras (0-0) y su gente exclamó un triunfo en busca de “la séptima”, la verdadera obsesión del hincha.
El fútbol femenino nacional marca el camino y con dos misioneras: Luciana Nievas y Yamila Rodríguez, una en River Plate y la otra en Boca Juniors, se enfrentarán esta noche, desde las 21, para definir la Copa de Verano 2020 en el Estadio Único La Pedrera, San Luis.
Lo que no pueden lograr los equipos masculinos de ambas instituciones desde hace un par de años, lo afrontan las chicas y lo reivindican, sin temores. Desde las 21 horas, se comenzará a disfrutar del primer superclásico de verano de la historia, que se podrá mirar por la pantalla de TNT Sports.
Misiones estará bien representada por ambas camisetas.
Luciana y Yamila tuvieron acción ante el combinado local, equipo que completaba
el certamen triangular. Tanto las Millonarias
como las Xeneizes se impusieron ante
las dueñas de casa por el mismo resultado: 2-0.
Desde la profesionalización
del fútbol femenino, se disputó una sola edición del superclásico nacional con
victoria boquense por 5-0 en la Bombonera y con Rodríguez como protagonista.
En la Residencia Oficial, la televisión devuelve en silencio las imágenes de la revuelta popular en Chile y es el primer disparador para hablar de las convulsiones en el barrio, que sacuden el lejano oeste americano, pero que al mismo tiempo están tan cerca como la movilizada Cataluña en su pelea por la autodeterminación.
El gobernador Hugo Passalacqua sostiene que en Ecuador hubo un estallido similar al de la Argentina del 1 a 1, en el no tan distante 2001, pero sorprende cuando revela que la crisis de Chile no lo sorprendió.
“Como decía Umberto Eco: “La forma más inteligente de mentir es con la estadística”. Si yo me adjudico 30 mil dólares por año, y vos ganas uno, da un promedio de 15 mil, pero yo gano 30 y vos 1, así los promedios de muchas cosas en Chile eran muy buenos, pero a la hora de la realidad, el reparto era inequitativo, te daba mal. El uno por ciento, concentra el 50 por ciento de las riquezas, el resultado siempre va a ser el mismo. Tenés indicadores macroeconómicos muy solventes, pero con sectores populares, que seguían muy postergados. Hace unos años la joven Camila Vallejo sorprendió cuando pedía educación pública porque el cien por ciento de la educación superior es paga y muy cara. De ahí en más tenés muchos cortes sociales, se privatizó todo, así que no, no me sorprende. No estoy diciendo que Chile es un desastre, digo solo que socialmente está muy fragmentado y con una inequidad que en algún momento iba a estallar. El 4% de suba de subte armó un lío bárbaro. Chile es muy lindo, pero si tocás por debajo la pobreza se siente”, explica en diálogo con Economis.
Pero es un modelo que ofrecían como espejo en el que mirarse…
Hay algunas tentaciones, de algunos sectores de verse reflejados, yo nunca lo hice por ningún modelo. El copiar modelos, el imitar modelos de izquierda o de derecha a mí no me mueve, el seguir los pasos de otro no me parece porque ningún país se parece al otro. Nada se parece a nada, en realidad.
Tomando estos dos casos, incluso yendo más lejos Cataluña, que defiende su autodeterminación… Por ahí la parte más baja de la sociedad, se está cansando del tema de ajustes, de recortes.
Eso es bastante universal, no es nuevo, desde los faraones, el Imperio Romano, el Medioevo, siempre los sectores dominantes generan los sectores populares inmensos. Por fortuna en el siglo XX, sobre todo después de la segunda guerra, un poco se fueron achicando las desigualdades, aunque aún son muy grandes, pero no es lo que era, porque hubo un mejoramiento social, lento, pero existe. Pero hay lugares donde la presión sistémica, la presión de los sectores dominantes, de todo tipo, político, financiero, lo que fuere, mete mucha presión sobre la gente, y eso en algún momento pone a la gente muy mal, por eso siempre hay que estar al lado de la gente. No dar dádivas, sino crear políticas proactivas.
¿De contención?
Es más que la contención, es generar políticas proactivas, la contención es más para emergencias, pero no podés vivir en emergencia. También tenés que tener políticas de proacción, de estímulo, de inversión. Haciendo una abstracción de lo que hay acá, muy modesta muy chiquita con los “Ahora”, a nuestra escala.
Que no hay que minimizar, porque para una familia el ahorro es importante.
Es una inversión grande para el Estado, pero para una familia cambia mucho, si te metés en todos los “Ahora” que podés, el sueldo se te duplica bastante. Hay un esfuerzo del Estado proactivo para el sostenimiento de empleo, que circule más rápido el dinero, que se vaya afuera lo menos posible. Es lo que llamamos un modelo misionerista, tratamos de hacerlo. Hay cosas que nos cuesta vencer, el sistema impositivo es muy perverso. Escuchaba a un candidato en el debate presidencial, no importa quién sea (N de la R: fue José Luis Espert), que decía: “Si no cobramos IVA no tenemos porqué hacer coparticipación en las provincias”. Y yo: ¡¡Hola!!!! Como que en las provincias no somos personas, hay cosas que resultan un escándalo y pasan, yo apagué la tele en el debate. Después volví a prender, pero me enfurecí porque no hay lugar para tanta barbaridad. Es una visión muy del país central, del puerto, donde las provincias somos un accidente geográfico, no somos personas, y somos una carga, para ellos es un esfuerzo enorme soportarnos a nosotros, cuando la realidad es inversa porque somos nosotros los que lo sostenemos. Es una visión muy metida esa del país central, hay que hacer un esfuerzo para romper con eso.
Mauricio Macri empieza su gestión con una foto con todos los gobernadores el 12 de diciembre de 2015, y termina ahora prácticamente con todos enfrentados en la Corte Suprema justamente por este tema, cuando el Presidente anunció el plan de eliminación del IVA en algunos alimentos y los cambios en Ganancias después de la derrota electoral...
Sí. A la Corte fuimos dos veces, una para que no nos quiten lo que nos corresponde al pueblo… En el escrito yo le agregué la palabra pueblo, como para que se entienda que la coparticipación es para el pueblo de la provincia de Misiones.
Para que sea menos abstracto.
Sí, para encarnar, para porque no es de la Provincia, o de los gobernadores, como si fuéramos señores feudales. Por eso fuimos dos veces a la Corte a defender la coparticipación: Cuando nos la quitaron y después cuando la Corte ordena devolver, no lo hicieron, entonces volvimos a litigar, nos volvieron a dar la razón y acá estamos, en lo mismo.
No hay novedades.
No. Considero que los montos acumulados nos tendrán que devolver. No es fácil hacer cálculos del pasado, desde septiembre, pero la orden fue deja de quitar la coparticipación y darla entera, pero eso sin embargo no pasó. Pero en medio del desbarajuste de las elecciones, más no podemos hacer, porque parece que estamos en rebelión.
¿Cree que el respeto al federalismo está en juego en estos días?
Hay una cosa que a mí me da mucha fe en Alberto, que es su visión del país federal, viste que a él no se le escapa ni en un reportaje. Aunque hablen de petróleo, hablen de educación, siempre lo tiene metido, tiene metido en su visión que el país es uno, que el que nació en Atacama tiene que tener las mismas opciones que el que nació en Palermo, que el que nació en Tobuna. Las mismas opciones, y las mismas oportunidades que hoy le son negadas, pero no desde ahora, sino desde 1810. Su visión federal cuando lo dice, y yo le creo, es que va a gobernar con 24 gobernadores, no es un dato chico, sobre todo para las provincias del norte que somos las más postergadas. Es música para el oído de todos. Él tiene la oportunidad de ser uno de los grandes presidentes federales del país. Más allá de salvar la grieta, a mí me interesa lo federal, porque si la patria somos todos, nosotros tenemos la visión que creo correcta, histórica, que las provincias son preexistentes a la Nación.
El presidente más federal…
Quiero creer. No lo va a hacer en un rato. Vendrán varios presidentes, pero lo creo, eso de trazar un rumbo y volver a la fuente, que es quien quiera presidente de este país, tenga que hilvanar las voluntades, los deseos y esperanzas de todas las provincias de la Argentina, que son las mandantes, son las dueñas del país, en el sentido histórico. Ahora resulta que para el país central somos una carga, pero yo le creo a Alberto cuando dice que él está en camino de recuperar los sueños de las provincias, hacia un papel protagónico, darles protagonismo de las provincias.
¿Cómo se construyó tan rápido una relación con Fernández, cuando tiene sus propios candidatos en Misiones?
La relación con Carlos (Rovira) es de hace tiempo. Personalmente, con Fernández nos conocemos hace poco, con la Renovación sí se conocen hace bastante, pero es una persona muy afable, que escucha mucho, tiene ideas sólidas y al mismo tiempo flexibles, no es tozudo, no es caprichoso. Si hay algo que modificar, la modifica, si hay que trabajar lo hace. No es perezoso. Le toca a Oscar (Herrera Ahuad), ser su colega no, y enseguida se entendieron, forjaron una amistad, eso vale oro en una relación de alguien que está gobernando una provincia con el presidente. A lo que hay que agregarle el tema de los diputados, hay cosas que se lo dijimos a él: “Nosotros somos la Renovación, no somos el Frente de Todos, lo acompañamos, como acompañamos en su momento a Néstor, a Scioli, a Cristina, cien por ciento desde nuestro lugar, desde los Renovadores”. Por eso pedimos la boleta corta con corta, desde Nación a Fernández y en la provincia a la nuestra, con el misionerismo, la gente que está con la gente. Es una suma de energía muy fuerte lo nacional con lo provincial. Un poco toda esta cuestión histórica se traduce en el voto, aunque es la primera experiencia.
Usted decía que quería que se instale esto de la boleta corta provincial…
Es mi visión, muy a título personal. Como ciudadano, por los siglos de los siglos, quisiera que los diputados nacionales vayan junto con las elecciones provinciales. Porque es una trampa semántica, porque los diputados nacionales, son de la provincia ante la Nación, no son de la Nación. Es un error tremendo creer que son de Nación. Para que en la Nación se discutan nuestros intereses, tienen que estar nuestros diputados que nos defiendan allá, junto con los gobernadores, vicegobernador, tiene que estar en el mismo paquete. Después se elige el presidente, por supuesto que se pueden desdoblar las fechas, eso es secundario. Después está lo nacional, que pasa por el Poder Ejecutivo, por la fórmula de presidente y vice, donde sí hay un distrito único donde tu voto se junta con el de Zapala y el de Zapala con el de Pozo Azul.
¿Qué le preocupa más de este momento económico, de pobreza, educación?
Todo, es una situación muy dura, porque hasta el que tiene empleo, hablamos con Cristina cuando vino, de las estadísticas, de los índices de empleo, de desempleo. Hay un 60% de la gente empleada, pero abrís ese bloque y de ese 60% la inmensa mayoría está con miedo de perder el trabajo. Es decir, tener trabajo no es tener seguridad. Cuando estás en incertidumbre, el pequeño empresario, el medio, el bolichero, el que levanta la basura, el periodista tiene inseguridad, eso produce una angustia muy grande. El que tiene empleo está con incertidumbre, no sabe si gasta en la moto, si pone la parrilla, si festeja un cumpleaños, si va de vacaciones, se pone tenso el ambiente.
¿Qué análisis hace del Gobierno de Cambiemos?
Nosotros no hicimos juicios de valor al principio de la gestión y mantuvimos la gobernabilidad y a relación institucional. Era la primera vez que la Renovación gobernaba con un signo político nacional distinto, por eso había que cambiar los parámetros comportamentales porque éramos otro espacio político, entonces tuvimos esa frase: “Gobernabilidad, con gobernabilidad se paga”, que en términos institucionales, tomamos una posición correcta, porque en democracia así debe ser. Las veces que nos sentamos a hablar con el señor Presidente casi nunca coincidimos, pero le dije las cosas en la cara, él también lo hacía, diferíamos mucho en sus visiones de roles del Estado, su visión impositiva.
Recuerdo el cruce que no salió mucho a la luz, pero fue en Iguazú, sobre la yerba mate.
En Iguazú sí, tuvimos nuestros altercados, pero nunca quitándole gobernabilidad, porque la gente lo había votado, no había que entorpecerlo, como no nos gustaría que nos quieran entorpecer, pero con una diferencia muy grande en el medio, tan grande que es casi insalvable. Porque tener una visión distinta del Estado, te hace pretender cosas distintas. Si vos sos un Estado que cobra los impuestos y sos eficiente, hacés caminos, hacés escuelas, entonces es bienvenido, pero si no, la realidad marca que no sirve.
Ese pacto fiscal firmado hace menos de dos años, no sirvió.
El simple hecho que nos haya quitado el Fondo Federal de la Soja, fue un golpazo para los municipios que nos obligó a salir a asistir. Después hubo unas devoluciones, que eran derechos de la provincias. Pero veo un momento bisagra que fue ir al Fondo Monetario, cuando llegó lo del Fondo, hubo una urgencia del déficit cero y empieza a pasar el rastrillo a las provincias, la quita de subsidios, las tarifas de la luz.
Me dijo que no le sorprendió lo de Chile, ¿Lo sorprendieron estos resultados?
¿Los de las PASO? No. Pensaba que iba a ser menor, porque uno ve las encuestas, que decían una cosa, pero la realidad dijo otra. Pero viendo el diario del lunes, no era algo que sorprenda, por la falta de empleo, con los sectores populares que se hunden, la clase media que se hunde, no era una sorpresa.
¿Y para Misiones, cuál es el pálpito suyo para el domingo?
Creo que vamos a hacer una elección muy buena, estoy seguro de eso, lo importante es tratar de meter una gran cantidad de diputados, vemos que estamos en el camino correcto de juntar lo nacional con lo misionerista. No digo que los otros diputados sean malos, no personalizo, cualquier ciudadano que pone su nombre en una boleta, ya hace mucho, porque pones en juego tu historia, tus ganas, tenés que hablar al público, lo hacés porque tenés ganas, el simple hecho de estar en cualquier espacio, es significativo. Yo jamás fui irrespetuoso, suficiente tiene la gente con las dificultades cotidianas, como para encima ver a los políticos a los tortazos en la televisión.
El misionerismo en las raíces
Passalacqua cambia el semblante cuando recuerda los días que pasó junto a los deportistas misioneros en los Juegos Evita de Mar del Plata. Los acompañó desde su primer año de gestión y asegura que hay una “diferencia enorme” entre 2016 y este año. “En defender los colores, corear a la provincia, ir por la calle todos juntos, que van a defender al equipo de su provincia, hinchando juntos por la camiseta, sean de vóley, de fútbol, o de lo que sea, yo estuve con ellos en el almuerzo del hotel, es hermoso ver como corean, cantan, el ver al misionerismo”.
¿Lo refresca un poco ver eso, porque eso también es política?
Esto está fuera de la política partidaria, es una política más alta, de fortalecer la sociedad, de unirla, porque para mí las sociedades que progresan son las que tienen el tejido social más sólido, donde son más solidarios, donde hay hermandad, donde uno está en problemas y lo estás vos, porque sos mi hermano, por eso yo suelo hablar de la gran familia misionera. Esta gurisada, que eran 815, con un comportamiento ejemplar, son buenísimos, con algo histórico como traer 73 medallas, que antes estaban concentradas en un puñado de municipios. Y eso también tiene que ver con una política de Estado, las medallas antes se concentraban en Posadas, Oberá, Eldorado, ahora tenés de todos lados, de Andresito, de Ruiz de Montoya, de donde mires, eso tiene que ver con expandir el deporte, proteger al tejido social. De estar al lado de la gente, a través de la educación, del deporte, de un discurso amigable, presente. No se puede hacer una sociedad sin valores, no existe, las sociedades exitosas tienen valores. Uno ve los modelos soñados, el danés, el finlandés, ellos tienen un sentido de valores muy fuerte, en la escuela los machacan mucho en ser solidarios, en ser trabajadores.
Y el Estado no está ausente…
Está recontra presente. La sociedad tiene instalado que da mucho, porque sabe que el Estado también da mucho. Cuando hablamos con los que se llaman liberales, hablamos de los impuestos y les decimos ¿3% es mucho, o es poco? Dicen es mucho, pero en realidad, depende del servicio que te da el Estado. Si el Estado no te da nada, 0,1 es mucho. Depende de lo que te dan, si te dan caminos, o viviendas, lo que puedan con los recursos que tienen, sin endeudarse, de a poco, sin dejar en banda a las 50 mil familias que viven de obra pública, además de los amigos albañiles que viven de eso. Nosotros, a la nuestra, lo fuimos haciendo.
Misiones se destaca además porque es una de las pocas que no ha tomado y tiene escasa deuda pública…Hacele un reportaje a los otros gobernadores para ver cómo están. Nosotros tenemos la certeza que podemos pagar todos los salarios por mes, esa certeza genera la segunda fase económica, que se denomina de confianza, porque el policía va al verdulero y le dice fíame un kilo de papa, un día antes de fin de mes, el verdulero le va a fiar porque sabe que al otro día cobra, el verdulero va al kioskero le dice que le fíe otra cosa, le fían. Esa es la economía de confianza que aparece, porque saben que la plata va a estar, eso pasa por la vida del empleado público, del policía, el enfermero, la maestra, pero inyecta en la economía privada, real, todos los días. Eso hace que Misiones se fortalezca, porque es una de las poquísimas provincias donde se sabe que se puede pagar todos los sueldos a fin de mes. Encima si combinas, una provincia que paga en el mes, con una que no, que vive endeudada… Pero la sociedad nos empuja a eso, y no nos permitiría que nos endeudemos, porque no les gusta la idea. Porque es lo mismo que ir al prestamista para llenar la heladera y al mes no tengo la comida y no tengo la heladera. Entonces en esa los misioneros nos medimos, somos muy rigurosos, somos austeros, tratamos de ser inteligentes con los gastos, hicimos inversión muy productiva, y sobre todo no hicimos del Estado una bolsa de trabajo. En comparación de las provincias más grandes, Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires, el empleo privado es enorme, donde el Estado es un actor de tercer o cuarto lugar, acá lejos es el primero, pero sin embargo no nos llenamos de deudas. Misiones crece el 1,5% mensual a nivel demográfico, mientras me tocó gobernar a mí, la población de Misiones creció un 6%, que es una cifra gigantesca, donde el Estado tiene que acompañar con escuelas y policías. Pero nosotros crecimos en planta permanente, en contratados con relación, el 0,6, son 500 y pico de personas en toda la provincia. Básicamente la mayoría son policías, no convertimos al Estado en una bolsa de empleo. No lo hicimos. Eso lo digo con orgullo, no echamos, no hicimos una bolsa de trabajo, no paramos la obra pública, no nos dejamos endeudar, generamos los Ahora.
Por el hecho de disputar la instancia, el “Millonario” y el “Xeneize” suman U$S 1.750.000. No obstante, de pasar a la final, se asegurarán cifras mucho mayores. ¿Cuánto llevan recaudados y cuánto sumarán si clasifican al partido del próximo 23 de noviembre?
River y Boca paralizan al país (y al continente) desde las 21:30 en el Monumental. Además de jugar el Superclásico en la cancha, lo juegan en otro lugar: las arcas. Por el hecho de disputar la semifinal, embolsan U$S 1.750.000 (poco más de $100 millones). ¿Pero cuánto sumarán si pasan a la final del próximo 23 de noviembre?
En caso de disputar el partido que se jugará en Santiago de Chile, todo dependerá del resultado obtenido ante Gremio o Flamengo: de ser River o Boca subcampeón, embolsará U$S 6 millones. Pero de ganar, incorporarán la friolera de U$S 12 millones.
Hasta ahora, con los U$S 1.750.000 que corresponden por
semifinales, River y Boca suman la misma cantidad: U$S 7 millones, ya que
entraron U$S 3 millones por los tres partidos que disputaron en condición
de local en fase de grupos, U$S 1.050.000 por jugar los octavos de final y
otros U$S 1.200.000 por disputar los cuartos de final.
El ganador de las semis se asegurará, entonces, otros U$S 6 millones de piso. Además, según marcó la Conmebol antes del inicio del torneo, los clubes finalistas se quedarán con el 25% neto de la recaudación del partido que se jugará el 23 de noviembre en Santiago de Chile. El Superclásico económico también se pone en marcha…
La saga de infortunios comenzó el 5 de noviembre cuando el presidente Mauricio Macri se levantó con ganas de que haya hinchada visitante en la final superclásica de la Copa Libertadores de América. Le siguió, solícita, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich: “Si tenemos un G-20 ¿No vamos a dominar un River-Boca?”. La improvisación quedó al desnudo con un par de energúmenos tirando piedras al colectivo que trasladaba a los jugadores de Boca Juniors al estadio Monumental y un llamativo operativo de in-seguridad que obligó a suspender la segunda final y a evaluar trasladar el partido decisivo nada menos que a la Madre Patria, en el estadio del Real Madrid. El fracaso rotundo y la incapacidad de brindar seguridad en un partido únicamente con hinchada local fueron opacados sólo por la inminencia del G-20. Pero en el operativo participaron fuerzas federales y la policía de Capital Federal, que obedecen a una misma línea política. No hubo interna que explicara las fallas que parecieron guionadas para contradecir al propio Presidente. Es simbólico que con un Jefe de Estado tan futbolero, se haya perdido la posibilidad de disfrutar de un superclásico, el último atractivo del devaluado fútbol argentino, caso único en el mundo en donde no se permite el ingreso de la hinchada rival. Es mucho más simbólico que el mítico superclásico que coronaba una inédita Copa Libertadores de América, deba mudarse a España, contradiciendo el nombre mismo de la competencia y tirando a la basura más de 200 años de historia. La pelota se mancha. “Madrid es un poquito Sudamérica”, tiró Gianni Infantino, el mandamás de la FIFA para coronar el bochorno. El misionero Ramón Puerta acotó algo parecido: “Es el lugar ideal, es una capital del mundo del fútbol”, dijo el embajador sin ninguna lectura histórica. Solo la llegada de los líderes mundiales del G-20 tapó, un poco, el papelón. Con la cumbre sí tuvo razón la ministra de Seguridad: no hubo caos ni violencia. Si mucha desprolijidad que se fue corrigiendo con el paso de las horas. Pero las primeras horas pasaron al borde de la vergüenza: ante la ausencia de autoridades argentinas, el francés Emannuel Macron fue recibido por un operario del aeropuerto con chaleco amarillo (en Francia está en marcha una extensa protesta de “chalecos amarillos” en contra del aumento del combustible del 15 por ciento y una reforma laboral que se quiere imitar en la Argentina). Después la banda militar saludó a un funcionario chino de tercera línea en vez de Xi Jinping, que fue recibido por Gerardo Morales ante la ausencia de otra autoridad nacional. Gabriela Michetti aportó un pésimo francés y un peor italiano y quedó para el recuerdo al quejarse porque “lamentablemente” debía irse a la asunción del presidente de México. Un poco más grave, en términos diplomáticos, fue haber quedado en medio de la guerra comercial entre Estados Unidos y China al consentir Macri una declaración de Donald Trump que cuestionaba la economía “depredadora” del gigante asiático. Trump fue el preferido del argentino (no se puede decir que haya habido reciprocidad) mientras duró la cumbre. Quizás por la vieja amistad que los une, pero nadie recibió más atenciones. Vladimir Putin, Xi Jinping, Macron, el canadiense James Trudeau y hasta la amiga de la casa, Christine Lagarde, pasaron a un segundo plano. A cambio, el platinado prometió seguir respaldando “reformas económicas” y presionó para que Argentina compre material militar. Antes de irse Trump y Xi Jinping cenaron a solas. Quizás aflojen las tensiones de la guerra comercial. El riesgo argentino habrá sido innecesario, pero en la diplomacia, la memoria es larga. Se verá. La cumbre del G-20 culminó sin grandes títulos. El consenso alcanzado en la declaración es un compendio de buenas intenciones al que nadie puede oponerse. El éxito de la cumbre no modificará la percepción que tienen los argentinos del mal momento económico que tiene a la inflación, la pobreza y el desempleo como principales preocupaciones. Pero el Gobierno no parece conmoverse: esta semana anunció un aumento de los peajes para “compensar” a las concesionarias por la devaluación y el menor tránsito como consecuencia de los tarifazos en combustible. En Misiones, por caso, para ir y volver de Posadas a Iguazú, habrá que pagar 200 pesos. Lejos de la mirada puesta en Buenos Aires, para Latinoamérica, los cambios más trascendentales pueden venir de México, donde asumió Andrés Manuel López Obrador como la excepción a la ola política que recorre el continente. El izquierdista asumió con un nuevo Nafta que se selló en Argentina y que será uno de los pilares del neodesarrollismo nacional que defiende. También hay que prestarle atención a Brasil, donde en un mes asumirá Jair Bolsonaro, que ya está negociando acuerdos mucho más potentes con Estados Unidos que los que puede imaginar la Argentina. El el asesor de Seguridad Nacional de la Presidencia de Estados Unidos, John Bolton ya viajó a Brasil y el hijo del presidente electo estuvo en el país del norte diagramando “acuerdos de cooperación”. Brasil, para Misiones, tiene una relevancia mucho mayor que cualquier pacto lejano que pueda trabar la Argentina con alguno de los países del G-20. Por caso, el gigante vecino está dispuesto a financiar la construcción del anhelado puente San Javier-Porto Xavier, que Argentina no está en condiciones de costear. El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, dejó claro que Misiones está lejos en el mapa geopolítico de las inversiones. “No podemos hacer todo junto”, respondió, escueto, cuando le preguntaron por la reactivación del tren de cargas entre Posadas y Buenos Aires. No vale la pregunta sobre qué significa el todo. El plan Belgrano siquiera comenzó. Misiones puede sacar mejor provecho de la cercanía. El gobernador electo del estado de Paraná, Ratinho Junior anunció a Guto Silva, como jefe de la “Casa Civil”, una especie de jefatura de gabinete que coordina las relaciones con los demás poderes y representa al Estado. Silva conoce a pleno las relaciones de frontera y es casi un misionero por adopción: está realizando un doctorado en Gestión de Negocios en la Universidad Nacional de Misiones. Las relaciones bilaterales que está tejiendo el gobernador Hugo Passalacqua, se enriquecerán mucho más. En cambio, la Nación ratificó que Misiones no merece ninguna mirada especial por su zona de frontera. El ministro de Producción, Dante Sica comparte la mirada con su antecesor: con el dólar alto, las asimetrías se esfumaron y no hay nada de qué quejarse. Claramente, los empresarios no opinan lo mismo. Basta una rápida lectura a los documentos entregados por la Confederación Económica de Misiones y la Cámara de Comercio de Posadas, para percibir que la economía local no puede depender únicamente de un tipo de cambio alto y requiere sí de una mirada particular, que, paradójicamente, no llegó a pesar de que el propio Gobierno promovió herramientas como el artículo 10 de la ley Pymes. “Nos podemos dar un tiempo para analizar el artículo 10 de la ley Pymes”, respondió Sica al analizar el tipo de cambio. “Es patético que un ministro de Producción diga eso: Jugamos con el dólar hasta que se la banque y cuando aumente tanto, veremos qué hacemos. Demuestra incapacidad. Si es el ministro de Producción te tendría que dar herramientas para producir”, disparó enojado un referente comercial posadeño. La queja se extiende a todo el circuito comercial, especialmente en Posadas. No existe recuperación vía tipo de cambio porque la inflación empató rápidamente lo ganado por devaluación. Salarios, impuestos y bono de fin de año completan el combo. Los empresarios advierten que no se recuperó competitividad. “La Argentina es cara”, dijo Cristina Ryndycz, gerente de la Asociación de Productores, Industriales y Comerciantes Forestales de Misiones. La madera es uno de los sectores más golpeados por la caída en las exportaciones provinciales, de la que solo se “salva” la yerba mate, con un crecimiento del 26 por ciento, en contraste con una depresión promedio de 4,8. Es cierto que el dólar más alto compensa, pero los exportadores pierden por retenciones y costos salariales, además de los de producción, más altos por efecto inflación. La mirada sesgada de la Nación respecto a Misiones contrasta con los esfuerzos locales por potenciar la economía. El Gobierno vuelca enormes recursos a través de diversos planes y gestiona dinero que no se consigue en el mercado. Por eso cayó tan mal en la Rosadita que algunos comerciantes ejercieran una competencia desleal y se aprovecharan de sus clientes a costa del esfuerzo financiero del Gobierno y el banco Macro. Hubo dos excluidos del Ahora Misiones y podría haber varios más durante la semana. La explicación es sencilla: el Ahora Misiones es un programa que tiene tres aportes: el comercio aporta 10% de descuento real. Los bancos y la Provincia otro 5% de descuento real más el costo financiero para que se pueda comprar en hasta 12 cuotas sin intereses. Por ejemplo una computadora que sale 15000 pesos a precio contado debe dar un descuento de 1500 real que la tarjeta le debita al comercio y acredita en el resumen al comprador. Si un comercio dice que hace descuento por pago efectivo por esa computadora vendiéndola a 13500 de contado y a 15000 con el Ahora Misiones, en realidad lo que está haciendo es recargar al precio de lista los 1500 para que cuando la tarjeta le debite el comercio no tenga costo alguno y no termina aportando ningún esfuerzo al programa. Es posible que el rubro informática y electrodomésticos tengan menos margen de ganancia, pero en el Gobierno consideran que debieron plantear algún Ahora especial para su rubro, con menos porcentaje de descuento (menos aporte del comercio) y a su vez menos esfuerzo de los bancos y Provincia (para ser equitativos y proporcionados con los otros rubros que aportan más y reciben más) La exclusión no es definitiva. Pero los comercios del rubro si sabían que no podían cumplir debieron hacerlo explícito. De todos modos, el árbol no tapará el bosque. La decisión es fortalecer el financiamiento público de la economía real, como lo demuestra la nueva línea de financiamiento para el sector forestal, presentada por el Fondo de Misiones. Asimismo, a mediados de la semana vendrá Juan José Ciácera, el presidente del Consejo Federal de Inversiones, con una cartera de créditos para la pequeña industria tealera, contenida en la CEM, con 200 mil dólares cada una. Los préstamos fueron gestionados por el ministro del Agro, José Luis Garay, a pedido del Gobernador. La tasa Libor es inexistente en comparación con el 5 por ciento en dólares que cotiza el mercado financiero. El Gobierno entiende que, más allá de las consideraciones de rigor –“En esta aventura en la que estamos los argentinos, cuanto más juntos estemos, mejor”, reflexionó el Gobernador durante la visita de Sica-, no se puede esperar demasiado de la Nación. Es momento de fortalecer el misionerismo, cuyos símbolos se celebraron esta semana. El yaguareté y el general Andresito fueron homenajeados como propia identidad. “Estamos festejando el cumpleaños de Andresito. ¿Y por qué tanta dimensión con Andresito? Porque era un hombre de lucha, un bravo, un guerrero; tenía noción de Patria y trabajó por su Patria chica que era Misiones y por el resto de la Patria después”, destacó Passalacqua desde San José. “Tanto Andresito como Artigas eran Blandengues. En un intercambio de cartas, Artigas le decía: ‘mandá desde el amor, mandá cerquita de la gente’…por eso mi corazón y el corazón de ustedes no pueden estar sino en la cercanía del corazón de Andrés Guacurarí; él nos enseñó lo que es estar cerca de la gente, él nos enseñó lo que es gobernar desde el amor, no desde el temor, el terror o el castigo”, continuó. Finalmente, volvió al intercambio epistolar entre Artigas y Andresito: “Dijo una cosa que para mí sella definitivamente el proyecto histórico de Andrés Guacurarí. Le dice Artigas en una carta a Andresito ‘no te rindas ante nadie’….y ¿saben qué?…tal vez la mayoría de la gente no tenga esta frase en la cabeza, pero la tienen en el corazón, porque el misionero no se rinde ante nadie y ante nada, no importa si vienen tormentas, huracanes o viento de frente…siempre vamos a ir hacia adelante”. El modelo misionero es seguido atentamente por quienes intentan recrear una vía por encima de la grieta. La convivencia entre peronistas, radicales e independientes en un gobierno que tiene quince años y que hace gala del respeto a la oposición que se expresa desde la Legislatura, donde sus proyectos son analizados y aprobados, no es algo que se encuentre a menudo en la política nacional que busca romper con el péndulo Macri-Cristina, hoy por hoy excluyentes protagonistas electorales. Pero una tercera vía es posible, con la participación de diversos expresiones políticas -como las religiosas, reveló el diputado nacional Ricardo Wellbach, uno de los referentes del diálogo fluido entre los principales actores nacionales con los dirigentes misioneros-. No es casual que Juan Manuel Urtubey, Felipe Solá y Sergio Massa, tengan en su agenda visitas a Misiones.