Vely: “El que crea que las asimetrías afectan solo al comercio se equivoca”
“La esperanza es lo último que se pierde”. Esa pareciera ser la frase que empuja las ganas de los comerciantes, golpeados por una crisis que ya lleva un año y medio, y que los tiene de espectadores de largas e interminables filas en el puente hacia Encarnación. En ese contexto, Fernando Vely, presidente de la Cámara de Comercio, se reparte el tiempo entre los reclamos que hace en Buenos Aires, calmar los ánimos de quienes piensan en medidas más duras para conseguir resultados, y su propia empresa, que tampoco escapa a la realidad. A sus 37 años, enfrenta su primera crisis ya que se inició en el negocio en 2005.
Pese a la crisis, también tiene una mirada de largo plazo que lo empuja a seguir invirtiendo. Hace tres meses abrió D’Espacio, una casa de ropas con amplia variedad de marcas y un servicio que busca seducir al cliente: café, masas, wifi gratuito son parte de la opción, que incluye algunos precios idénticos a los que ofrecen las marcas en Buenos Aires.
En una entrevista con Economis, el comerciante aseguró que aunque tiene locales que ya están en condiciones de ser cerrados porque trabajan a pérdida, mientras pueda los va a sostener para no dejar sin empleo a las 40 familias que dependen de él.
“Tengo poco tiempo, la clave es la familia, yo tengo la posibilidad de trabajar con mi mujer, y con eso una estabilidad emocional y familiar que es lo que te permite hacer varias cosas al mismo tiempo”, confiesa.
Aunque integra una de las familias más tradicionales en el rubro comercial, Vely prefirió separarse de los negocios de su suegro, Rubén Jantzon.
“En 2010 mi esposa – Cecilia – se vino a trabajar conmigo, yo tenía tres comercios, a ella le regalaron un negocio que es Mistral, y ahí pasamos a tener cuatro y a trabajar juntos. La base es la familia, el apoyo de mi esposa, y los grupos de trabajo”, confiesa.
Preguntarte cómo están los comerciantes es un poco redundante, pero más allá de tu rol de presidente de la Cámara, en tu visión de empresario, por los puestos de trabajo, ¿Cómo te sentís en este contexto?
Se pudo haber notado un leve repunte en las ventas de julio, pero la realidad es que venimos igual que en el 2016, no notamos una mejora. Nuestro consumo en un gran porcentaje se está dando en Paraguay, así que mientras esa situación persista todo seguirá en el mismo camino.
¿Cómo se sigue adelante con los comercios, con qué empuje?
Nosotros no vamos a bajar los brazos. Cuando vino Mauricio Macri hablamos con dirigentes del PRO, le planteamos que la situación no da para más, estábamos preocupados porque cuando vinieron los funcionarios nacionales minimizaron la problemática, pero ellos nos dijeron que están al tanto, y que se va a organizar una reunión en agosto en el Ministerio de la Producción con todos los sectores, la Provincia, el Municipio y los comerciantes y vamos a ver cuál es la mejor solución. Ellos también esperan un compromiso por parte de la Provincia acompañando con algún gesto, reducción impositiva. A mí me parece bien, pero les dije que se pongan de acuerdo de antemano sobre qué va a ceder cada uno para no caer en una suerte de “espero que propones vos, para dar yo después” y que nos deje a nosotros en el medio.
¿Ustedes hicieron alguna propuesta?
Sí, propusimos una rebaja impositiva de Nación, del IVA, un 10,5 por ciento que reduciría nuestro precio al público. Por otro lado, una reducción de las cargas sociales, algo que vemos vital, para la generación de puestos de trabajo y para bajar los costos. No podemos estar pagando las mismas cargas sociales en Misiones, que un empleado en Capital Federal. Pagamos un 50 por ciento de lo que pagás de recibo de sueldo. Y tomarse el ciento por ciento de lo que se pueda tomar del decreto 8/14, que permite tomar un porcentaje de las cargas sociales para deducir de IVA. Hoy nos permiten el 9 y pico, nosotros queremos llevarlo al 18 por ciento de las cargas sociales.
¿Estas herramientas van a lograr que el comercio sea competitivo?
No. Nosotros tenemos claro una cosa, nunca vamos a poder ser como Encarnación, es un tema estructural. El nivel impositivo de Paraguay está entre los más bajos del mundo. Tenemos que lograr sí que se apruebe una zona aduanera especial para Misiones. Esa es para mí la solución de fondo, eso nos eximiría de impuestos y ahí sí lograríamos ser competitivos, y poder desarrollarnos. Tenemos 90 por ciento de frontera con otros países.
¿Qué explicación les dan los legisladores de Cambiemos de por qué no se reglamentó el artículo 10 de la Ley Pyme?
Nosotros estuvimos en la redacción de ese artículo, lo propuso la Cámara de Comercio. ¿Por qué no se reglamentó? Es un misterio, no sabemos.
¿Creen que en esta oportunidad sí van a lograr algo de lo que reclaman?
La esperanza es lo último que se pierde. Lo que se va perdiendo con el tiempo es la paciencia del sector comercial. El comerciante está pidiendo competitividad y en este país es difícil competir con Encarnación que tiene alto nivel de informalidad. Competir es cada vez más difícil y eso afecta al sector privado. Y el que crea que el cierre de comercio afecta solo al comercio se equivoca, porque comercio que cierra despide a empleados, a un contador, un abogado, deja de recaudar el municipio que cuenta en un 70 por ciento de su recaudación con la tasa de comercio, de a poco la economía se achica. Tenemos que buscar fortalecer al sector privado.
De reunión en reunión por los preparativos de una nueva edición del Black Friday, Vely recuerda que comenzó en el rubro con una peluquería. La peluquería del Posadas Plaza Shopping, el único local que se mantuvo abierto desde los comienzos, en el año 2005.
Sin entender de tijeras, tendencias o colorimetría, se asoció a un extrovertido peluquero que vivía en Buenos Aires, y show mediante lograron imponer el lugar. Tiempo después pasó a manos de quien es el propietario hasta hoy.
“Tengo alrededor de 40 empleados, en nueve locales, de los cuales al menos dos generan solo pérdida y están en condiciones de ser cerrados pero los sostengo igual. Acá la mayoría de las empresas son familiares, como toda empresa familiar se genera un vínculo entre el empleador y el empleado, y dejar a alguien en la calle…, nosotros no somos estas grandes multinacionales en donde las personas pasan a ser un número. Nosotros somos un equipo que pasamos muchísimas horas y buscamos sostener el trabajo hasta el final”, define como declaración de principios.
Si hoy viene alguien y te pregunta cómo está todo para invertir, ¿Qué le decís?
– Eso hoy no está pasando. Hoy Posadas no resulta un mercado atractivo para invertir. Y esto no es de ahora. A nosotros la inflación nos viene afectando desde hace por lo menos cinco años, nos fue dejando fuera de competencia.
Sos joven, y te tocó una de las peores etapas en la presidencia de la Cámara. ¿Qué te dicen los comerciantes más experimentados sobre la crisis, habiendo pasado otras?
Esta es la primera crisis que me toca porque comencé con la actividad en 2005. Alguien me dijo que todas las crisis tienen sus particularidades, en algún momento esto va a pasar, pero nosotros tenemos que tomar medidas con un proyecto a largo plazo.