Posadas: plantarán más de 150 árboles en Villa Sarita y Aguacates
El municipio y vecinos plantarán más de 150 árboles en Villa Sarita y Aguacates
La Municipalidad de Posadas lleva adelante una importante iniciativa que consiste en la plantación de árboles en los barrios Villa Sarita y Aguacates, en donde participa la comunidad vecinal de ambos sectores. La misma surge a raíz de los trabajos de extracción de los restos de árboles que quedaron plantados en las cazuelas y son necesarios removerlos para repoblar con ejemplares nuevos.
En consonancia con esta planificación estratégica en pos de repoblar el casco urbano con distintas especies, se ha planificado la implantación de lapachos, jacarandás y árboles frutales, variedades de flora que demostraron ser adaptables al ecosistema característico de estos tradicionales barrios de la capital provincial. Es menester destacar que cada operación se ejecutará con riguroso apego a los criterios técnicos y normativas establecidas.
El objetivo central es la plantación de poco más de 150 árboles, cuyo propósito no solo consiste en generar espacios propicios para el bienestar de los residentes, sino también en gestar un profundo sentimiento de arraigo y responsabilidad compartida entre los vecinos. Tal confluencia de esfuerzos consolida la cohesión comunitaria y forja un lazo de corresponsabilidad que fortalecerá a la comunidad en su conjunto.
Espacio de sensibilización sobre la correcta plantación
Otro de los pilares fundamentales de esta iniciativa radica en la crucial concientización sobre la creación de cazuelas, término empleado para describir el sitio destinado a albergar a los árboles.
La singularidad de estas estructuras yace en la necesidad de construirlas con dimensiones exactas de 90 por 90 centímetros, manteniendo una distancia de 70 centímetros respecto al bordillo de la calle, y a una distancia de 2 metros de la línea de propiedad municipal. Además, es imperativo que se hallen al mismo nivel que la acera circundante, puesto que cualquier irregularidad podría representar un riesgo para los peatones, causar daños a las puertas de los vehículos y obstruir el flujo del agua de lluvia que se acumula en la vereda, dificultando así un aprovechamiento adecuado del recurso hídrico.
En paralelo, la disposición de estas cazuelas debe mantener un espacio mínimo de 8 metros entre cada una de ellas, contribuyendo a la organización y pulcritud de las veredas de manera armoniosa.
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