Resistencia a la igualdad de género, liderazgo femenino y fútbol
En el discurso social hubo reacciones opuestas al movimiento que busca ampliar derechos, visibilizar la desigualdad y sobre todo, erradicar la violencia contra las mujeres por su condición de género. Por ejemplo:
“A los varones también los matan”.
“Las mujeres deberían…”.
“Los puestos se ganan por el mérito, no por el género”.
“Vamos a tener que pedir paridad para nosotros”.
Natalia Gimenez, concejal de Posadas, fue una de las que logró instalar la agenda de la equidad de género en el ámbito político-institucional de Posadas. Desde el rol político, le preguntamos como analiza este discurso que apareció como reacción.
“Se podría dar una respuesta bien conceptual, ligada a lo antropológico, sobre cómo se distribuye el poder, podríamos hacer eso, pero no sería ejemplificador. Pensemos por qué tuvo que crearse en nuestro sistema penal una carátula que sea femicidio. El Estado argentino tuvo que crear esa carátula porque los números eran escalofriantes. Cuando uno analiza los últimos datos de femicidios en Argentina, la violencia existe en todos los niveles de la sociedad, porque las relaciones de poder generan violencia en la forma en que nuestra sociedad se organiza, el problema es cuando esa violencia es ejercida de un género hacia otro, los varones no mueren porque los matan las mujeres por el sólo hecho de ser varones. Terminamos teniendo datos de jóvenes que mueren con 20 años porque ingresaron al delito y ¿quién los mató?, los mató otro varón. Pero los datos de la violencia hacia las mujeres existen, son concretos y son reales por eso se creó la carátula de femicidio. Las matan porque hay un sistema que discrimina, es decir, que cuando en la desigualdad la mujer tiene menos derechos o la mujer es cosificada; entonces por eso el varón considera que es propiedad, como una cosa, como este lápiz, este portalápiz. ‘Es mío sino se queda acá yo me enojo y si insiste en salir de acá yo me enojo más hasta que lo tiro, lo rompo y no lo uso más porque es mío, es de mi propiedad, es una cosa’. No tiene valor de persona, así interpreta nuestro sistema la desigualdad entre mujeres y varones. Hubo que crear una carátula porque el análisis de los datos era escalofriante. Y qué pasa, cuando estos temas surgen en la sociedad, el sistema reacciona.
Cuando un paradigma entra en crisis, inicia sus resistencias automáticamente. El hecho de que del 2015 a esta parte, haya aumentado el número de femicidios tiene que ver con el sistema que está en crisis ¿Por qué el sistema entra en crisis? Porque la chica del B° A4 que empieza a sentir esta agenda, (no la que está en los medios, sino la que se empieza a sentir en la sociedad, porque cuando un paradigma entra en quiebre se empieza a sentir en todos los lados). Cuando la chica de la A4 empieza a decir “por qué yo no puedo salir con mis amigas un jueves si él sale todos los viernes con sus amigos y se le ocurre decir: che, yo voy a salir el jueves con mis amigas”, de primeras es no, de segunda es cachetazo, de tercera es golpes y así empieza. Entonces cuando ella no sólo es quiere salir con sus amigas sino que decide terminar con esa relación, ahí es donde empieza la violencia real y concreta, y termina con un femicidio, porque ella es de su propiedad, ella va a hacer lo que él defina. Los femicidas en general actúan porque sienten que es la mujer es propiedad de él: “es mía o de nadie”. Hay reacciones más sutiles, “che, ahora vamos a tener que pedir paridad para nosotros”, esos comentarios “jocosos”, si querés, son el sistema reaccionando a estos cambios. Es la resistencia de un sistema, este sistema es el patriarcal, es milenario. De cómo se organizó la sociedad. Desde que el hombre designó a la mujer en la casa. ¿Por qué?, porque reproduce. Puede reproducir y cuidar, nada más. El hombre produce, es productor. Sale de la casa, el ámbito de lo público es del hombre. Ese esquema genera esterotipos: la mujer cuida, niños, ancianos, enfermos, el varón sale y produce. Entonces cuando vos rompes con esa estructura, que además es aprehendida, se producen reacciones.
HACIA UN CAMBIO CULTURAL: EL LIDERAZGO FEMENINO
R: Decías que el máximo desafío es un cambio cultural. ¿Desde la política cómo se puede impulsar ese cambio cultural?
NG: Bueno, la política siempre es quien da respuestas más inmediatas, a estas cuestiones y un ejemplo es la Ley de Paridad de Género. En la política es uno de los campos donde los cambios se dan con mayor rapidez que en otros. Hay sectores como el empresarial, el deportivo, el sindical en donde todavía falta mucho por avanzar. Tenemos que trabajar políticas públicas para que las mujeres, las niñas/los niños y los adolescentes puedan proyectarse hacia el futuro en una sociedad distinta y más igualitaria. Para eso debemos fomentar los liderazgos femeninos, en diferentes sectores, no solamente en la política, en el deporte, en el empresariado, en el sindicalismo, porque las trayectorias en que se piensan las niñas y niños tiene que ver con qué le mostramos. Yo siempre marco el fútbol porque es uno de los deportes más populares en la Argentina y donde más ídolos surgen, las niñas deberían poder tener una mujer en quién verse visualizadas. Los varones, seguro encuentran a Messi cuando hablan de fútbol y siempre proyectan ser Messi, bueno las mujeres deberíamos tener la posibilidad, creo que tenemos en la Argentina jugadoras de fútbol que nos permiten soñar, como Maca Sánchez. En Misiones, Posadas tenemos dos jugadoras importantes: Yamila Rodríguez y Milagros Otazú que están en la Selección Nacional; bueno, esos liderazgos femeninos son los que tenemos que trabajar como políticas públicas, pero también como sociedad para que las proyecciones que hagan niños y niñas de sus futuros sean diferentes a las que tenemos hoy. Romper con los estereotipos. Y el fútbol es una herramienta para romper los estereotipos en el sentido que no hay deportes para mujeres y deportes para varones. Los deportes están para ser practicados y quien guste del fútbol pueda jugarlo y esta es también una manera de ir desandando las naturalizaciones que nuestro sistema nos impone diariamente.
COMISIÓN DE GÉNERO Y EL DIGESTO DE GÉNERO
Cuando asumiste eras la única mujer concejal y viniste además con una agenda de género ¿cómo fue ese proceso?
NG: En el 2015 cuando asumo, de 14 concejales, era la única mujer. Sentí que ese era un dato para analizar y volcarlo a la gestión de concejal. También hay que marcar que, en la Argentina, en Misiones, en Posadas surgía en esos tiempos, en el 2015, uno de los movimientos sociales más importantes y el movimiento de feminista de “Ni una menos”, que llevó masividad a las calles y que un poco puso la agenda y lo expuso públicamente. Tanto los medios de comunicación como los organismos de Estado, los poderes legislativos empezaron a atender esta demanda, que era social, para trasladarla a la normativa, a las leyes. Pasó en el Congreso de la Nación, en la Cámara de Diputados de nuestra provincia y también en el Concejo Deliberante de Posadas, así que un poco este feedback entre representado y representante.
Lo que hicimos en el Concejo Deliberante fue plantearnos una agenda de género, creo que, unas de las cuestiones que marcan casi una línea de quiebre es la creación de la Comisión Permanente de Equidad de Género en el Concejo Deliberante que es una herramienta institucional. La comisión es permanente y permite una agenda institucional.
-¿Hubo resistencia a la creación de esa comisión?
NG: Bueno, fundamentalmente es la comprensión de esta agenda. Creo que quienes estamos en el tema y analizamos que las cuestiones ligadas a las desigualdades entre varones y mujeres son culturales y por lo tanto naturalizadas por todos nosotros y nosotras, entonces, lo difícil suele ser la compresión de qué hablamos cuando hablamos de la agenda de género. Pero no porque no se quiera comprender, sino porque la agenda implicaba entender cuestiones de concepto, por supuesto que esos son los obstáculos más importantes y después los obstáculos también políticos que tienen todos los temas del concejo. Las mismas discusiones enriquecen también.
La creación de la Comisión de Equidad de Género también trajo consigo la creación del Parlamento Municipal de la Mujer y ese es un espacio de diálogo entre las ciudadanas posadeñas, y en ese diálogo es donde también el Concejo Deliberante saca mucho de bueno porque nos permite de nuevo reforzar la democracia participativa. Es decir, tener constante relación con quiénes representamos; eso fortaleció el trabajo en el Concejo.
-También en la comisión de género se está trabajando un proyecto de ciudad segura
NG: Es un proyecto que presenté, pero surge del Parlamento de la Mujer. Lo trajo al Concejo una parlamentaria, que es Ilaria Cappellari. Está ahora en el circuito legislativo.
Hay algunas cuestiones que no son tan visibles para los ciudadanos, pero generamos un digesto de género que es una herramienta en la cual están incluidas todas las normativas internacionales, nacionales, provinciales, municipales sobre las normativas relacionadas a los derechos de las mujeres. También el Concejo tiene una rama específica, que es la rama de género. Cuando uno busca en el digesto las normativas se dividen por ramas: tránsito, obra pública, bueno, hay una que es género también. Es decir, el de la ciudad de Posadas, es uno de los Concejo vanguardia en la provincia de Misiones y me atrevo a decir en la Argentina. Hay muchos temas que pueden debatirse y tratarse con la ciudadanía porque existe una comisión de género. Los últimos hechos de violencia que sufrieron las estudiantes en el barrio El Palomar, bueno, todo ese tema nosotros los estamos trabajando en la Comisión de Equidad con organizaciones políticas, feministas, con estudiantiles. Además de tratar los temas urgentes, las políticas públicas tienen que formularse para trabajar el cambio social, porque vamos a cortar brechas de desigualdad entre varones y mujeres o la violencia, si trabajamos en el cambio social y cultural.