El cuidado del medio ambiente, una prioridad para la actividad yerbatera
Más de 120 participantes, entre productores, alumnos de diferentes terciarios y universitarios, y profesionales fue el positivo saldo que dejó la jornada de capacitación denominada “De yerba mate convencional a orgánica, perspectivas para el cambio”, que fue organizada por el Servicio de Extensión Yerbatero (SEY) del INYM y se desarrolló el viernes 15 de septiembre en el Establecimiento La Negrita, de la firma La Cachuera SA, ubicada en Gobernador Virasoro, Corrientes.
“Estamos hablando de yerba mate, que es un alimento y el mundo demanda hoy, precisamente, productos agroecológicos u orgánicos; como el caso que estamos observando”, explicó el director del INYM por el sector Producción, Nelson Dalcolmo, quien estuvo acompañado por los directores Marcelo Hacklander, Fernando Haddad y Antonio França; también representantes del sector de la producción.
Las actividades comenzaron bien temprano, a las 7 de la mañana y luego se formaron grupos que fueron rotando en las cuatro postas montadas en distintos puntos del yerbal, donde los técnicos del SEY junto al responsable de Producción Primaria de la empresa, el ingeniero agrónomo Alejandro Nahirñak, abordaron los siguientes temas: a) Manejo de Yerba mate orgánica, generalidades, b) Manejo integrado de plagas y enfermedades (malezas, enfermedades e insectos) en yerba mate orgánica, c) Manejo de suelos, abonado y cubiertas verdes en yerbales orgánicos y d) Manejo de planta. Fisiología de la yerba mate. Crecimiento y etapas críticas para definir Rendimientos.
“Pensamos una jornada en la cual ver todo lo relacionado al manejo orgánico, buscando un equilibrio en el ambiente productivo y explicando cuáles son los pasos para pasar de lo convencional a lo orgánico; es decir, sin el uso de agroquímicos”, comentó el ingeniero agrónomo Matías Skromeda, uno de los técnicos del SEY que trabaja junto a los productores de la zona sur de Misiones y el nordeste de Corrientes.
En ese sentido añadió que, si bien tiene sus particularidades, la alternativa orgánica es una buena opción ya que – explicó- “se puede llevar adelante en grandes superficies y cuando se llevan a una más pequeña suele resultar más fácil para desarrollarla en tiempo y forma”.
Para Dalcolmo este aspecto resulta muy significativo, debido a que puede implicar una mejora en los ingresos de los productores. “Ellos deben ser conscientes que, al ser una producción distinta, tenemos que tratar de lograr alguna remuneración diferente porque los costos son mayores que en la producción convencional. Es lo que conviene, sobre todo a los pequeños productores y estamos convencidos que tenemos que trabajar con la agroecología y la producción orgánica, porque el mundo está pidiendo este tipo de alimentos”, reiteró.
Cerca del mediodía, los participantes volvieron al punto de partida y realizaron una puesta en común de las anotaciones tomadas en cada una de las paradas, para luego desarrollar un taller de intercambio y elaborar las conclusiones.
Los productores habían arribado de distintos puntos de Misiones como Colonia Alicia, Jardín América, San Ignacio, Azara; Apóstoles, San José y otras localidades del Sur de Misiones; como así también de las localidades correntinas de Garaví, Garruchos, Gobernador Virasoro, Liebig y San Carlos. Incluso una comitiva llegó desde Paraguay para participar de la jornada.
“Estamos agradecido con el INYM por hacernos participar y sorprendidos por el interés de los productores y por esta gran concurrencia”, expresó el ingeniero Nahirñak, para luego brindar detalles de cómo la empresa a incursionó en la yerba mate orgánica.
“La idea fue buscar una alternativa, tanto de mercado como de producto, en el marco de nuestra misión de ser amigables con el medioambiente. Y justamente la producción orgánica incluye eso: un manejo sustentable, mermar el uso de agroquímicos, uso de materia orgánica, manejo integrado de plagas; entre otros aspectos”, relató.
La producción orgánica de la empresa involucra 81 hectáreas de yerba mate, las cuales tuvieron una transición de tres años para pasar de producción convencional a estar bajo certificación. El año pasado pudieron llegar a las góndolas con el paquete de yerba mate certificada como orgánica.
“Los desafíos que enfrentamos en los primeros años fueron muchos; por ejemplo, cómo actuar en caso de ataques de plagas, pero hoy tenemos muchos productos habilitados por el SENASA, lo cual hace que la parte productiva y de servicios no sea una limitante”, detalló.
Al igual que todos los participantes, Nahirñak destacó la importancia del intercambio y esta modalidad de “puertas abiertas” que promueve el INYM y que es acompañada por las empresas, cooperativas, emprendedores y productores que no tienen inconveniente en compartir sus conocimientos.
“El balance es sumamente positivo”, enfatizó Dalcolmo, para luego recordar que, desde la creación del SEY, los técnicos del INYM están permanentemente acompañando a los productores, en sus chacras. “Esto quiere decir – subrayó- que logramos el objetivo, que conformar el Servicio de Extensión Yerbatero y tener a los técnicos al lado de los productores fue una decisión muy positiva que tomó el Directorio, a la cabeza al presidente “Juanjo” Szychowski”.