
Primer acercamiento entre producción e industria y pedido de bajar porcentaje de palo en la yerba
Por primera vez desde la desregulación impuesta por el DNU del presidente Javier Milei, se sentaron en una misma mesa de negociación la industria yerbatera y los productores, convocados por el Gobierno de Misiones, en busca de un acercamiento en materia de precios y otros consensos que hagan frente al nuevo escenario como consecuencia de las políticas nacionales. Como era de esperar, no hubo consenso en la definición de un precio, pero sí coincidencia en que el desplome del valor de la materia prima, obedece a la desregulación del mercado. Sin embargo, se acordó -sin la firma de la industria- reclamar en conjunto a la Nación por “un precio justo”, en base a los datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate, con un costo de producción estimado en 352 pesos y un valor final de 450/460 pesos, 200 pesos más de lo que se está pagando actualmente.
Sí hubo acuerdo en elevar un petitorio a Nación para fortalecer la demanda de hoja verde: modificar el Código Alimentario Argentino para reducir el porcentaje de de palos en la yerba del 35 % al 25 % y que el porcentaje de hierbas en la yerba compuesta se reduzca del 40 % al 10 %. Esta modificación apunta a garantizar una mayor proporción de hoja, lo que mejoraría la calidad del producto final que se comercializa en el mercado interno y de exportación.
Asimismo, el ministro del Agro y la Producción de Misiones convocó a una reunión urgente para el próximo lunes a las 17 al presidente de la Cámara de Molineros, Víctor Saguier, para intentar definir el valor de la materia prima para el inicio de la cosecha y fomentar el consenso dentro de la cadena productiva. Desde la cartera agropecuaria provincial se enfatizó la necesidad de actuar con rapidez para garantizar que la cosecha 2025 transcurra sin contratiempos, protegiendo tanto a los productores como a la economía regional. La reunión contará con representantes del sector para debatir medidas que permitan dar previsibilidad a la actividad en un contexto de incertidumbre y desregulación.
Es la primera vez desde diciembre de 2023 que se sentaron a la misma mesa todos los eslabones de la cadena productiva. El anfitrión fue el ministro del Agro, Facundo Sartori. Por el lado de las asociaciones, estuvieron presentes Hugo Sand (APAM), Salvador Torres (MAM), Juan Justo Rafael Merguez, en representación de la Asociación de Secaderos. En cuanto a la representación política, asistieron los diputados provinciales Juan José Szychowski y Cristian Castro, junto con los funcionarios del Ministerio del Agro y la Producción, Arabela Soker y Federico Miravet. Desde el sector cooperativo, Gerardo Vallejos -a cargo del INYM- participó en nombre de las cooperativas yerbateras, mientras que por la Provincia estuvo Ricardo Maciel. También dijeron presente los representantes de los tareferos, con Cristóbal Maidana, presidente del Sindicato de Tareferos de Montecarlo, y Roque Pereira, presidente de Tareferos Oberá Zona Centro. Finalmente, por el lado de los molinos, asistieron Enrique Diehl y el presidente de la Cooperativa Piporé, Raúl Karaben.
El encuentro fue el primero tras la decisión del presidente Javier Milei de desregular el mercado yerbatero mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023, emitido a finales del 2023. La medida eliminó el control estatal sobre los precios de la hoja verde y la canchada, generando incertidumbre en el sector. Esa determinación fue ratificada ahora por el Gobierno, que además quiere suprimir las últimas facultades que le quedan al INYM de control de calidad del producto.
Los productores advirtieron que la desregulación profundizará la concentración del mercado en pocas empresas molineras y afectará a los pequeños productores, quienes buscan mejorar la rentabilidad a través de la calidad del producto en lugar de depender de una puja de precios desventajosa.
Como parte del acuerdo alcanzado en la reunión, los firmantes decidieron elaborar un documento formal para presentar a la Presidencia de la Nación y continuar con los encuentros para seguir evaluando el impacto de la desregulación en la actividad yerbatera.
El reclamo por una yerba mate de mejor calidad suma un nuevo capítulo a la creciente tensión en el sector, que en los últimos meses ha protagonizado protestas y pedidos de revisión de las medidas adoptadas por el Gobierno.
El representante de la industria señaló que “es imposible fijar precio sin la presencia de los principales molinos que son extrazona”, y que aunque puede haber diálogos, “Misiones no tiene poder para sentar en la mesa a los 24 principales molinos”. Según su visión, lo que se pueden lograr son acuerdos parciales, pero sin una regulación efectiva, el mercado continuará concentrado en unas pocas empresas.
Uno de los ejes del debate también giró sobre la productividad de las chacras que necesita ser aumentada para mejorar la rentabilidad de los productores.