“Quiero agradecer la presencia de tantos peregrinos, en especial a los argentinos que son mi patria”
El papa Francisco agradeció la presencia de los fieles argentinos que cruzaron la frontera para estar presentes en los actos que celebró, al concluir la misa en la norteña Iquique, último acto de su visita a Chile. Horas después emprendió su viaje a Perú, segunda escala de su gira por la región.
“Y quiero agradecer la presencia de tantos peregrinos de los pueblos de Bolivia, Perú y, no se pongan celosos, especialmente de los argentinos que son mi patria”, dijo. Francisco repitió de nuevo el agradecimiento a los “hermanos argentinos que me acompañaron en Temuco, en Santiago y acá en Iquique”.
Aunque se llegó a decir por parte de los organizadores que habría una presencia de un millón de argentinos en las fechas del viaje de Francisco, nunca se han dado números oficiales de los argentinos que participaron a los eventos presididos por el Papa.
Francisco se despidió de Chile, donde llegó el pasado 15 de enero, deseando “unidad y paz” para el país. “Mira la fe de este pueblo, y regálarles unidad y paz”, concluyó el pontífice en su mensaje final de agradecimiento antes de emprender viaje hacia Perú, segunda etapa de su sexta visita a Latinoamérica.
“Francisco agradeció a la presidenta Michelle Bachelet su invitación y dio las gracias a todos los que han hecho posible este viaje”.
Agradeció su labor “a las autoridades civiles y, en ellos, a cada funcionario que con profesionalidad ayudaron a que todos pudiéramos disfrutar de este tiempo de encuentro”, y también a la comisión organizadora.
Francisco volará directamente hacia Lima para, con el lema “Unidos en la esperanza”, iniciará una visita hasta el domingo en la que los ejes centrales serán la condena a la corrupción y el encuentro que tendrá mañana con los pueblos de la Amazonía en Puerto Maldonado.
Aterrizará en Lima a las 17.20 locales de hoy (19.20 de Argentina), y será recibido en el aeropuerto de esa ciudad capital por el presidente Pedro Pablo Kuczynski, que encontrará al Papa en medio de una grave crisis de popularidad por su implicación en el denominado escándalo Odebrecht.