Los datos socioeconómicos que dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Censos, revelan detalles de un cambio que está sucediendo en la economía de Misiones en los últimos años y que excede a la capital provincial. En Misiones se está generando empleo y está mejorando el ingreso, a pesar de la desigual batalla contra la inflación, que se ensaña particularmente con esta región del país. 

Misiones es la provincia de mayores niveles de actividad y empleo del Norte Grande y está entre las principales de la Argentina. En el NEA, Misiones es la única provincia en superar los 40 puntos de tasa de empleo, y también lidera en el Norte Grande. Misiones tiene el quinto mayor nivel de empleo del país, solo superada por el big four, CABA, Santa Fe, Córdoba y Mendoza. Pero la situación misionera se fortalece aún más al observar que es la provincia con el mayor avance de esta tasa: observando las evoluciones del 2022 respecto a 2021, los 4,1 puntos porcentuales de mejora que tuvo Misiones la convierten en la provincia con el mayor alza de empleo de todo el país. 

En un inédito proceso, a la creación de empleo se le agrega una mejora sustancial en los ingresos. Misiones ocupó siempre los últimos lugares en niveles de salario, pero ahora es la que ofrece mejores ingresos de todo el Norte Grande, nuevamente, pese a la inflación que aflige particularmente a los de menor escala salarial. Al tercer trimestre del 2022, de acuerdo a la Encuesta Permanente de Hogares total urbano, Misiones registró un ingreso medio total individual de 66.475 pesos, expandiéndose 70% nominal en relación a igual período de 2021. El ingreso medio de Misiones es el más alto del NEA y del Norte Grande y se posiciona en la mitad de tabla en el país. La otra brecha que “mejoró” es la que mide los ingresos entre hombres y mujeres: fue del 23,5%, ya que la media del ingreso total individual de varones marcó $75.296, mientras que el de mujeres fue $57.632. Es una brecha amplia, pero es menor al total nacional urbano (marcó 26,3%) y tuvo un fuerte descenso respecto al 2021, momento en el que la diferencia salarial era del 26,2%.

Los datos siempre hay que leerlos en contexto y como una película. Son la foto de un momento, pero también reflejan la evolución y el resultado de las políticas adoptadas. En la década de los 90 y los primeros años de este siglo hubiera sido impensado suponer que Misiones podría tener más empleo e ingresos que el Norte Grande argentino, donde mandaban con holgura Salta y Tucumán.

¿Qué pasó para que eso cambie? En los últimos 20 años hubo muchas políticas activas para fortalecer el agro, la industria, la construcción, el turismo y el consumo, lo que hizo crecer el mercado interno y generar empleos. La pandemia fue un punto de inflexión. El cierre de las fronteras frenó la sangría permanente de divisas hacia Brasil y Paraguay. 

Cuando la inflación comenzaba a asomar como un problema, en 2018, Misiones puso en marcha una serie de programas para cuidar el bolsillo que se convirtieron en pilares del consumo interno y custodios del bolsillo. La inflación sería un problema mucho más grave sin los Ahora y seguramente, los comercios estarían hoy rezando para que nadie cruce la frontera hacia Encarnación. Cerca de 20 mil millones de pesos se consumieron en Misiones con los Ahora en el último año.

El éxito -y la anticipación- se refleja en que el ministro de Economía, Sergio Massa, puso en marcha un plan idéntico para aplacar la inflación y sostener el consumo de carne en la Argentina. 

Esos programas son aliados imprescindibles en la compra de útiles y guardapolvos para los casi 400 mil chicos que volverán a las aulas este 1 de marzo, con fuertes reintegros y descuentos. A ese estímulo se suman los 205 millones de pesos que invierte el Estado en la ayuda escolar a los estatales, a razón de diez mil pesos por chico. Los intendentes anunciaron otro tanto. El boleto estudiantil gratuito permite que miles de chicos puedan recorrer el camino de la casa a las escuelas, muchas de ellas con modernas ofertas educativas a la altura de los tiempos. 

Esa enorme cantidad de recursos volcados desde las políticas públicas a la economía, es posible pese a que Misiones es una de las provincias menos beneficiadas en el reparto federal. Primero hubo que poner en orden el descalabro financiero de los 90 y generar recursos propios, que le dieron una autonomía inédita a la gestión provincial. 

Son datos centrales en tiempos en los que la política vuelve a ocupar el centro de la escena, ya que las elecciones provinciales están a la vuelta de la esquina. 

La oposición vuelve con el latiguillo del cambio, sin decir qué es lo que se pretende cambiar. Los latiguillos de campaña son los mismos que los de las elecciones anteriores y se abstraen de los datos de la realidad. A pocas semanas de las elecciones, no hay candidatos confirmados y los dirigentes recién comienzan a “diagramar propuestas” para presentarlas a una sociedad que imaginan ansiosas por promesas a las apuradas. 

El kirchnerismo tendrá sus candidatos recién en unos días, aunque no parece demasiado interesado en las elecciones misioneras. 

El radicalismo formalizará este domingo a Martín Arjol como el candidato de Cambiemos, que llevará a un macrista como vice. Pese a que la UCR encabezará la fórmula de la alianza, hay muchos resignados en el partido por la paradoja de tener a un Puerta encabezando la lista de diputados. Tanto renegar para que al final haya que hacer campaña por el eterno rival. 

Pedro Puerta, el hijo de Ramón, pero de idéntico pensamiento, confirmó que será el primer candidato a diputado provincial de la alianza Cambiemos.

En el PRO por estas horas se repite que el objetivo es que haya un candidato amarillo por municipio. Al cierre de esta columna no se sabía el nombre de quien sería el candidato a vicegobernador. Martín Goerling rechazó el convite con el objetivo de cuidarse para octubre y ser candidato de Patricia Bullrich. Alfredo Schiavoni haría lo mismo, pero para ser postulante de Horacio Rodríguez Larreta. 

El diputado provincial, defensor de la dictadura, Horacio Loreiro también rechazó la propuesta y será candidato en Oberá, mientras que en Posadas se postularán Micaela González Coria, Paola García y Jorge Rattier.

Para la oposición las encuestas son un problema. Muestran algo que no quieren ver. En Misiones la Renovación saca varios cuerpos de ventaja, con Hugo Passalacqua y Lucas Romero Spinelli. Lo mismo sucede en los municipios, donde la pelea más fuerte estará dada entre los candidatos del oficialismo, con muchos intendentes con posibilidad de reelección.  

Se ilusionan, eso sí, con los datos de las encuestas nacionales que muestran a la oposición peleando el liderazgo. Tanto que Misiones dejó de ser “relevante” para los partidos con anclaje nacional. Javier Milei, a quien le dan chances ciertas de poder meterse en el balotaje, hoy no tiene partido en la provincia y apostará todo a las nacionales. 

Según la encuesta de Cristian Solmoirago, Horacio Rodríguez Larreta, recién lanzado, supera a Patricia Bullrich, cuyo discurso parece haber perdido fuerza en las últimas semanas. 

La oposición tiene a su favor el desconcierto del Frente de Todos, inmerso en una interna eterna que amenaza con corroer las débiles bases que todavía lo tienen en pie. El presidente Alberto Fernández quiere una segunda oportunidad, pero no tiene logros que garanticen imponerse en la interna. El kirchnerismo duro tampoco exhibe un candidato “ganador” que no sea Cristina, que tiene al mismo tiempo, la base más amplia, pero el techo más bajo. Eduardo Wado de Pedro es el ministro con intenciones, pero en las últimas horas se sumaron Daniel Scioli, quien se siente con fuerzas para un segundo intento después de la derrota mínima de 2015, justamente por la escasa militancia del ala dura del cristinismo. “Acá estoy. Soy el Daniel de siempre, con más fe y esperanza que nunca. Cuentan conmigo. Yo cuento con ustedes”, se presentó el embajador en Brasil.

Por ahora, el exgobernador bonaerense no tiene en su agenda realizar un acto de lanzamiento, sino que continuará con una “intensa” agenda junto a funcionarios y empresarios brasileños para convertir en realidad el acuerdo marco entre Argentina y Brasil. Por lo pronto, junto al gobernador Oscar Herrera Ahuad, encabezará una misión comercial en la zona sur de Brasil para posicionar a Misiones en la ruta clave del comercio con el Atlántico. 

También se suman, para presionar por espacios, el dirigente social y líder del Frente Patria Grande, Juan Grabois; y el ex director del Banco Nación, Claudio Lozano.

Sin embargo, la incógnita sigue siendo Sergio Massa. No dice si quiere, pero es el que tiene más chances reales de poder aglutinar el voto del oficialismo y del desencantado con Cambiemos. Massa logró estabilizar el barco -que ya es mucho decir- y demostró tener muñeca para encabezar negociaciones a favor de la Argentina.  Las negociaciones entre la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la cuarta revisión que permitirá dar luz verde al ingreso de US$ 5.400 millones al país avanzan con “buen progreso”. 

En particular para la Argentina, el Gobierno buscará negociar con el Fondo flexibilizar alguna de las metas establecidas en el programa para 2023, y garantizarse así los desembolsos de más de US$ 19.000 millones que vencen en este período para pagar la deuda heredada de Mauricio Macri.

Massa le acercó a Georgieva el informe argentino difundido en la India, en el que se constató que la Argentina perdió alrededor de US$ 5,000 millones como impacto en la balanza comercial a raíz de la Guerra en Ucrania, e igualmente se cumplieron las metas con el organismo crediticio en 2022.

La clave estará en qué pasa con la inflación.

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