Un día como hoy, Jorge Bergoglio se convertía en el Papa Francisco: La decisión que cambió la historia
El 13 de marzo de 2013 marcó un momento histórico para la Iglesia Católica: era elegido el Papa Francisco, el primer Sumo Pontífice americano de la historia.
El 13 de marzo de 2013, un cónclave reunido en el Vaticano convertía a Jorge Bergoglio en el Papa Francisco, el primer Papa latinoamericano y jesuita. La elección del Papa Francisco fue un cambio significativo, ya que trajo un mensaje de humildad y servicio. Su pontificado fue un faro de esperanza y apertura hacia los más necesitados.Los secretos del cónclave que cambió la historia
Pocos predecían en el incierto cónclave de marzo de 2013 que el argentino Jorge Bergoglio se convertiría en papa. Uno de los que acertó fue el periodista irlandés Gerard O’Connell, quien desde hacía más de 25 años informa de todo lo que ocurre en el Vaticano. O’Connell escribió “La elección del papa Francisco: un relato íntimo del cónclave que cambió la Historia”, en el que revela los secretos de aquel cónclaveque dejó boquiabierto al mundo por la elección del primer latinoamericano y el primer jesuita para llevar las riendas de una religión que cuenta con más de 1.200 millones de fieles en todo el mundo.
En una entrevista con la BBC, explicó cómo varios cardenales electores compartieron con él información secreta y detallada sobre el cónclave, con la condición de que no la usara entonces, pero siendo conscientes de que más adelante podría usarla. Según O’Connell, “los cardenales se dieron cuenta de que en ese cónclave había tenido lugar un cambio de las proporciones de un terremoto en la Iglesia católica, y algunos de ellos querían que la gente supiera cómo había sucedido, así que compartieron esa información conmigo para dejar constancia para la historia”.
Bergoglio destacó por su estilo de vida simple y austero, su compromiso con los pobres y su capacidad de conectar con la gente común. Según O’Connell, “Bergoglio ya había emergido como líder de la Iglesia de América Latina en la conferencia de obispos latinoamericanos (CELAM) celebrada en Aparecida, Brasil, en 2007. Además, Bergoglio había sido presidente de la conferencia episcopal argentina durante dos mandatos y había demostrado buena capacidad de liderazgo“. Estas cualidades resonaron fuertemente entre los cardenales, que buscaban un líder inspirador que pudiera llevar a cabo una reforma espiritual en la Iglesia.
A lo largo de su pontificado, el Papa Francisco enfrentó toda clase de desafíos y controversias, incluida la oposición dentro de la propia Iglesia. Sin embargo, su mensaje de inclusión, misericordia y justicia social resonó en millones de personas en todo el mundo, lo que lo convirtió en una figura influyente y respetada tanto dentro como fuera de la Iglesia Católica.
O’Connell mencionó en la misma entrevista que “la oposición a Bergoglio en el último cónclave fue mucho más débil que la que hubo contra Ratzinger en el cónclave de 2005. Si bien la oposición a Francisco era una minoría en el cónclave de 2013, desde entonces ha ganado fuerza debido a su apertura hacia las personas divorciadas y casadas en segundas nupcias, hacia las personas LGTB, su enfoque en los pobres, sus críticas a la economía, su postura sobre la migración, su oposición a las armas nucleares, al comercio de armas y la pena de muerte“.
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