El debate que se generó a partir de la decisión de la Argentina de Incluir en el Documento Nacional de Identidad, el género no binario, posibilitó lo que los integrantes de éste colectivo esperaban desde hace muchos años. Ser visibilizados.

Esa invisibilización venía acompañada de burlas, discriminación, violencia y falta de oportunidades para desarrollarse como personas, desde los afectos, en la educación y el trabajo.

A partir de ahora podrán optar por poner una X en el nomenclador del género, aunque ellos sienten que es algo más que una letra.

Facundo de 38 (transexual) y Diana de 33 (no binario), son pareja, e intentan explicar estos cambios que van más allá de una elección sexual.  

Siempre tuve una negación a vestirme como mujer y a jugar con muñecas, me quería arrancar los vestidos, y quería jugar a la pelota. Salgo del closet a los 17 años, cuando tuve una pareja mujer. La diferencia entre el transgénero y el transexual, es que el transgénero no se siente cómodo con su sexo biológico y puede decidir o no operarse.  En el caso del transexual sí adaptan sus cuerpos a cómo se perciben.

Facundo

¿Qué es un género no binario?

Diana  Es aquel que no quiere ponerse una etiqueta y rompe paradigmas y trasciende lo masculino y lo femenino. Nos preguntamos por qué asignarnos con uno u otro si puedo tener un género fluido, sin género.

¿Y  un género fluído?

En mi caso es que fluctúo entre hombre y mujer y a veces con ninguno de los dos. Marca todas las identidades con las cuales las personas se sienten autopercibidas.

¿Y ese proceso cuándo lo empezaste a experimentar?

A los 28 salí del closet. No me sentía cómode en ese momento de cómo estaba, y después empecé a investigar más sobre las identidades y desde mi psicología y desde mi interior dije, esto es lo que soy. El año pasado empecé a hacer el cambio registral.

Diana vos tenés un aspecto femenino, y tu nombre también, ¿por qué si no te sentís mujer?

No hay que entrar en pánico sobre cómo lo tengo que llamar, le, él, la. En realidad la persona te va a transmitir. A mí la X sí me representa. Yo me voy a cambiar el nombre a Jaime Elias, y me voy a seguir vistiendo como hombre, como mujer, como quiera. Y que la gente diga, no entiendo.  Eso quiero.

¿Una persona no binaria se puede enamorar de  un hombre y de una mujer?

Y de quién no tenga ninguna de las dos identidades. La identidad de género no tiene que ver con la elección sexual. Yo agradezco estar con Facundo que es trans. Esto no es una moda, no es una rebeldía. Somos así, queremos ser así y si bien hay gente que no nos va a aceptar, están en todo su derecho.

Entre las barreras que hay que derribar, están la educación y el empleo. Siempre se creyó que los homosexuales tenían poco coeficiente intelectual, y eso no es cierto. No estamos dentro de la regla patológica. No somos extraterrestres, podemos pensar, leer, escribir y estar en cualquier empleo. 

Facundo

¿Cómo pasaron este proceso con su entorno?

Dentro de la misma comunidad LGBTIQ+ también hubo y hay discriminación. Cuando yo dije que era no binario se me rieron. La ESI aporta mucho y ahí se nota la diferencia, saber de identidades, saber que existimos y que podemos ser respetados ante la ley.

¿En el día a día, para ir a hacer trámites, para ir al médico, tienen que estar todo el tiempo explicando, o ya no hace falta?

A veces, sobre todo con las personas mayores.

¿Los afecta la discriminación?

Diana. No. Soy muy empática con quien no me entiende. Acepto su postura y elijo no ponerme mal por su desprecio. Él (Facundo) lo vivió algo más difícil porque su cuerpo cambió.

¿Y sus familias?

Buena onda (se ríen). Está todo bien, ya nos presentamos. Convivimos.

¿Qué esperan de las futuras generaciones?

Quisiera que dentro de algunos años, la adopción de chicos para las personas homoparentales se pueda dar. Hay personas que tienen mucho amor para dar.

About The Author