El emblemático Bar Español está abierto desde 1958 en la capital misionera, con una gran historia que se atesora en el corazón de todos los posadeños que tuvieron el privilegio de conocer a don Darío Cebolla Bueno. Su legado relatado en primera persona inspira a emprender, como lo hizo él lejos de su tierra natal. 

Fue uno de los bares más modernos de su época y marcó un antes y un después en la vida de sus propietarios. Actualmente, el dueño del bar es Cristian Orué, quien desde hace 21 años está al frente de uno de los lugares más queridos de la ciudad, conservando aún su estilo europeo, tendencia para la década del 50. “El Bar lo adquirí después de la crisis del año 2000 como una oportunidad comercial, recientemente me tocó vivir la pandemia que podríamos catalogarla como un periodo de crisis también, dado que había que sostener la estructura de la empresa sin ingresos y a la espera de cuándo se  volvería a trabajar”, dijo Orué en entrevista con Economis. 

Con 65 años de trayectoria, el Bar Español es el más tradicional de la Provincia, recibiendo tanto a clientes de muchos años, como a turistas que pasan por la ciudad de Posadas, “muchos de los que vienen, que no son clientes, lo tienen al bar como referencia dado que la cocina siempre está abierta, y es parte de la historia de muchas familias que antes venían con sus padres, abuelos y esos mismos vienen con sus nietos”. 

Hace menos de un mes inauguró una nueva propuesta para los posadeños: un bar con estilo italiano, en el que se destacan sus platos típicos y su colorida decoración. Un espacio acogedor, que desde la familia esperan sea elegido para compartir momentos e historias como en el bar Español. 

Una nueva propuesta gastronómica en la ciudad, en esta oportunidad con platos típicos y a estilo italiano ¿Cuáles son las expectativas del lugar que lleva por nombre “La Italiana”?

Las expectativas son muchas dado que el contexto actual hace que Misiones esté mucho más activa con el turismo. Los viajeros están haciendo base de Posadas, que no hace falta decir, cada dia esta mas linda, y tambien sobre todo cabe destacar que casi todas las semanas hay eventos organizados de nivel nacional que es a lo que está apuntando la provincia. Con la estructura e inversiones que realiza sobre todo en materia de deportes, lo cual hace que los hoteles y la actividad gastronómica tengan mayor movimiento. Por ende hay que estar preparado para atender de manera correcta esa demanda”.

¿Cuál es la oferta de La Italiana? 

“En La Italiana básicamente ofrecemos pastas y pizzas con elaboración propia, pero a su vez en la carta también tiene las opciones de minutas y de sándwich de pan ciabatta entre otras cosas ricas”.

Un momento bastante particular a nivel país, ¿Cómo surgió la idea de invertir en un nuevo bar? Generar nuevos puestos de trabajo en una situación impredecible…

“La idea de la Italiana surgió dado que es el local contínuo al Español, y de poder ofrecer una opción más de comidas en el centro de la ciudad, dado que a ciertas horas quedan pocas opciones y el centro de la ciudad queda como apagado, sobre todo en nuestra zona, Bolívar pasando San Lorenzo. Jugando con la demanda que tiene El Bar Español y su trayectoria, era lo más conveniente como ubicación. Es una opción gastronómica más dentro de la familia del grupo Bar Español. Efectivamente poder dar la posibilidad de empleo a las familias, es lo más gratificante para nosotros. Actualmente estamos con nueve personas, cuando extendamos el horario la idea es contratar más personal de salón y de cocina, por el momento es un personal nuevo, más mi esposa y yo que estamos supervisando que salga todo bien. 

Inauguraron hace menos de un mes, ¿como ha sido la demanda y la repercusión de los clientes hasta ahora?

“Finalmente después de mucho esfuerzo, de horas de trabajo, y de algunos inconvenientes que fueron surgiendo por el camino, pudimos abrir las puertas de esta nueva propuesta los últimos días de noviembre. Sinceramente estamos muy contentos, ayuda mucho que el Español esté justo al lado, entonces eso permite que podamos trabajar en conjunto, igualmente estamos esperando que esté todo en orden para hacer publicidad, pero en líneas generales estamos muy encaminados. Así que ahora ya pueden pasar a disfrutar de nuestros sabores. El horario de atención en La Italiana es de 11 a 15 y de 19 al cierre, que suele variar”.  

Hablando del histórico Bar Español ¿qué nuevos servicios ofrece y qué cosas se siguen conservando?

“El bar antes era más cafetería y cosas dulces, en la actualidad la carta es mucho más amplia, y la característica,  es que podes pedir cualquier cosa de la carta, como por ejemplo lomo al champignon a las diez de la mañana como a las seis de la tarde y sale, la cocina siempre está abierta y en forma continua. Hoy en dia estamos mi esposa Debora y yo,  el consumo y los hábitos fue cambiando así que fuimos adaptándonos a la demanda y horarios de los clientes, ampliando la carta a mas variedades, pero siempre siguiendo la línea tradicional y sin abandonar los productos que siempre destacaron al bar, como los carlitos, las medialunas que son únicas como así también los sándwich de lomos entre otros productos.

¿Cuántas personas empezaron trabajando en el lugar y cuántas trabajan actualmente?

“Cuando yo adquiri la sociedad hace más de 20 años, eran solamente ocho personas trabajando en el local, de los cuales dos siguen trabajando actualmente con más de 40 años de trayectoria en El Español, hoy somos mas de 25 personas dentro de lo que es el Bar, siempre con la misión de brindar un buen servicio, una buena atención para seguir perdurando en el tiempo. 

¿Cuál es la visión a futuro? 

Más que visión a futuro lo llevo al presente, dado que el Bar Español también está ligado a otros emprendimientos que surgieron del bar como ser los Multiespacios Costanera para eventos infantiles como así también a La Italiana que abrimos recientemente. La idea es poder ampliarnos con alguna sucursal del Bar Español, el bar tradicional.

Un poco de la historia del Bar Español: 

El emblemático Bar Español fue fundado en 1958 por el inmigrante español Dario Cebolla Bueno. La década del 50 fue una época marcada por la carencia de espacios de esparcimiento en la ciudad de Posadas, momento clave en el que Don Cebolla sumó esta oferta que con el transcurrir del tiempo se convirtió en un punto de referencia para los habitantes de la capital misionera, quienes hace más de seis décadas comparten risas, sabores, historias, citas y mas. 

En su momento fue uno de los negocios más cotizados ubicado en pleno centro capitalino, con detalles de estilo Europeo, los cuales mantiene en la actualidad. Fue el primer bar en imponer el pan de miga tostados, los sabrosos lomitos y las clásicas medialunas de elaboración propia, elegidas aún hoy por muchos comensales que se acercan a la calle Bolívar, en 1900 amplió su carta e incorporó “al mejor café de la ciudad”. 

Dario Cebolla Bueno puso en marcha aquella inusual propuesta junto a su amigo y socio Guillermo Coll. Dario llegó desde España a Argentina con tan solo 22 años, en 1951, instalándose primero en Comodoro Rivadavia, cuatro años más tarde arribó a Posadas. Su amigo de toda la vida, Guillermo Coll también emigró a la tierra colorada y en 1958 compraron el local que fue también una casa de familia. Frente al lugar se encontraba el teatro Español, un sitio de gran concurrencia en su época. 

Dario tuvo siempre el sueño de una América progresista, ese sueño lo pudo plasmar en la tierra colorada que lo atrapó, y junto a ese plan de progreso también encontró el amor, un amor para toda la vida, de su esposa María Clemencia Badie, descendiente de franceses, con quien se casó en la capillita San Roque cuando este aún era de tabla, y con quien tuvo dos hijos. 

Al Español asistían desde Diputados a gente de chacra, era un espacio en el que se podía dialogar de todo, política, religión, fútbol y más.  Actualmente las mesas son ocupadas por comensales que buscan un espacio para estudiar, para leer un buen libro o para mirar un partido de fútbol. 

El Bar Español es el único que perdura a través del tiempo, otros lugares similares que también marcaron una época prestigiosa en la ciudad, como el bar Martinez hermanos, el Continental o el café Paulista, se fueron apagando en el transcurrir de los años. 

Un lugar que fue testigo de todo el proceso de cambio que surgió a lo largo de 65 años. Aunque la estructura del bar sigue manteniendo algunos detalles originales, en los años 90 las barras en la vereda eran mucho más amplias debido al gran gentío que reunía el teatro. Hoy día con el asfaltado que llegó tiempo después, en unas calles que eran todo de tierra, y con el crecimiento de la capital de Misiones, se fue modificando la infraestructura, manteniendo siempre la calidad y la tradición, albergando infinidades de historias.

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