Mateo Salvatto está lejos de vender la imagen de “influencer”. Sencillo y con una humildad a flor de piel, no se cree eso de “ser famoso”. Por el contrario, llena de elogios a una juventud que, dice, lejos está de estar “perdida”. 

El joven emprendedor cerró el viernes el primer Congreso Inmobiliario de las Misiones. En una entrevista exclusiva con Open 101.7, e creador de la aplicación Háblalo que ya asiste a 400.000 personas con discapacidad de todo el mundo de forma gratuita, remarcó que “todos podemos cambiar el mundo”. Además destacó la gran biodiversidad de la provincia y el valor del emprendedor que busca diferentes alternativas para seguir creciendo.

Hablaste de la esperanza, de un mundo mejor, ¿Cómo es esto?

Antes que nada, estoy súper contento de estar aquí nuevamente en Posadas. Siempre es una alegría visitar Misiones. Este congreso me parece súper interesante, tanta gente junta charlando, sobre una industria bien atrayente y con un montón de desafíos por delante. Mi aporte no tiene que ver directamente con la temática discutida en general en el Congreso sino más bien una visión de futuro desde otro ángulo, que es el ángulo de la tecnología, la accesibilidad, el emprendedurismo y cómo todas esas filosofías, términos, o aprendizajes pueden ser aplicados para esta industria y prepararse para lo que viene, desde la Argentina que tampoco es un dato menor.

Desde tu aparición mediática te convertiste en un puntal en cuanto a la cuestión tecnológica, y con una mirada del futuro con esperanza…

El cruce entre tecnología y esperanza es una definición muy buena, porque en realidad van muy de la mano, la tecnología representa desde la rueda hasta el día de hoy, una grandísima esperanza para mejorar la calidad de vida de las personas y lo que yo siempre planteo es que la Argentina es un país al que le hace mucha falta algo en que creer. Hay generaciones que lo han tenido, pero esta generación puntualmente por distintos factores que son de público conocimiento, nos hace una gran falta ese algo en que creer y yo creo que la tecnología puede serlo, más que nada porque no es algo para pocos como se suele creer, sino que más bien es para muchos, y para muchos que tengan ciertas características. En general, el mundo tecnológico, que es un mundo de cambio constante, de muchas fluctuaciones y de mucha inventiva, justamente cruza esas tres características. Creo que deben ser el ADN de todo argentino o argentina que conozca la capacidad de resiliencia, de adaptación, de innovación, de creatividad y la capacidad de estar acostumbrados a que el statu quo sea la inestabilidad o sea la estabilidad es lo inestable, que es lo que pasa en el mundo tecnológico y eso pone en jaque a un montón de sociedades. La Argentina es un país que para ser latinoamericano y tener las complejidades macroeconómicas que tiene, su adopción tecnológica es enorme en todo término y su ecosistema de emprendedurismo tecnológico es gigante, así que ese algo en que creer, al menos desde mi punto de vista, podría ser tranquilamente la tecnología para nuestro país y eso es un poco lo que trato de pregonar.

Representas ese joven que vino a cambiar la mirada de la sociedad hacia a la juventud, es un antes y un después. Apareces como un empresario establecido, con un proyecto muy serio que tiene la cuestión de la inclusión y de la contemplación del otro ¿Sos consciente de lo que representás?

En realidad creo que yo tuve la oportunidad de que me hayan dado cámara, donde he podido transmitir ciertos valores. No creo que yo sea una excepción a la regla, sino que pude tener la oportunidad de estar sentado en un lugar con mucha audiencia mostrando la regla, pero si me pongo nombrar jóvenes de entre 20, 30, y treinta y pico de años en Argentina que hacen cosas increíbles para el país y para el mundo, puedo estar una hora y media. Si me tengo que adjudicar un mérito, es que tal vez pude representarlo en pocas palabras y en forma sintética en una cámara específica y eso funcionó para transparentarlo, pero yo no me puedo adjudicar haber cambiado ese paradigma, sino más bien mostrarlo en algún sentido y como un caso muy mínimo, porque hay muchísimos argentinos y argentinas que la rompen mucho más que yo y que por ahí no los conocen y no han tenido la oportunidad de estar en un programa de televisión con mucha audiencia, pero que hacen cosas increíbles. Tal vez lo que me enorgullece es haber mostrado que esto de que la juventud está perdida es una rotunda falacia y se demuestra con miles de jóvenes argentinos.

En cuanto a tus proyectos empresariales y tecnológicos ¿Se viene algo nuevo?

No puedo contar del todo, pero se vienen cosas muy grosas, no solo con la empresa que ha crecido enormemente, que ya ayuda a 400.000 personas y que va a crecer de una forma exponencial en el próximo año, en términos de su modelo de negocios y de su impacto en usuarios, la verdad que el crecimiento va a ser muy muy grande. Pero fuera de eso se vienen cosas nuevas en todo término. Lo que puedo adelantar es que estoy viendo desafíos muy lindos que queremos solventar y queremos innovar con equipos de laburo en educación. Estamos laburando en tecnología para educación, la accesibilidad, y también el acceso a la vivienda. Algo que pareciera raro, que no cuadra mucho conmigo, pero estamos laburando en algo de eso, no puedo contar mucho pero el famoso se viene en cositas.

Estás haciendo una gran gira no solamente por  Argentina sino por varios países ¿Cómo es volver a nuestro país viendo realidades de otros países, también con todo tu trabajo y además de eso como ves a Misiones?

Volver a Argentina después de viajar, que es algo que hago muy seguido, por suerte es una gran inyección de motivación y de prueba de la tesis,  a mí me encanta recorrer Latinoamérica y me encanta nuestra cultura,  y aunque a veces los argentinos reneguemos con nuestra condición de latinoamericanos como si fuera algo malo, lo somos y a mucha honra y es una región impresionante en un montón de sentidos, pero también renueva muchísimo mi visión de que la Argentina no está tan mal como nosotros creemos que está. Si bien es cierto que estamos muy mal en términos macroeconómicos y eso es innegable y en muchos índices, también ciertas injusticias de la región o ciertas desigualdades tan estructurales que hay, cuando vuelvo a Argentina, de la movilidad social ascendente, de la educación pública, todo esto te renueva un poco también la esperanza de lo que es la Argentina y a dónde puede llegar. Si bien anda mal, se puede estar muchísimo mejor y lo hemos hecho incontables veces a lo largo de nuestra historia. Misiones es muy lindo en un sentido de su diversidad cultural y un ecosistema emprendedor muy lindo, creo que una de las cosas más lindas que recuerdo de mis viajes durante todos estos años es  la escuela de Robótica de Misiones.

Desde los 16 años años, tengo en la cabeza que la robótica tiene que ser un elemento educativo, para todas las escuelas del país y para todos los pibes del país, porque es algo lúdico, que te enseña las tecnologías más importantes que tenés para acceder al laburo, es lo mejor que te puede pasar, y me acuerdo cuando dije -che la prueba de lo que yo tenía en la cabeza fue la primera vez que vine Posadas y  vi la escuela de robótica y dije era esto- y siempre lo digo, lo he dicho en millones de casos ojalá que hubiera una escuela de robótica por cada ciudad de este país, el país sería muy diferente.

El Silicon prueba un poco esta idiosincrasia o este empuje  que tiene Misiones y todos los misioneros y misioneras por el emprendedurismo, por un poco buscar alternativas diferentes, por el crecimiento, creo que es una provincia muy pujante y muy emprendedora en ese sentido, y las pruebas están a la vista cuando uno llega a este establecimiento y aparte la cantidad de cosas que se hacen, charlas TED   la cantidad de contenido que hay en términos de emprendedurismo y tecnología es realmente llamativo. Además es una provincia totalmente estratégica en términos de su posicionamiento, su turismo, su producción en todo sentido, la verdad que es muy interesante y muy a tener en cuenta,  lo digo como porteño curado, admito que tenemos  muchos problemas y uno de ellos para mí en la Argentina ha sido ese falso federalismo, pero cuando uno mira Misiones y su capacidad no sólo productiva, sino de Recursos Humanos te demuestra que la oportunidad no es solamente en Buenos Aires si bien hay mucho allá, está clarísimo que desde Misiones hay de todo se hace de todo”.

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