Menos subsidios, más aumentos: cómo afecta el ajuste energético de Milei a los hogares
El primer año del presidente Javier Milei concluye con un marcado ajuste en el gasto público. Según datos oficiales del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), 838.466 hogares dejaron de recibir subsidios en sus tarifas eléctricas, mientras que en el caso del gas natural, la cifra asciende a 292.612 usuarios menos. El 2024 cerró con una reducción equivalente a USD 3.000 millones en subsidios energéticos, lo que representa un recorte del 33% respecto a 2023.
La “motosierra” en marcha
El ajuste en las subvenciones se enmarca en la estrategia del Gobierno de Milei para reordenar los precios relativos, avanzar hacia un superávit fiscal y frenar años de congelamiento tarifario que distorsionaron la economía. Si bien las políticas de reducción coincidieron con una desaceleración de la inflación, la Secretaría de Energía, liderada por María Tettamanti, ya prevé mayores recortes para el 2025.
Actualmente, seis de cada diez hogares siguen recibiendo subsidios para luz y gas. El esquema vigente segmenta a los usuarios según sus ingresos en tres niveles:
- Nivel 1: Altos ingresos, sin subsidios.
- Nivel 2 y 3: Ingresos bajos y medios, con bonificaciones, aunque estas son cada vez más acotadas.
La próxima etapa, proyectada para mediados de 2025, apunta a simplificar el sistema y establecer dos categorías: usuarios con subsidio y usuarios sin subsidio, similar a la tarifa social implementada durante el gobierno de Mauricio Macri.
Aumentos y nueva segmentación para 2025
Desde enero de 2025, las tarifas eléctricas tendrán un aumento del 1,6%, mientras que el gas subirá 1,8%, según confirmó el ministro de Economía, Luis Caputo. Estas subas están alineadas con el objetivo oficial de mantener la inflación mensual por debajo del 2% y garantizar aumentos moderados al menos durante el verano.
Sin embargo, la Secretaría de Energía también tiene pendiente una revisión integral de tarifas con transportistas y distribuidoras. Este proceso definirá no solo los nuevos valores que pagarán los usuarios, sino también las inversiones necesarias en la red energética para los próximos cinco años.
Impacto en las empresas y los hogares
Para las compañías del sector, los incrementos tarifarios autorizados durante 2024, en algunos casos de hasta un 500%, permitieron sanear balances después de años de congelamiento. Aun así, los consumidores enfrentan un escenario de menor asistencia, con topes más bajos para las bonificaciones y ajustes que afectan especialmente a los sectores de ingresos medios y bajos.
Con la intención de continuar reduciendo el déficit fiscal, el Gobierno enfrenta el desafío de equilibrar el alivio a las cuentas públicas con el impacto social de los recortes. Según expertos, este proceso será clave para consolidar la sostenibilidad económica en los próximos años.