Misiones tiende puentes con Nación para recuperar obras perdidas en el Presupuesto
¿Se puede gobernar sin presupuesto?
“Es difícil. Porque es una herramienta fundamental de cualquier gestión de gobierno. Dejar sin presupuesto a un Gobierno no solo es un mensaje negativo a la sociedad, sino hacia afuera, hacia el mundo, de una actitud irresponsable, de que la oposición quiera gobernar cuando no está para eso. También quita facultades, quita herramientas de manejo a un gobierno, para dar soluciones a la gente”, responde Adolfo Safrán, el ministro de Hacienda de Misiones y uno de los hombres que negoció hasta último minuto para que en la discusión del Presupuesto que fue rechazado por Cambiemos, se incluyan obras por casi cien mil millones de pesos y la creación de la Zona Aduanera Especial que reclamaba Misiones y que ahora volvió a fojas cero.
Safrán destaca que Gerardo Morales, gobernador de Jujuy y flamante presidente de la Unión Cívica Radical dijera que la oposición no podía dejar sin Presupuesto al Gobierno nacional. “Quién está en funciones de Gobierno sabe de la importancia de contar con un presupuesto, en cambio los que están en oposición, bueno el famoso teorema de Baglini, cuanto más lejos se está de una posición de poder, más alocadas son las propuestas, más disparatadas son las actitudes. Cuanto más lejos están del poder, más irresponsable es la actitud. Por eso un gobernador de su espacio político, hace la diferencia porque él sabe lo que es gobernar sin presupuesto. Seguramente su provincia, como otras tantas, se ha visto muy perjudicada al no tener un presupuesto nacional aprobado”, explica en una entrevista concedida a Economis.
¿Cómo se resuelve este conflicto, o por lo menos cómo se encamina a resolver esta relación Provincia-Nación, para poder incorporar lo que se perdió?
Va a quedar una gestión muy intensa por parte del gobernador Oscar Herrera Ahuad, con todo el gabinete nacional, en especial con el jefe de Gabinete, Juan Manzur, porque ellos sí tienen herramientas a través de disposiciones administrativas. La ley de Administración Financiera le otorga al jefe de gabinete el poder de administrar partidas, por supuesto con limitaciones, para obras o para programas. Pero ahora, queda todo el camino, todo lo que se había hecho en comisiones de incorporar planes de obras que interesan a las provincias, hacerlo a través de decisiones administrativas, dentro de las limitaciones que tenga y las facultades que tenga el jefe de gabinete. Viene ahora, un tiempo intenso del gobernador seguramente, con el gabinete nacional para pedir todo eso.
Una cosa son las obras, otra es la zona aduanera, ¿se va a poder trabajar con eso?
Estamos viendo si el Presidente tiene alguna herramienta para poder hacerlo, en principio creemos que no. Pero, lo estamos estudiando porque un DNU no puede contener ninguna cuestión tributaria y el Código Aduanero, es claro de qué, las zonas aduaneras especiales deben ser por ley o por una deliberación legislativa, como estaba prevista en el presupuesto. Lo estamos trabajando para ver si podemos llegar a alguna alternativa de solución y no perder esta oportunidad histórica que tenía Misiones.
Hay un nuevo consenso fiscal entre Nación y Provincia ¿Qué implica esto del nuevo acuerdo?
Es un acuerdo muy amplio, que se estuvo trabajando en los últimos cuatro meses con los equipos del ministerio de Economía e Interior para pulir los aspectos que pedían las provincias. Ahí básicamente lo que se acuerda es dejar sin efecto la baja de impuestos. Se fijan los topes de las alícuotas impositivas, Ingresos Brutos, Patentes, Sellos, Inmobiliarios de acuerdo a lo que se tenga firmado a la fecha. Es decir, para la actividad industrial el tope de alícuota impositiva queda en el 1,5 %. Para transporte, creo que queda en el 2 o 2,5 %, como estaba hasta ahora. No establece suba de impuestos, suspende la baja de impuestos que estaba firmada en el Consenso Fiscal del 2017, que establecía la baja por cinco años, que se aplicó por única vez por dos, con lo cual la baja para tres años queda sin efecto. Nosotros estuvimos siempre en desacuerdo con esa herramienta. Se faculta la suba de topes para el sector financiero, comunicaciones y juegos de azar, librado a cada provincia si quiere hacerlo. Misiones no lo ha hecho, ya el año pasado podía haber subido para varios sectores, pero Misiones tomó la decisión de no subir. Se va a buscar restablecer alguna regla de Responsabilidad Fiscal, que quedaron suspendidas por la pandemia, porque obligó a los gobiernos nacionales y provinciales a gastar más en algunas cuestiones que la pandemia exigía. Se establecen reglas de endeudamiento para las provincias. En el caso de Misiones no nos afecta. Se fija el endeudamiento con moneda extranjera con algunas limitaciones, lo mismo que con moneda nacional. También establece con claridad las pautas para que las provincias puedan gravar con Ingresos Brutos lo que es el comercio electrónico, todo lo que es el comercio electrónico, todo lo que son ventas a través de mercados o páginas de internet. La Provincia puede gravar si el consumidor está radicado en esa jurisdicción, lo cual es totalmente razonable. También van a procurar establecer un mecanismo de intercambio de información entre la AFIP y los organismos recaudadores provinciales. Finalmente se trabaja en la puesta en marcha de algún impuesto a la herencia, pero está como un trabajo a llevar a cabo.
¿Cómo cierra el año la economía de Misiones, también teniendo en cuenta el contexto, entendiendo que con la frontera cerrada fue distinto?
En lo que fue la actividad económica fue muy bueno. Misiones lideró la creación de puestos de trabajo en el sector privado, de tener 97 mil empleados privados pasamos a tener 106 mil. Somos la provincia con más empleados formales en plena pandemia. Muy pocas provincias han tenido ese nivel de crecimiento. La actividad económica, por los datos que tiene la Agencia Tributaria, muestra un crecimiento del 15 al 18%. Por supuesto, en el sector del turismo, sobre todo Iguazú, recién estuvo mostrando signos de recuperación, pero muy leves. Un dato interesante, de la actividad económica de Iguazú, por ejemplo, el sector de turismo y gastronomía, es que en octubre se encontraba un 20% por debajo de los niveles pre pandemia. Es decir, tuvo una recuperación, pero todavía no llegó a los niveles pre pandemia, los demás sí, comercios y otros sectores, recuperaron los niveles pre-pandemia, e incluso los superaron, pero el sector hotelería y gastronomía, todavía no. Pero cuando uno mira los rubros forestales, yerba mate, té, comercio, el sector industrial de Misiones, el balance fue sumamente positivo. Hoy cuando uno habla con el sector privado, un empresario, o un comerciante, lo que complica son los precios y la situación inflacionaria, el dólar blue, la incertidumbre de precios, eso genera reducción de los márgenes de ganancia. Con un dólar que tenía un comportamiento medio histérico, hacía que cuando un comercio o una empresa misionera quería comprar, o reponer la mercadería, tenía precios mayores, que por ahí la semana siguiente se acomodaba, pero generaba este tipo de ruido.
¿Qué puede pasar ahora con las fronteras abiertas? Todo indicaría que van a seguir así, empezamos un año distinto. ¿Qué puede pasar con la economía?
Estamos con un tipo de cambio que favorece a la economía misionera, salvo algunos productos, en su gran mayoría la frontera abierta favorece a la economía misionera. Por lo que entendemos, que al menos en el corto plazo, hablando de los próximos seis meses no va a cambiar. Vamos a ver qué tipo de medida económica, cambiaria toma el gobierno nacional, pero en principio de seguir así, hoy las fronteras abiertas favorecen a la actividad y al comercio misionero. Si a esto vos le sumás el “Ahora Misiones”, el “Ahora Misiones +21”, la verdad es que hay herramientas que hacen que el comercio misionero esté pasando un buen momento en cuestión de ventas.
¿Los Ahora siguen, o se reformulan?
Vence al 31 de diciembre, estamos trabajando para su renovación y quedará en manos del Gobernador anunciar la posibilidad de su renovación, pero son programas muy bien valorados, por todo el sector económico, por las ferias misioneras, así que entiendo que hay probabilidad de que puedan seguir.
¿El Ahora Misiones +21 qué impacto puede tener?.
Va a tener un impacto mayor. Pero estamos tomando medidas porque había comercios que hacían operaciones por fuera de las transacciones permitidas, por ejemplo, ventas por fuera del tope, o ventas a responsables inscriptos, esos comercios que eran muchos de los que más vendían fueron excluidos. Eso va a generar un mejor uso de los recursos, porque la finalidad del programa es que llegue al consumidor. Pero, se ha ampliado el cupo del presupuesto que aporta el ministerio de Desarrollo Productivo, así que son programas que van a tener muy buenos niveles de venta. El último mes fue de 253 millones de pesos, así que muy contento.
A pesar de que hoy este tipo de cambio a Misiones le convenga ¿está bien ese tipo de cambio para la economía argentina?
No, creo que con un dólar a 200, como se maneja en el mercado informal está muy sobrevalorado. Pero es típico de un mercado de cualquier producto cuando vos tenés una especie de precio máximo, al tener un dólar oficial con cepo, actúa un precio máximo cuando al mercado informal se dispara a valores estratosféricos. Si el mercado de cambio se liberara podríamos tener un dólar oficial más alto y un dólar blue un poco más bajo, incluso con valores más cerca. Esta situación no es buena, porque favorece al contrabando, favorece la subfacturación de importaciones, son situaciones que hay que tratar de evitar. El contrabando de soja que tenemos en Misiones es por la brecha cambiaria: La soja que pase y pueda llegar a Brasil, exporta y puede cobrar a un dólar a 200. Si va por las vías normales es un dólar a 103, menos las retenciones, le quedan 65 pesos, es tanta la diferencia que hace atractivo el contrabando.
¿Sin el acuerdo con el Fondo Monetario, Argentina podría seguir?
Sería complicado sin el acuerdo del Fondo. Uno puede cuestionar el origen de la deuda y las condiciones, por supuesto fue reprochable haber endeudado al país de forma irresponsable, por 50 mil millones, en algo que no nos favoreció, porque fueron los años más complicados para la Argentina. Pero no cerrar con el Fondo, significa caer en default. Sino cerrás con el Fondo quedan dos caminos: o pagás la deuda al Fondo y quedás sin recursos, con lo que caes en una crisis social inmanejable, o caer en default y cerrarse al mundo, perdés inversiones o cualquier posibilidad de crecimiento, a partir de fondos e inversiones que pueden venir del mundo. El acuerdo con el Fondo, es hoy la única alternativa viable.