Massa comenzó a dar señales de gestión en pos del cumplimiento del acuerdo con el FMI
A nueve días de haber estrenado su cargo el ministro de Economía, Sergio Massa, comenzó a dar señales de gestión en pos del cumplimiento del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en la previa de su visita a Washington DC para entrevistarse con la titular del organismo multilateral, Kristalina Georgieva.
A nueve días de haber estrenado su cargo el ministro de Economía, Sergio Massa, comenzó a dar señales de gestión en pos del cumplimiento del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en la previa de su visita a Washington DC para entrevistarse con la titular del organismo multilateral, Kristalina Georgieva.
En este sentido, el reciente canje de deuda logró despejar los vencimientos de los próximos 90 días, ayudando a evitar la tentación de recurrir al financiamiento con el Banco Central; en tanto las reservas comenzaron a detener su caída, se observó un foco de gestión intra gobierno con la mira en no salirse de la meta del 2,5% del PIB, y se aceleran las gestiones con exportadores del campo para captar al menos los 1.000 millones de dólares declarados por el sector para ayudar a superar la coyuntura, mientras se pulen incentivos del Banco Central y otras medidas para impulsar las liquidaciones.
Aunque la mayoría de los anuncios deberán ir siendo evaluados con las acciones a través del tiempo, la urgencia en las reservas torna relevantes las declaraciones del presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y del Centro Exportador de Cereales (Ciara-CEC), Gustavo Idígoras, quien expresó el miércoles último en un comunicado oficial que “a priori se estima que el flujo de las próximas semanas podría implicar un monto cercano a mil millones de dólares; hasta tanto evaluar el ritmo de venta de los productores”.
Ayer se concretó la primera reunión formal de la Mesa de Enlace y Sergio Massa en carácter de ministro, y el titular del Palacio de Hacienda tomó nota de los pedidos del sector.
Se trata de un universo algo disperso que involucra a 200.000 productores, si bien este compromiso, de concretarse, puede ser el puntapié para que la tregua inicial del mercado por el recambio de ministro pueda continuar en el tiempo -el riesgo país se mantuvo no más allá de los 2.400 puntos y los dólares financieros y libres cotizan por debajo de $300- y dé paso a un cambio de expectativas.
En este contexto, las señales de apoyo de la titular del Fondo al nuevo funcionario resultaron también elocuentes: Georgieva no escondió su expectativa de que Massa, que en el pasado ayudó a sentar a la oposición para poder lograr el apoyo al acuerdo con el FMI y tiene buena relación con todos los frentes de la coalición, sea a la vez en este nuevo rol de ministro de Economía una pieza política clave para ayudar a garantizar el cumplimiento del mismo.
“Reciba mis más sinceras felicitaciones por su nombramiento como Ministro de Economía de la República Argentina con mayores responsabilidades, incluso en las áreas de producción y agricultura”, afirmó Kristalina Georgieva en su carta difundida también el mismo miércoles.
Según la titular del FMI, “su experiencia, incluso en el Congreso Nacional, puede resultar vital para ayudar a Argentina y su gente a enfrentar sus desafíos económicos y sociales más apremiantes”.
En otro orden, aseguró que “el FMI sigue siendo un socio comprometido en apoyar los esfuerzos de la Argentina, especialmente en este momento tan importante”.
La titular del FMI confió en “profundizar aún más esa relación (que tuvo con los antecesores en el cargo) para apoyar la implementación del programa económico de su Gobierno respaldado por el acuerdo de financiamiento extendido del Fondo, que tiene como objetivo salvaguardar la estabilidad económica y asegurar un crecimiento sostenible y más equitativo en la Argentina”.
El equipo de Massa y el staff técnico del Fondo ya comenzaron a trabajar en la segunda revisión del programa, con el intercambio de números; la misma debería ser aprobada por el directorio a fines de septiembre, a más tardar a principios de octubre, para gatillar un ingreso de 4.100 millones de dólares necesarios para pagar deuda al FMI.
El Gobierno afirma que cumplió con las metas el primer semestre- tanto en déficit como en asistencia del BCRA al Tesoro, así como en reservas-, por lo que el foco de trabajo estará puesto en la continuidad del programa, más allá de los números alcanzados en el primer semestre.
Por otro lado, este mes comenzarían a llegar los créditos demorados de los organismos, que es otro de los pedidos del FMI. El titular del BID, Mauricio Claver-Carone, dio un giro en su discurso tras la designación de Massa y se espera que se destrabe en breve entre 500 millones y 800 millones de dólares; en tanto está ya en la agenda que la CAF haría anuncios entre el próximo jueves y viernes en créditos al país por 750 millones de dólares.
En tanto, el embajador argentino en EEUU, Jorge Argüello, vino a Buenos Aires especialmente para terminar de diseñar la agenda que tendrá Massa en Washington y en Nueva York con inversores, bancos de inversión, funcionarios del Tesoro, los titulares del BID, Claver-Carone, y del Banco Mundial, David Malpass, y con el asesor principal para Asuntos con América Latina, Juan González.
También se encuentra en el país Sergio Chodos, quien había venido a la Argentina para planificar la agenda de Alberto Fernández en Washington que quedó postergada para más adelante por la Covid-19 que afectó al presidente Biden.
Chodos se quedó en el país desde entonces, colaboró con el encuentro de la exministra de Economía, Silvina Batakis, con Georgieva, y recientemente se mostró por los despachos del Ministerio de Economía cerca de Massa en las mismas funciones, en un gesto más de la continuidad de las políticas en pos de continuar con las metas del acuerdo.
Por caso, la ahora titular del Banco Nación, quien pregonó el mes pasado un reordenamiento fiscal mientras estuvo en EEUU aceptó el pedido de Massa de acompañarlo en su gira internacional.
Otra figura importante del entramado de Massa en el equipo económico es Leonardo Madcur, quien la semana pasada se focalizó en la negociación del canje de deuda de inversores y bancos, y es visto como un “todo terreno” que seguramente dará un gran aporte a las negociaciones con el FMI.
Madcur conoce las entrañas del FMI, ya que participó de las negociaciones técnicas con el organismo en la crisis del 2002 y luego concretó el acuerdo de 2003 que Néstor Kirchner firmó con el organismo, y la reestructuración de la deuda con bonistas en el 2005 cuando Roberto Lavagna era el ministro de Economía y Guillermo Nielsen su segundo.
¿Puede cumplir Economía con el recorte del esfuerzo fiscal?
La consultora Equilibra – Centro de Análisis Económico, conoce más que cualquiera de las otras las ideas y posibilidades reales de Sergio Massa, y tiene un profundo entendimiento del estado de la economía en general y las cuentas públicas en particular. Su director ejecutivo, Martín Rapetti, estuvo horas atrás en radiopasillo como eventual N°2 del Palacio de Hacienda, rumor que resultó falso. Sus fundadores, Diego Bossio y Gabriel Delgado, tienen una considerable percepción del gap entre teoría y práctica de lo que se intenta. En este contexto, de su más reciente informe semanal, Urgente24 rescata no la parte inicial -la que describe una semana financiera que fue muy positiva para Massa- sino la siguiente, de alto contenido estructural:
Algunos números a tener en cuenta, elaborados por Equilibra.
El déficit primario viene viajando a un ritmo del 3,4% del PBI si tomamos en cuenta los 12 meses entre julio 2021 y junio 2022, con ingresos que ascienden al 18,4% del PBI y gasto primario con 21,8% del PBI.
Es decir que para cumplir con la meta de déficit primario de 2,5% del PNBI acordada con el FMI este año, se requiere de un esfuerzo fiscal de 0,9 punto porcentual (p.p.) del PBI en 6 meses.
Dado que suponemos un dete rioro en los ingresos del 2do. semestre, que rondarían 17,7% del PBI en todo el año, el gasto primario debería ajustar 1,6 p.p. del PBI para cumplir con la meta del FMI.
¿Hay margen para un recorte del gasto tan significativo? Lo cierto es que la inflación haría buena parte del trabajo. Sólo por la aceleración del 2do. semestre, estimamos que el gasto en prestaciones sociales podría reducirse en 0,6 p.p. del PBI.
Sin embargo, prevemos el otorgamiento de bonos extraordinarios, que acotarian el recorte a 0,4 p.p. del PBI.
Subsidios
En materia de reducción de subsidios energéticos no se brindaron mayores detalles que los vertidos durante la 1ra. conferencia de prensa de Sergio Massa como ministro de Economía.
Sin embargo, ese día se anunció que, tras la implementación del formulario en el cual había que inscribirse para pedir/retener subsidios energéticos, casi 30% de los hogares (4 millones de casi 14 millones) dejarán de recibir subvenciones (porción que triplica el 10% acordado con el FMI) y además que habrá topes de consumo mensuales subsidiados.
Por ejemplo, en el caso de la electricidad, el Estado subvencionará hasta 400 kW/h mensuales por hogar -un valor relativamente elevado- por lo que el consumo exedente no recibirá subsidios en el caso de la luz.
Resta saber si habrá excepciones y/o suba del tope en los momentos de mayor consumo eléctrico (verano-invierno) y desde cuándo se implemenará. Se mencionó que este mismo esquema se aplicará para el gas, pero no hubo ningún tipo de precisiones.
Pese a la escasa información disponible podemos suponer que desde agosto, los 4 millones de hogares dejarán de recibir -en principio en forma gradual- subsidios energéticos (luz y gas).
Asimismo, desde octubre una pequeña proporción del consumo eléctrico y del gas de los hogares subvencionados, no percibiría subsidios por superar el tope mensual. Esto permitiría reducir este año en 0,2 p.p. del PBI los subsidios energéticos respecto del escenario en que no se implementaba en 2022 la segmentación ni un tope mensual al consumo subsidiado.
La mejora se concentraría principalmente en electricidad ya que la temporada alta de consumo de gas va quedando atrás junto con las bajas temperaturas invernales.
Cabe destacar que, si simulamos que la segmentación de casi 30% de los hogares y el tope al consumo residencial se hubiesen aplicado a comienzos del año, el ahorro se hubiera triplicado subsidiado (-0,6% p.p. del PBI respecto de los subsidios estimados para 2022 sin ningún tipo de segmentación ni tope).
En síntesis, este año, la suba de tarifas energéticas será elevada y el ahorro fical de subsidios será bajo, pero esta relación se invertirá en 2023.
Provincias
Otra parte del esfuerzo fi scal vendría por el lado de las transferencias no automáticas a provincias, que permitiría ahorrar 0,1 p.p. del PBI.
En este sentido, el miércoles 10/08 el Senado aprobó -y giró a Diutados- el Consenso Fiscal que el Ejecutivo había firmado con 21 gobernadores del oficialismo y la oposicion en diciembre de 2021, y que permite a las provincias aumentar alícuotas y crear nuevos impuestos. Sería una forma de compensar a los gobernadores por las menores transferencias que recibirían de Nación en los próximos meses.
También caería el gasto de capital, que venía mostrando un gran dinamismo en el 1er. semestre, a pesar de no tratarse de un año electoral. La reducción de estas erogaciones podría aportar un ahorro de 0,2 p.p. del PBI.
Salarios públicos
Hasta acá, el potencial recorte asciende a 0,9 p.p. del PBI, en línea con el esfuerzo fiscal requerido en caso de que los ingresos mantengan el dinamismo de los últimos 12 meses. Pero, tal com o ya mencionamos, es probable que eso no ocurra, y toda baja de los ingresos deberá compensarse con menores gastos de funcionamiento, entre los que se encuentran los salarios públicos: 0,7 p.p. del PBI en nuestro escenario base, o 0,4 p.p. del PBI en el escenario que contempla el Staff del FMI. Éste es un ajuste muy significativo.
Si el gobierno finalmente logra reducir el gasto y computar un déficit primario de 2,5% del PBI en el año, tendría que financiar un rojo de AR$ 1,2 billón en el 2do. trimestre.
Si, en cambio, el deficit en el año asciende a 3,0% del PBI, como contemplamos en nuestro escenario base, el bache a financiar sería de casi AR$ 1,6 billón.
Recursos
El Tesoro aún cuenta con un remanente de DEGs para refuerzo presupuestario que puede venderle al BCRA (por unos AR$ 208.000 millones), y podría sumar ingresos adicionales por unos AR$ 176.000 millones provenientes de los superávis de organismos descentralizados de l Sector Público Nacional no Financiero (SPNF) y la renta del FGS ANSeS.
En concreto, para no pedirle Adelantos Transitorios al Banco Central, Finanzas debería conseguir AR$ 817.000 millones o AR$ 1.189.000 millones netos en el mercado de deuda local (en caso de que el déficit primario ascienda a 2,5% o 3,0%, respectivamente) durante la 2da. mitad del año.
Entre julio y lo que va de agosto ya sumó $ 637.000 millones netos, por lo que restan conseguir AR$ 180.000 millones o AR$ 552.000 millones, respectivamente.