Durante toda la semana, la educación fue la protagonista. Inauguración de la Escuela de Innovación, apertura de la Escuela de Robótica, con la incorporación de la universidad de Lagash, multinacional que se dedica a la fabricación de software y que abrirá sus puertas a los jóvenes misioneros y, un récord llamativo de Misiones: quince años ininterrumpidos con el inicio de clases con normalidad.
Pero para eso, hubo que generar una transformación, que se inició tímidamente en 2003 con más recursos, después se transformó en prioridad presupuestaria, sumó escuelas primarias, secundarias, salas de cuatro años en lugares recónditos y por último, incorporó tecnología robótica y hasta la necesaria para alcanzar en detalle el universo. La magnitud de la transformación desde aquellos aciagos años, es inconmensurable. Pero puede comenzar a percibirse en algunos resultados, como las pruebas Aprender, que en el trayecto de primaria, comienzan a ser positivos, colocando a Misiones como una de las nueve provincias donde hubo mejoras en la calidad en Matemática y Lengua. Impensado hace un puñado de años.
Por eso, el presidente de la Legislatura, Carlos Rovira, considera que el legado de transformación más profundo que ha dejado la Renovación, tiene que ver con la educación y la inclusión de jóvenes con acceso gratuito a espacios de aprendizaje, desde la escuela hasta la Escuela de Robótica o el pronto a inaugurarse, Observatorio Astronómico de Misiones.
“Lo más importante para mí, como político y como deseo ferviente de trasladar en mis compatriotas, es entregar una provincia mejor, en base al conocimiento, en base a la forma del conocimiento, que hoy tiene en Misiones una expresión de vanguardia. En el mundo los sistemas educativos están revisando absolutamente todos sus procesos, marcando un camino de inclusión y nosotros, humildemente estamos concretando la fusión necesaria con el área tan importante del conocimiento que hoy aplica y hace tecnología en el mundo, al abrir las mentes de las nuevas generaciones”, reflexionó Rovira en la presentación de Lagash University en la tarde del viernes, junto al gobernador Hugo Passalacqua, el vice Oscar Herrera Ahuad y autoridades educativas.

“Esto es verdaderamente transformador. Esto es mucho más que la economía empiece a marcar índice de crecimiento, que también lo esperamos y tratamos de ayudar. Pero cuatro o cinco puntos en el área del saber, tienen un multiplicador a la décima potencia, es muchísimo más”, explicó en una rueda de prensa.
“El poder en el mundo no está en el poder material. Todos los procesos económicos son débiles si no son conducidos o sostenidos por un flujo de conocimiento y sabiduría que, justamente, los haga competitivos en la búsqueda permanente de ir reemplazando paradigmas, de ir descubriendo cosas”, agregó.
Para Rovira, la posibilidad de generar ese flujo es la forma más apasionante de hacer política. “No hay nada más extraordinario. Mucho mejor que las drogas, mucho mejor que ganar elecciones, mucho mejor que gane Boca, es aprender algo nuevo todos los días. Sólo el amor es otra calidad de sentimiento”, comparó.
“Hoy eso se puede aplicar a las nuevas mentes, en una actitud democrática, absolutamente abierta, cómo es la concepción de esta Escuela de Robótica, donde en esta mesa colaborativa de aprendizaje, estamos todas las partes, Estado, privados y los chicos y jóvenes. Celebro que esto sea plenamente compartido por el Gobernador y el Vicegobernador, porque es su garantía de una política de Estado, de permanencia, de elevación de metas”, sentenció.
Rovira destacó que la transformación que se vive en Misiones es un proceso pedagógico que todavía no está plasmado en grandes leyes y lejos de ser una plataforma nacional que se replique en aulas de otros estados.
En cambio, sostuvo, “en Misiones esto ya es una realidad, es una experiencia con una potencia extraordinaria que está transformando la manera de pensar de nuestros docentes, de los padres de la comunidad, educando. Nos está transformando a todos. Es el verdadero proceso de salir del “teaching” y entrar al “learning”.

“La escuela de enseñanza, donde se repiten conceptos, ya dió sus frutos, fue extraordinario, pero hasta el siglo XX. Ahora se sabe mucho más, se conoce mucho más el cerebro, entonces no podemos desperdiciar talentos que son aplastados por el sistema tradicional. Eso sólo se dará en una mesa compartida, en un proceso heurístico, un proceso de prueba y estímulo a esas habilidades innatas, que tenemos todos, algunos más y otros menos”, explicó Rovira.
“El ser humano copia mucho y lo mejora, felizmente. Por eso la esperanza en que podemos ser mejores. Esa misma esperanza hoy la depositamos a las nuevas generaciones. Así que no hay dudas: Lo más importante, en nuestro entender, de cualquier proyecto político, es darle lo mejor de la educación, pero ya. No desde el discurso, sino desde la praxis, desde las cosas tangibles, ya mostrando los resultados, acomodandolos a las realidades y a los desafíos permanentes.  Estamos inmensamente felices de ser vanguardia en el país de estos nuevos procesos disruptivos de la educación y sobre todo para nuestros jóvenes, que todo nuestro esfuerzo está destinado a ellos, pero también a los más viejos, a todos”, culminó.
El ex gobernador se trasladó después al escenario político y sostuvo que la transformación educativa también será evaluada en las urnas. “Nuestro espacio político, es un espacio también disruptivo, abierto, no tiene limitaciones, salvo en la defensa de los intereses de los misioneros”.
“Más allá de las nominaciones, de los cargos, de quién va primero, quién va segundo, me animo a decir que el sentimiento acorde a nuestra historia política, es un sentimiento de familia, de unidad, de hermandad. Celebro cómo ha ido transcurriendo, a contramano de un país, donde las internas son el denominador común de los espacios políticos, donde la pelea, por quién va primero y nadie quiere ir siquiera segundo.
Cuando hay un proyecto político, es como ésta mesa, hay que invitarlos a todos. No importa donde está, pero es importante el que está allá, el que está ahí, el que está acá. Somos todos importantes, porque ahí se va armando la comunidad y así se va amalgamando. Y es la garantía frente a la sociedad. Yo celebro que nuestro espacio es muy heterogéneo. Tiene dirigentes de todos los partidos políticos tradicionales de la Argentina, pero sobre todo, está integrado por misioneros, donde observamos razones superadoras a las ideológicas y ese denominador común, hoy nos permite proponer con tranquilidad, porque la palabra empeñada por nuestro espacio político, es palabra cumplida y donde lo principal no es la lucha por los cargos”, subrayó.

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