En plena incertidumbre política y económica, el mercado trata de anticipar que precio tendrá el dólar pasado el balotaje del 19/11.

Tras las sorprendentes elecciones del 22 de octubre, con la victoria de Sergio Massa sobre Javier Milei, se han generado profundas inquietudes y especulaciones en el ámbito económico del país. Hasta hace poco, se daba por sentado que el candidato de derecha se impondría en las elecciones y que llevaría a cabo una dolarización de la economía. No obstante, el escenario ha cambiado drásticamente, y los actores del mercado ya están contemplando diversas posibilidades para el año 2024, incluyendo la idea de un desdoblamiento cambiario. La pregunta que ahora todos se hacen es: ¿A qué nivel podría llegar el valor del dólar en este nuevo contexto?

De acuerdo con iProfesional y las estimaciones de expertos, en la actualidad, la economía argentina opera con un tipo de cambio promedio en torno a los $500. Este valor se compone de una combinación de factores, incluyendo el dólar a $350, el Contado con Liquidación a $860 y distintos tipos de cambio “exportadores” que permiten a las empresas liquidar sus operaciones con un 30% de dólar financiero.

Esta mezcla de factores ha llevado a que los precios en la economía se ubiquen aproximadamente un 40% por encima del tipo de cambio oficial.

El mercado financiero anticipa una posible devaluación tras la asunción del próximo presidente. Esto ha desencadenado la discusión sobre la implementación de un desdoblamiento cambiario en Argentina, en caso de que Sergio Massa asuma la presidencia el 10 de diciembre.

Se espera que se mantenga el control de cambios, ya que la mayoría de los analistas concuerda en que, si la economía no ha sufrido una hiperinflación hasta el momento, se debe a las restricciones en el acceso a los escasos dólares que el Banco Central posee.

El Gobierno ha atribuido la escasez de dólares a factores como la sequía, pero cifras estimadas demuestran que entre enero y septiembre del año pasado, el sector agropecuario liquidó 33.737 millones de dólares, mientras que este año solo ha aportado 13.844 millones de dólares.

Aunque se han perdido 20.000 millones de dólares, es importante destacar que en el rubro energía, el año pasado se redujeron las importaciones en 4.967 millones de dólares, mientras que este año se recuperaron cerca de 3.300 millones de dólares. En cuanto al resto de las importaciones, el año pasado se gastaron 23.733 millones de dólares, y este año se han gastado 14.977 millones de dólares (gran parte de los cuales se relacionan con la deuda comercial).

Además, el Banco Central pasó de tener un saldo favorable en el mercado de cambios de 5.000 millones de dólares a un saldo desfavorable de 1.819 millones de dólares.

Todo esto señala una pérdida significativa de reservas, lo que subraya la necesidad de un ajuste en las tasas de cambio. La última devaluación realizada en agosto, que fue del 22%, prácticamente se ha desvanecido. El tipo de cambio real multilateral ha caído un 10% con respecto a la situación previa.

Otro consultor financiero, Salvador Di stefano, sugiere que los contratos de futuros indican un valor implícito del dólar de 394 pesos para este mes. Esto sugiere que el mercado no anticipa una gran volatilidad del dólar después de las elecciones. No obstante, el contrato de futuros del dólar para diciembre se encuentra en 668 pesos, lo que implica una tasa del 87,7% en comparación con el dólar contado. Esto sugiere que el próximo presidente podría llevar a cabo una devaluación de la moneda después de asumir el cargo el 10 de diciembre próximo.

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