La CEM vuelve a reclamar una atención especial para Misiones por las asimetrías
La Confederación Económica de Misiones aprovechó la visita del candidato a diputado nacional por Buenos Aires, Matías Tombolini, para ratificar su reclamo por un tratamiento especial para la provincia, como mecanismo de defensa ante las asimetrías con Paraguay.
“El encarecimiento de la economía argentina tiene consecuencias reales” afirma el economista Matías Tombolini en un informe que realizó sobre las dificultades de las provincias fronterizas y que presentó en los últimos días.
“Esta exposición no hace más que poner en evidencia, en números, lo que en Misiones, se percibe en la experiencia cotidiana. Cada vez es más evidente que a los comercios posadeños se les hace imposible competir con sus pares encarnacenos. Se refleja en este testimonio, que la limitación principal es la carga impositiva que asumen los que venden de “este lado”, señala un documento de la CEM.
Por los impuestos, los productos llegan a incrementarse hasta en un 40 por ciento. Esta diferencia de costos, es uno de los factores determinantes que seducen a los consumidores comprar fuera del país, dejando muy poco margen a la teoría que lo relaciona con la costumbre y la naturaleza de incursionar del otro lado de la orilla.
La relación impositiva con Paraguay
En Argentina la presión tributaria supera el 30%, mientras en Paraguay se manejan niveles en torno al 18%. El IVA, se paga en Argentina un 21% mientras que “enfrente” la alícuota asciende al 10%.
En el caso del impuesto a las ganancias en Argentina se paga al 35% y en Paraguay es tan sólo el 10%. Son números más que contundentes.
“Esta comparación que hace Tombolini, evidencia que son los precios más accesibles, que sin bien están sujetos a observaciones de calidad y de garantía, los que hacen más atractivos a los comercios vecinos, cuya rentabilidad tiene márgenes más flexibles debido al porcentaje de impuestos que asumen”, explica la CEM.
Diferencias pronunciadas
Con este escenario, que representa el informe del especialista en economía, “para que un local de Posadas tenga la misma rentabilidad que uno en Encarnación debe vender el producto un 40% más caro”.
Basta una simulación de venta con resultados reveladores: computando todos los costos impositivos y cargas laborales hasta el consumidor final. Un producto que el fabricante vende a mil pesos, y que para ser rentable en Argentina debe venderse a 2428,51 pesos, en Encarnación se exhibe al consumidor en 1708,48 pesos. En este caso del hipotético producto de mil pesos, la carga impositiva en Posadas sería de 627 pesos (Ingresos Brutos, padrón de comercio, débitos y créditos y el IVA), mientras que en Encarnación, el mismo producto pagaría solo 135 pesos de IVA.
Otro caso contundente se percibe en el relevamiento particular de algunos productos específicamente en Posadas y Encarnación llevan a resultados similares:
Una heladera LG side by side $49mil en Posadas contra $27mil 900 en Encarnación (75% más caro en Argentina) o un Split de 3000 frigorías $9.100 contra $4.900 (102% más caro en nuestro país).
Cercanía
El informe de Tombolini realiza, en otro capítulo de su investigación, una comparación con la situación que se vive en Cuyo por el éxodo hacía Chile, pero hace la salvedad en la diferencia y el condicionamiento del traslado hacia el destino, considerado que no es lo mismo cruzar la cordillera en avión con todas las restricciones que esto conlleva (costos y documentación), que hacerlo en tren o en colectivo y de manera “más accesible y directa” por el puente Roque González de Santa Cruz.
Controles flexibles
Entre sus conclusiones, Tombolini manifestó respecto de los controles en nuestra frontera que “la tenacidad de AFIP para con el comerciante posadeño no se observa con igual intensidad en los controles de Aduana, agrandando la asimetría a ambos lados del Paraná: poca presión y regulación en Paraguay y poco control a la hora de entrar contra un sector comercial local asfixiado de impuestos y controles”.
Definiciones de fondo
“Puede apreciarse, en una simple y sencilla observación, que con este desequilibrio, la competencia no es equitativa para los comerciantes misioneros. Lo alarmante, es que esta coyuntura ya no resiste la naturalidad propia de las situaciones incorporadas. No puede sostenerse con el paliativo que fomenta el consumo con plazos de financiación o masivas promociones que exhiban temporalmente rebajas en los precios. Más allá de estos aportes inteligentes, es necesaria una salida de fondo”, argumentan los empresarios misioneros.
“Amerita una revisión profunda que dote de herramientas que permitan competir en igualdad independientemente de la coyuntura. Son dos aristas inherentes las que intervienen en este esquema: la revisión de la carga impositiva y las respectivas consideraciones especiales para Misiones, inmersa en un 90 por ciento de límites fronterizos”, concluye la CEM.