Cristina en Misiones: “Todos debemos deconstruirnos un poco después de lo que ha pasado”
La música potente precedió su ingreso. Una rockstar de la política como no hay otro en la región. Cristina Fernández genera eso. Jóvenes peronistas, viejos con bastón, guaraníes, gauchos, radicales progresistas, rubios, morochos, todos celebrando al unísono al grito de “vamos a volver”.
“Todos debemos deconstruirnos un poco después de lo que ha pasado”, definió la candidata a vicepresidente del Frente de Todos después de ratificar la palabra “caos” para definir al gobierno de Mauricio Macri.
La ex Presidenta advirtió: “Basta de mitos, de asustar y de mentir”. Se refería a los argumentos de campaña del propio Macri y algunos medios que agitan el fantasma de que un Gobierno de Alberto Fernández sería antiempresas y no cumpliría con el Fondo Monetario Internacional.
“Como dice Alberto, por supuesto que vamos a cumplir con nuestras deudas pero no esperen que lo hagamos haciendo sufrir al pueblo argentino. Que nadie espere que lo hagamos a costa del pueblo argentino”, precisó.
Pero antes de las cuestiones políticas -el libro Sinceramente fue la excusa del encuentro-, Cristina tuvo tiempo para recordar que hace exactos diez años también había venido a Misiones, pero en ese momento, para asistir a las víctimas del tornado de San Pedro, del que este sábado se cumplió una décad. “La verdad es que cuando leí los diarios, me dio cosas, porque cuando programamos la visita, no reparamos en el día”, explicó. Después recordó que se fue hasta el lugar junto al ex gobernador Maurice Closs y que el electo, Oscar Herrera Ahuad, quien la recibió como director del hospital local.
El polideportivo Finito Ghermann estaba colmado y afuera, otra multitud observaba por pantalla gigante la reivindicación de la política: dentro compartían el espacio los candidatos peronistas Rafael Pereyra Pigerl, Cristina Britez y Cacho Bárbaro, el gobernador electo Oscar Herrera Ahuad, el intendente Joaquín Losada, el senador Maurice Closs y todos los diputados nacionales de la Renovación, Verónica Derna, Flavia Morales, Daniel Di Stefano, Jorge Franco y Ricardo Wellbach. El ex presidente de Paraguay, Fernando Lugo, estaba en primera fila y mantuvo una reunión previa con Cristina, lo mismo que Passalacqua y Herrera Ahuad.
El presentador, Marcelo Figueiras disparó los temas para entrar en calor. Señaló que Cristina pasó por cinco corridas cambiarias sin recurrir al FMI y superando cacerolazos en contra del cepo que se aplicó para frenar una posible corrida. “Ahora sin crisis, se cae a pedazos”, sentenció.
Cristina respondió. “En 2008 la crisis fue peor que la de 1930 y lo hablamos mucho con Lula -quien se llevó una gran ovación- sobre cómo reaccionar y él decía que había que evitar la profecía autocumplida. Pusimos el Repo para ayudar a sostener el empleo y lanzamos créditos para la actividad económica”, enumeró.
“Algunos, por ahí, me decían que debía haber dejado que se sienta un poco la crisis para que vean que se hacía un esfuerzo grande. Pero no. La tarea de un gobernante no es hacer sufrir a la gente. La tarea es impedir que la gente sufra y articular todo el esfuerzo para esto”, enfatizó.
“No nos votan para echarle la culpa a otros”, replicó y cuestionó que “cada vez que se aplican políticas neoliberales el país termina en crisis”.
“Tenemos que ponernos de acuerdo para poder abordar esto a partir de la experiencia histórica. Me pone muy mal que cada 10 o 15 años argentina repita crisis cíclicas. Va a requerir un nuevo orden y un nuevo contrato social, de todos en la medida de sus responsabilidades, porque cuanto más tenés, más responsabilidades se tiene. Hay que volver a ordenar todo, pero no en el viejo orden, sino en algo nuevo, distinto y mejor que lo que tuvimos. Creo que esto va a requerir de todos nosotros, ciudadanos y ciudadanas, y también de los sectores económicos, de los sectores sociales, un gran esfuerzo”, argumentó.
“Esta es la clave de los tiempos que vienen y que todos seguramente con inteligencia, con capacidad y con solidaridad vamos a poder construir. Un nuevo orden, de eso se trata lo que queremos hacer, con todos y con todas”.
Cristina recordó que Néstor Kirchner pagó la deuda histórica al FMI, de más de 50 años, pero que, sin embargo, era de poco más de diez mil millones de dólares. Trajo a colación al ex ministro de Economía, Nicolás Dujovne, quien admitió en un reportaje que Macri recibió un país desendeudado, con el 8% del PBI en dólares. Y lo comparó con el modelo económico actual. “Nunca se vio algo igual. En tres años y medio un solo presidente nos endeudó con el fondo por 57 mil millones de dólares, es esto lo que creo que deberíamos ver y reveer quien va a pagar”, agregó luego en su crítica al pacto con el Fondo Monetario Internacional al que recurrió el presidente en medio de la crisis cambiaria.
Gracias @CFKArgentina por venir a nuestra Provincia que tanto te adora. Gracias por tu compromiso con los misioneros y todos los argentinos.
— Cristina Britez 🇦🇷☀ (@cbritezmisiones) September 7, 2019
Nos merecemos bellos milagros y ocurrirán.#CristinaEnMisiones pic.twitter.com/cqOrqeUtVT
La ex mandataria comparó momentos de la historia reciente y sostuvo que en 2001 no había esperanzas de un país diferente, pero que después, los doce años y medio de kirchnerismo, “son prueba de que, con aciertos y errores, hay un modelo distinto”.
Cristina rechazó que la propuesta del Frente de Todos sea antiempresa o anti FMI. Y puso como ejemplo a Vaca Muerta. “Nosotros la recuperamos, cuando recuperamos YPF y cerramos un acuerdo con Chevrón. Pero es obvio que queremos que los precios para el consumo y la actividad local, sean en pesos y no dolarizados”, se diferenció.
Antes de despedirse y prepararse para firmar libros, Cristina pidió “tener pensamiento propio” de cara a las elecciones que se avecinan. Unos cuantos tuvieron la suerte de llevarse el autógrafo en Sinceramente. Los demás, afuera, no abandonaron su lugar hasta el saludo de un balcón improvisado en el Finito Ghermann.