El intendente de Campo Grande, Carlos Sartori, aseguró que la perspectiva indica que será “un año duro”, pero confió en que tomen medidas que reactiven el consumo.

El intendente de Campo Grande, Carlos Sartori, precisó que la situación económica de su municipio no difiere demasiado de las demás comunas en cuanto a la baja de la recaudación, y la caída del poder adquisitivo de la gente que golpea al comercio principalmente.

“Hay que ser cautos en el manejo de los recursos, nosotros procuramos atender la demanda de los vecinos en cuanto al arreglo de calles, caminos terrados, hay que priorizar las obras que se piensan ejecutar”.

El jefe comunal informó que a través de Nación concretan obras con una inversión de 70 millones de pesos para redes de agua, y cloacas, empedrado, cordón cuneta, que beneficiará a 589 familias. Además realizan trabajos de entoscado y perfilados en más de 900 kilómetros de los 1.700 kilómetros de caminos rurales que tiene la localidad.

Campo Grande cuenta hoy con más de 18 mil habitantes y accede a recursos a través de la recaudación propia (40 por ciento) y por la coparticipación provincial (60 por ciento). Estos recursos sufrieron una caída el último año, razón por la que el intendente espera que en poco tiempo se radiquen empresas, industrias que permitan impulsar el ritmo de la economía. Anunció asimismo, que el 25 de mayo se inaugurará el nuevo centro cívico del municipio.

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