Más de 5 millones de cabezas de ganado están afectadas por la crecida del Paraná
Las recientes precipitaciones a lo largo y ancho del país causaron estragos en las zonas linderas a los ríos debido a crecidas en sus caudales. Una de ellas, las costas del Paraná. Mucha actividad ganadera sucede allí, teniendo que forzar a los productores a realizar masivos movimientos de hacienda.
El Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones Internacionales (IEEyNI) de la Sociedad Rural Argentina estima que pueden verse afectadas poco más de 5 millones de cabezas, en las provincias de Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chaco, Buenos Aires y Santa Fe.
El mayor impacto se vería en la costa este del río, ya que en las provincias litorales están en peligro entre un 30% y 37% de su stock provincial. Por el lado de la costa oeste, la más afectada es Santa Fe, con 6 departamentos aledaños al río y un 15% de su stock en alerta.
Los socios y productores de la entidad relataron la situación en sus provincias:
Mario Capozzolo, Reconquista y Malabrigo, Santa Fe: “La mayoría de los isleños están sacando la hacienda cuando van pudiendo a medida que le van dando las chatas de carga y ya la están llevando a todo lo que es la zona de altura en los campos cerca de Reconquista. En la zona se superaron los cinco metros del río así que los productores están tratando de sacar la hacienda para que no le llegue el agua al cuello, aunque dicen que no va a subir tanto el nivel del agua debido a la histórica seca que estamos sufriendo, pero sí ya están abriendo el Paraguay. Además, isleros chicos de la zona de Villa Ocampo están pidiendo a los que transitan por la ruta 11 que tengan cuidado porque hay mucha hacienda en las banquinas”.
Analía Esperón, San Nicolás y zona del Delta, provincia de Buenos Aires: “Tengo un barco ganadero con capacidad de carga de cinco jaulas. El panorama que estamos viendo acá es la no baja de la situación de las aguas por el tema de la sudestada. Si bien los campos son altos, hay varios albardones, la situación es de sacar todo lo gordo para faena y ver cómo sigue el paso del Niño. Estamos muy alerta con lo que pasa en Corrientes, Rosario y con la situación de Andresito e Iguazú“.
Juan Diego Etchevehere, Paraná, Entre Ríos: “Los productores ganaderos entrerrianos que desarrollamos nuestra actividad también en islas, nos encontramos trasladando los animales a las alturas y preparándonos para salir lo antes posible a tierra firme. El pico de la creciente llegará a nuestra zona, departamento La Paz, entre el 9 y el 11 de noviembre e inundará por completo (según las previsiones) todas las islas de la región.
En Entre Ríos hay en la actualidad más de 600.000 cabezas de ganado en las islas y los productores afectados por esta creciente llegaríamos a 3.000. Actualmente hay un gran déficit de barcazas para salir rápidamente con tantos animales. Los barqueros se encuentran realizando un gran esfuerzo para que esta crecida del río Paraná no se convierta en una tragedia.
Hoy cuesta mucho encontrar campos disponibles para albergar tantos animales y los feedlot, en su mayoría, están llenos. Hay que recordar que Entre Ríos vivió recientemente una de las peores sequías de su historia por lo que en la actualidad casi ningún productor tiene reservas ni forrajes disponibles”.
Víctor López, Esquina, Corrientes: “La crecida del río Paraná, que es el que nos afecta en nuestra zona, es la más importante en los últimos 20 años. Actualmente está en 39 el río Iguazú, o sea que prácticamente va a quedar todo bajo agua, no va a quedar ninguna isla, eso es lo que se prevé. El pico va a llegar en esta zona a partir del domingo.
En el área hay más de 20.000 cabezas, de pequeños y medianos productores y algunos grandes también. Los productores van a tener que sacar y están sacando toda la hacienda, no va a quedar nada. La situación es muy dramática, teniendo en cuenta que en la zona de Islas del Paraná solamente operan dos barcos y lo otro que está sobre las islas del río Corrientes y las más cercanas a la costa de Corrientes, se puede sacar a nado que lo están haciendo la mayoría de los productores con gran esfuerzo.
El campo se está recuperando recién después de tres años de sequía, así que es un combo complicado y afecta enormemente al sistema productivo ganadero, sobre todo porque muchas vacas están pariendo, y lo más grave de todo esto es la falta de campo afuera.